Wild Season se presentó en Kickstarter como un juego inspirado en la saga Harvest Moon de Marvelous. La verdad es que no hace falta que Quickfire Games, sus creadores, no los indiquen. Desde el logotipo a la ilustración principal este proyecto recuerda inevitablemente –y no ya sólo por la temática- a dicha serie de rol/simulación granjera. Donde algunos jugadores encontrarán una falta de ideas, otros verán un homenaje necesario: tampoco es un género del que abunde la competencia, y menos fuera del mercado portátil.
La campaña de recaudación no se excedió con el objetivo: 22.500 libras, que superó por poco. La cifra es una minucia si se compara con ese monstruo mediático de Mighty No. 9 y sus 3,8 millones de dólares. No obstante, las menciones a Harvest Moon, Animal Crossing, Rune Factory y Thousand Arms despertaron la curiosidad de los usuarios que mostraron su apoyo. El enfoque se dice será maduro en la historia, con problemas más profundos que en otros juegos, y hay un elaborado sistema social que detectará si el comportamiento es amigable o no, las horas de bebida, si las visitas a otras casas son a horas inoportunas o si los personajes se sienten vigilados. Promesas que suenan muy bien para dar una vuelta de tuerca al concepto de granja y comunidad en constante crecimiento.
Actualmente Wild Season está en fase de acceso anticipado de Steam, lo que nos permite probar este título en un estado inacabado y ver algunas de sus características, pero aún estamos lejos de poder dar un veredicto porque falta contenido, tiene diversos aspectos limitados y sus ajustes –gráficos, de control- son inexistentes.
El sonido, por ejemplo, apenas se puede escuchar pasadas las primeras pantallas, sea por un error de la versión o por una función desactivada, aunque lo poco que hemos oído no suena mal. Ahora mismo el ratón no se utiliza en la interfaz, lo cual es bastante incómodo para la navegación por menús. Son en cualquier caso defectos que serán subsanados en el futuro.
Esta historia comienza con un personaje editable, chico o chica, que decide cambiar la ciudad por aventura rural comprando una granja. Muy pronto descubrimos varias sorpresas desagradables: nos la han jugado y el terreno no estaba en venta, y peor aún, se encuentra en un estado ruinoso, nada que ver con las fotografías promocionales. La típica clavada de manual. Pero nadie ha dicho que los comienzos sean difíciles, y tras conocer a una población extrañamente reticente a nuestra visita, decidimos no mirar atrás. Hemos llegado aquí para seguir adelante y devolver los días gloriosos a nuestro nuevo hogar.
Wild Season incluye –o mejor dicho, incluirá en el lanzamiento- todas las funciones que podemos esperar de un primo lejano de Harvest Moon, como la crianza de animales, fabricación de bebidas alcohólicas –cerveza, vino-, cocina, conversaciones con personajes secundarios, cultivo, romances –se contemplan las del mismo sexo-, festivales con competiciones de carreras y un misterio a desentrañar en la historia. Es en resumen todo lo parecido que puede ser a los juegos de Marvelous sin cruzar la línea del plagio. Esto al menos en la teoría, en la práctica todavía dista de la calidad de esos referentes.
En nuestra experiencia Wild Season arranca demasiado lento, es una introducción a la aldea y los personajes que lleva bastantes minutos, pero hay que admitir que los vecinos muestran diferente personalidad. Es interesante ver sus reacciones con nuestra presencia que parece incómoda en todo momento, y cada uno es carismático. Una cosa que nos gustaría que se cambiase –y seguramente no lo haga- es que la plaza central de la aldea, donde se encuentran los principales establecimientos, es demasiado amplia. No queda tan a mano cada local principal –tiendas, taberna, etc- y las calles están vacías, por tanto la exploración se hace más lenta de lo deseable. Una aldea más acogedora ahorraría tiempo en las tareas más cotidianas.
Pese a funcionar en el motor Unity, perfectamente capaz de gráficos tridimensionales, Quickfire Games se ha decantado por 2D de vista superior. Ningún problema con eso, hay excelentes ejemplos –y muy recientes- como Pillars of Eternity que han reivindicado el uso de ilustraciones para el escenario con un resultado más que aceptable. Con Wild Season no hemos acabado tan contentos, y es que se ha optado por un estilo demasiado frío para personajes y especialmente fondos, la estética que popularmente se conoce "de juego Flash". Es menos detallado y más impersonal que, por ejemplo, Harvest Moon: The Tale of Two Towns, un juego de portátil con más animación visual.
Nos gustaría entrar más en materia de Wild Season como juego, pero si decides probar la versión disponible podrás ver poco más a la historia correspondiente a la primavera; hay parte de verano pero ya se nos indica que da problemas. El sistema de cosecha está simplificado, podemos apostar en las carreras de caballos y están disponibles los diálogos con los habitantes. Quedan por ver múltiples cuestiones importantes: minijuegos, pesca, voces y sonidos, las interacciones por relaciones, plantado de árboles y flores y naturalmente, el resto de estaciones. Es más una demostración que una prueba del juego –o la mayor parte del juego- sin pulir.
Quizás el inconveniente más destacable sea que está plagado de bugs de todo tipo –más de los habituales en un acceso anticipado, queremos decir-, y siguiendo los comentarios de los primeros jugadores, parece que incluso aparecen críticos que impiden comenzar a jugar –no ha sido nuestro caso, todo sea dicho-. Esta situación es poco deseable en un producto que ya cuesta dinero, aunque tenga solución pronto. En principio estará listo en cinco meses; veremos si no se retrasa algo más, que a tenor de lo jugado es muy posible.
Lo que sí hemos experimentado son bloqueos al abrir inventarios de los que no se podía salir de ninguna forma. Eso ha impedido nuestro progreso en ciertos puntos de la aventura y parecen ser muy comunes. Hay otros aspectos que aún deben ser corregidos, entre ellos que los personajes no siempre muestran un ciclo de actividades diarias, algo que resta mucho a la diversión de simulación e interés por socializar. Faltan tutoriales y acciones básicas, incluyendo poner el nombre a la granja, no están activas. En definitiva, buenas sensaciones con la parte que funciona y con todas las ideas que se van a implementar, pero todavía muchas dudas con lo la porción que queda por completar o mejorar. Y esta versión temprana no nos lo aclara demasiado.
Prometedor, pero todavía no está maduro
Wild Season tiene un gran potencial y entendemos que está en acceso anticipado, sí, pero cuidado: advertimos a los posibles compradores que aún queda un largo recorrido para que pueda justificar lo que nos parece un alto precio -30 euros- para su contenido y originalidad, al menos si lo comparamos con la oferta de Steam. Todos estamos de acuerdo que aspira a ser un Harvest Moon barato, y como tal debe ajustar el coste.
Apunta buenas maneras si corrige satisfactoriamente el código, y sin duda puede interesar a los fans de Harvest Moon que quieran disfrutar de un sucedáneo en alguna de las plataformas en las que se lanza Wild Season, que son varias: primero en PC y más tarde en PlayStation 4, Xbox One, PS Vita, iOS y Android. Por el momento habrá que seguir su evolución, no podemos recomendar su compra todavía, pero esperamos poder hacerlo en su lanzamiento.