Los juegos de superhéroes y los que están basados en películas se han ganado durante muchos años un comprensible halo de desconfianza por parte de los jugadores, tras decenas de adaptaciones muy mejorables. Es por esto que cuando un juego basado en una de esas licencias es bueno, parece como algo aislado. Y si ya el juego es muy bueno, casi ni nos lo creemos. Podría ser éste el caso de Batman: Arkham Asylum, la obra de Rocksteady que no sólo demostró que un juego basado en el hombre murciélago podía ser muy bueno, sino que fácilmente podría ser uno de los mejores juegos de acción del 2009.
Un año después, Rocksteady firmaba Batman: Arkham City, un juego mucho más ambicioso y amplio, que demostraba que Asylum no era mera cuestión de suerte, y que podría ser el origen de un brillante futuro para Batman. Con Rocksteady más que probablemente volcado por completo en la nueva generación, los chicos de Warner Bros.
Games Montréal –que ya tienen experiencia en la saga, llevando Arkham City a Wii U– se encargan de dar forma a un nuevo título que mantenga el por ahora ritmo bianual de la saga. Hablamos de Batman: Arkham Origins.
Los primeros detalles del juego fueron desvelados oficialmente por la publicación norteamericana Game Informer, y posteriormente, el medio británico Games Master aportó su granito de arena para ilustrar el juego que se perfila como uno de los más serios candidatos a combatir por el puesto a juego de acción de año, si bien es cierto que la competencia no se lo pondrá sencillo. Desde su título, Origins, ya se podría deducir que se remontaría a los orígenes del Caballero Oscuro, pero aún a varios meses de su lanzamiento, son múltiples los detalles que se conocen sobre este juego.
Pesadilla antes de Navidad
Batman: Arkham Origins se sitúa varios años antes de los dos anteriores episodios. En Nochebuena, un grupo de villanos se proponen dar caza al superhéroe, capitaneados esta vez por un rival menos mediático, pero igualmente mortífero. Black Mask, o Máscara Negra, es un económicamente poderoso villano que, en su búsqueda de venganza contra Batman, reúne a un equipo de ocho despiadados enemigos cuyo objetivo es poner fin a la vida de nuestro héroe. Roman Sionis, el hombre tras la máscara, ofrecerá una resistencia distinta a la que hemos vivido contra el Joker, ya que enfoca los ataques desde otra perspectiva. "Lo suyo es la tortura. Eso es lo que le pone. Y se le da bastante bien", comentaba el director creativo del juego, Eric Holmes, dejando entrever lo que nos aguarda.
Para enfrentarnos a este ataque, trasladamos ahora hasta Gotham City. Ésta estará dividida en al menos dos partes. Por una parte, tendremos "Northern Gotham", o Gotham del Norte, probablemente también identificado como "Old Gotham" o Antiguo Gotham. Ésta sería un área de edificios habitados por familias humildes, sin grandes lujos, que además se ve poblada en el extrarradio por edificios industriales. Como oposición, encontramos "New Gotham" o Nuevo Gotham, el área rica, con edificios mucho más altos y estilizados, y cuya prosperidad ha resultado en una superficie que duplica la mencionada anteriormente.
Batman versión 0.9
Al situarse varios años antes de los eventos de Arkham Asylum y Arkham City, nos encontramos con un Batman algo diferente. Warner Bros. Games Montréal asegura que si el del último episodio es Batman 5.0, el de Origins sería Batman 0.9. Como comentábamos, este juego nos permitirá vivir la historia de cómo un Batman con relativa poca experiencia y "sin pulir" se convierte en el Caballero Oscuro. Eso sí, prácticamente todas las habilidades conocidas estarán presentes en Batman: Arkham Origins.
El sistema de combate, por ejemplo, seguirá las bases del que ya conocemos, aunque aprovechará para expandirse con nuevas dimensiones, tácticas y, como cabe esperar, nuevos tipos de enemigos. Seguirá siendo posible también utilizar las habilidades que nos permiten infiltrarnos en zonas altas y, desde éstas, amarrar a rivales, darles una patada, alternar entre escondites, etcétera. Las habilidades fuera del combate de Batman, como el modo detective, o los distintos gadgets que tiene a su servicio también han sido revisados, dándole un toque de distinción sin modificar la esencia de los conocidos. Entre nos nuevos dispositivos, hay un gancho que al más puro estilo Just Cause 2 nos permite trepar y tirar de objetos.
La lucha contra el mal
Por su parte, los enemigos plantearán nuevos desafíos. Ahora son más inteligentes, y en cierto modo, evitarán quedarse esperando su ración de bat-tortas cuando nos atacan en grupo. Aprovecharán la verticalidad de los escenarios, y nosotros dejaremos de ser los únicos que podamos sorprender desde las alturas. No sólo estos mercenarios y secuaces irán tras nosotros, sino que además las influencias tanto personales como económicas de Black Mask han dado vida a un cuerpo de policía corrupto que también irá tras nosotros.
Los enemigos básicos tendrán una gran presencia en el juego, pero en lo que respecta a los grandes villanos, se repartirán protagonismo con diferentes historias paralelas que se desarrollarán dentro de la mecánica "Most Wanted", o los más buscados. Además de Black Mask y Deathstroke –los dos confirmados oficialmente por el momento– otros seis supervillanos compartirían protagonismo en Batman: Arkham Origins. Así, podríamos ir descubriendo sus distintas historias fuera del argumento principal.
Otras adiciones en Batman: Arkham Origins
Pero no acaban ahí todas las novedades de Batman: Arkham Origins. El juego incluirá varias opciones nuevas en los modos de juego, además del mencionado "Most Wanted". Tenemos una serie de misiones secundarias llamadas "Crimes in Progress" –crímenes en progreso– que nos darán respeto si salvamos a los policías, y que probablemente podrían significar la introducción del conocido James Gordon, el jefe de policía de Gotham City que conocerá por primera vez a Batman en este título.
También estará el modo "Dark Knight", o Caballero Oscuro, que nos irá ofreciendo misiones cada vez más complicadas para los que buscan un auténtico desafío. Independientemente de este modo, el juego ofrecerá mejoras puntuales si, en un determinado momento, nos quedamos, por ejemplo, atascados en una misión y necesitamos una pequeña ayuda para progresar.
Dada la amplitud de la nueva ciudad, además, contaremos con el Batwing para trasladarnos por ella, aunque estará limitado a momentos puntuales dentro del argumento de juego, o para el "viaje rápido" entre dos puntos distantes de Gotham. Esto introducirá también una serie de misiones que nos propondrán desmantelar una red de torres que emiten una señal que bloquea la llegada del Batwing y, consecuentemente, impidiéndonos trasladarnos hasta allí si no es a pie.
Batman promete volver a ser un serio candidato para juego del año
Aunque no esté Rocksteady de por medio, el estudio ya ha asegurado que confían en Warner Bros. Games Montréal, e incluso le han proporcionado todos sus materiales –desde arte hasta ajustes del motor– para asegurarse de que Batman: Arkham Origins sigue los pasos de sus predecesores. Las bases están bien sentadas, y por el momento parece ser que construyen en la dirección correcta. Además, este título contará con Batman: Arkham Origins Blackgate, una continuación para Nintendo 3DS y PlayStation Vita que nos ofrecerá un nuevo acercamiento a la aventura del superhéroe. Sobre la mesa, parece que tenemos el título más ambicioso del hombre murciélago hasta el momento, algo que, de materializarse, volvería a convertirlo en un serio candidato para convertirse en uno de los juegos del año.