Anunciado semanas antes del E3 no se puede decir que haya sido uno de los juegos que más ruido hicieran durante esas fechas pero para los jugadores que buscan títulos más arriesgados y que aporten algo distinto visualmente seguro que le han seguido la pista y han podido contemplar alguna imagen o tráiler y sentir curiosidad por este prometedor título. Nos encontramos ante un juego de acción en tercera persona o usando el término muy de moda últimamente se trata de un hack and slash, un juego del estilo de los conocidos Devil May Cry, Ninja Gaiden o God of War aunque con bastantes peculiaridades que aparentemente lo diferencian de todos estos títulos, ya que además de un original diseño artístico que hace un uso muy logrado de la técnica cel shading nos encontraremos con un juego que hará especial hincapié en los momentos de exploración y plataformas.
Hace ya más de dos años la editora británica Ignition Entertainment anunciaba la creación de dos nuevos estudios en Florida y Tokio destinados a crear juegos para PlayStation 3 y Xbox 360 ya que hasta entonces solo se habían publicado juegos para Nintendo DS y Wii.
El primer juego de esa nueva apuesta fue Deadly Premonition, un título de terror que fue lanzado a principios de año para X360 en el mercado norteamericano a un precio muy reducido que unos meses después llegaría a Japón junto con la versión para PS3, un juego del que aún no tenemos fecha de lanzamiento en Europa y que fue calificado por la prensa como simplemente correcto aunque recibido con algo más de entusiasmo por el público.
El Shaddai es la nueva apuesta de Ignition Tokio para X360 y PS3 y viene apadrinado como director del proyecto por Sawaki Takeyasu, quien trabajó en Capcom en juegos como Devil May Cry y Okami, famoso este último por sus preciosos diseños de los que Takeyasu fue responsable y cuyo peculiar estilo vuelve a repetirse de cierta manera en lo que hemos podido ver de El Shaddai, que si en algo destaca a primera vista es en su diseño artístico.
No será la primera ni la última vez en la que un anime o videojuego japonés coge un motivo religioso como pretexto para desarrollar una historia, en esta ocasión han tomado como referencia el Libro de Enoc, un libro apócrifo bastante enigmático perteneciente a la apocalíptica judía que narra entre otras cosas una historia de ángeles caídos que fueron llevados a prisiones eternas y en el que se menciona a Enoc que de acuerdo con una doctrina judía fue transformado en Metatrón, al que se menciona en el título del juego. La otra parte de este es el término El Shaddai que tiene muchos significados entre ellos uno de los nombres Judaicos de Dios y también se refiere a la montaña divina de Mesopotamia.
El argumento del juego narra que tras enviar Dios a varios ángeles para inspeccionar la Tierra algunos de estos deciden quedarse por lo que Dios encargará a Enoch, personaje al que encarnaremos, la tarea de vencer o traer de vuelta a estos ángeles caídos antes de que decida inundar el planeta para acabar con la humanidad. Entre estos ángeles rebeldes se encuentra Lucifel, sí Lucifel con ele, un peculiar ángel caído de actitud chulesca que hasta se permite el lujo de usar teléfono móvil y que será nuestro antagonista.
El juego derrocha personalidad por los cuatro costados pero no solo su apartado artístico parece desmarcarse del resto de juegos sino que también se aleja bastante de las dinámicas de los juegos de acción en tercera persona que hemos visto en los últimos meses, un género más de moda que nunca que no para de recibir nuevas apuestas como el excelente Bayonetta, una de las sorpresas en lo que llevamos de año, o el decepcionante Dante's Inferno. En El Shaddai según sus creadores la mitad del desarrollo estará destinado a la acción y la otra a la exploración con resolución de puzles y fases de plataformas, momentos estos en ocasiones con una perspectiva en dos dimensiones que hará las delicias de los amantes de este tipo de juegos.
La acción transcurre de un modo bastante clásico realizando combos mediante patadas y puñetazos y usando armas que podremos obtener robándoselas a los enemigos, que al pasar a nuestro poder cambiarán sus propiedades, una diferenciación la de nuestros enemigos y nosotros representada por el negro y el blanco que impregna todos los elementos visuales del juego.
Unas armas que prometen serán numerosas, hasta ahora hemos podido ver un arco, una espada y un látigo, y al parecer solo podremos portar una a la vez. En la pantalla del juego no dispondremos de indicaciones ni datos, contando con un interfaz de pantalla totalmente limpio, lo que potencia el preciosista aspecto de los escenarios por lo que para saber nuestra salud y la de nuestros enemigos deberemos estar atentos a algún tipo de aviso visual en nuestro personaje así como observar el comportamiento de nuestros enemigos que variarán sus animaciones y en los que destruirán elementos de sus armaduras según les vayamos golpeando.
Estos por lo poco que hemos podido ver tienen unos originales diseños recordándonos incluso en algún momento a algunos de los vistos en los juegos del Team ICO, lo que sin duda es un elogio y parece ser que en nuestros enfrentamientos con los ángeles caídos que hemos ido a buscar tendremos algún tipo de decisión de poder matarlos o salvarlos que no sabemos cómo afectará al desarrollo del juego.
Los fases de exploración podrán ser tanto en una perspectiva en tres dimensiones como en una clásica en dos dimensiones donde viviremos los momentos más plataformeros y también una mezcla de estas dos perspectivas otorgando al juego un gran dinamismo visual. En los momentos en los que no estemos combatiendo se ha mencionado la inclusión de puzles aunque todavía no sabemos de qué modo y el hecho de que se haya dicho que las fases de exploración y plataformas serán más de la mitad del juego por encima de la acción nos parece bastante llamativo ya que en los últimos años la dinámica en los juegos de aventura ha sido ir eliminado estos elementos en favor de añadir cada vez más acción, siendo en ocasiones la exploración y el plataformeo algo casi testimonial.
Los gráficos hacen uso del cel shading, técnica que asimila el aspecto de los gráficos a los dibujos animados aunque de un modo distinto a los otros juegos en los que se remarcan en negro los bordes de los elementos, dando un resultado excelente con un gran colorido y momentos de auténtica postal, contando con uno de los diseños artísticos más destacados y originales en lo que llevamos de generación y todo un soplo de aire fresco que muchos usuarios estaban demandando, un aspecto visual tan característico que es inconfundible y bastará con ver una sola captura de pantalla para diferenciarlo del resto de títulos, no hay más que ver uno de los dos trailers hasta ahora disponibles para darse cuenta de su arriesgado diseño que no dejará indiferente a nadie.
La mano de Sawaki Takeyasu se nota y si con su trabajo en Okami consiguió crear uno de los juegos más bonitos de los últimos años con este parece dispuesto a tomarle el relevo. Las escenas de vídeo tendrán su importancia en la narración y están dirigidas con un estilo totalmente anime en las perspectivas y en los movimientos y parece que contarán con sus toques excéntricos que no pueden faltar en todo videojuego japonés que se precie, esperemos que sin llegar ni acercarse a la cotas del alocado aunque genial Bayonetta, juego curiosamente que también tiene ángeles y referencias bíblicas en su trama y que estaba dirigido por Hideki Kamiya, otro ex de Capcom junto al que trabajó Takeyasu en Devil May Cry. Por último también destacar la prometedora banda sonora que parece acompañar debidamente con unas bellas composiciones las preciosas estampas del juego.
Con un lanzamiento para este año en Japón su llegada a Europa está prevista para 2011 sin fecha concreta aún anunciada, pero seguiremos atentos el desarrollo de este juego que parece capaz de resultar algo fresco con un look visual sorprendente y preciosista junto a una jugabilidad que mezcla acción y plataformas a partes iguales, que a estas alturas de la generación en la que algunos estamos un tanto hastiados de tantos marines musculosos con cara de malas pulgas que combaten en entornos oscuros y lúgubres un título de estas características nos parece un milagro caído del cielo, nunca mejor dicho.