Análisis de Regalia: Of Men and Monarchs (Switch, Xbox One, PS4)

Hace tres años Regalia - Of Men And Monarchs logró una exitosa campaña de financiación en Kickstarter, superando los 90.000 dólares recaudados –el doble de su cifra objetivo-. Después de su debut en 2017 para PC es el turno de las consolas –PS4, Xbox One, Switch- con la edición Royal Edition.

Hablamos de un juego de rol occidental inspirado en clásicos del JRPG, con combates tácticos protagonizado por Kay, un joven que descubre en el lecho de muerte de su padre que él y sus hermanas son los últimos de un linaje noble. Kay heredará el reino de Ascalia, pero la noticia que podría dar muchas alegrías no es tan positiva como pudiera parecer: se encuentra en un estado ruinoso y hasta arriba de deudas. En su visita al lugar deberá afrontar las responsabilidades y saldar el pago.

En consola nos llega con los mismos idiomas que en PC: textos en inglés, polaco y alemán, más voces en inglés. Los diálogos son en su mayoría en tono humorístico, con un elenco de personajes que congenian bien, pero la barrera del idioma para ciertos jugadores puede suponer un pequeño problema en ciertas elecciones y la lectura de bloques de texto durante las mazmorras.

Regalia toca varias mecánicas jugables, pero la principal consiste en los típicos combates de tablero, con unidades que se desplazan una cierta cantidad de casillas por el escenario, actúan y esperan el turno de los enemigos. Los escenarios suelen disponer de algunos obstáculos que pueden ser utilizados de manera estratégica, aprovechando cuellos de botella o haciendo que el enemigo de un mayor rodeo en su desplazamiento –y con suerte, atacar en más ocasiones-. A veces son un incordio: cortarán nuestra línea de ataque con las técnicas de largo alcance. No obstante no hay mucha más estrategia de posiciones o diferentes alturas, así que es un poco básico en esto.

Hay que señalar que el juego utiliza gráficos 2D para los escenarios y 3D para los personajes, precisamente lo opuesto a otros títulos del género, caso de la saga Disgaea. Esto tiene sus ventajas e inconvenientes, pues las animaciones son más fluidas que con sprites, pero a cambio no existe la posibilidad de rotar la cámara. En alguna ocasión hemos echado en falta esta posibilidad para ver más claramente el tipo de unidad enemiga que uno de nuestros personajes está tapando -no se utilizan transparencias-, pero en cualquier caso Regalia se basa en unas reglas que han demostrado su eficacia en innumerables ocasiones.

Entre las diferencias de su sistema de lucha respecto a otros títulos podemos mencionar que cada personaje –bien diferenciados en habilidades- tiene un puñado de técnicas que no utilizan puntos de magia, sino que hay un gasto de puntos de acción que se consiguen al inicio de cada turno. Los enfrentamientos tienen un objetivo principal –acabar con todos los rivales, sobrevivir una cantidad de turnos…- y otros opcionales con normas más específicas –gana sacando al tablero a un único personaje, por ejemplo- que añaden más extras si se cumplen.

Es interesante que se permita acelerar las partidas, y con varios grados de velocidad, porque este es un género en el que muchas veces el tiempo de partida se hace demasiado largo esperando el desplazamiento del enemigo o sus ataques. Y con más razón en Regalia, donde los enemigos suelen contar con una buena cantidad de vitalidad. No será muy estético ver las animaciones al triple de velocidad, pero a efectos prácticos se le puede sacar mucho uso.

Sin embargo, hay más que los dos apartados habituales -los combates y los diálogos al estilo de novela visual-. Por ejemplo, e hilado con el argumento, una de nuestras tareas es reconstruir el reino, hacer funcionar la economía y atraer a nuevos habitantes; en resumen, saldar la deuda, con un poco de libertad para decidir cómo –mazmorras, forjar alianzas, etc-.

Podrás construir y mejorar edificios, comprar, pescar, y hablar con personajes que aparecen en ciertos días de la semana –hay un sistema de calendario- para aumentar tu relación con ellos logrando a su vez mejores objetos en tiendas o mediante artesanía. Al margen de las misiones de historia y las aventuras en mazmorras, hay otros encargos del reino en diferentes categorías.

Las mazmorras no funcionan al sistema clásico –explorar un escenario- sino progresando por un mapa donde cada punto importante puede ser una batalla, evento o toma de decisiones. Regalia no se basa en el omnipresente autoguardado que hoy se utiliza en todos los juegos, así que debes tener mucho cuidado en arriesgar más de la cuenta.

No es un juego sencillo, en parte porque las explicaciones son muy escuetas –con pantallas de texto, pero pocos ejemplos prácticos- y que detrás de su aspecto aparentemente infantil los enemigos son agresivos, con importantes picos de dificultad. A cambio ofrece tres ajustes: normal, difícil y otro que permite disfrutar más de la historia, evitando incluso los combates. Evidentemente no es recomendable eliminar uno de sus aspectos jugables, pero es una opción más para aquellos que no tengan mucha práctica o paciencia en el género.

En cuanto a los fallos, empezaremos por uno que quizás no sea de los más graves, pero sí es molesto: las constantes pausas de cargas al cambiar de localización y atravesar puertas. No es tanto que sean un poco más largas de lo que recomendable para un juego que aparentemente es tan ligero en aspecto gráfico, sino que son muchas, y son de las que piden nuestra aprobación para volver al juego –no es el primero que lo hace y lamentablemente tampoco será el último-. Al cabo de unas horas desearás que estuviera más pulido.

El control por la interfaz en los combates tampoco es del todo intuitivo, y aunque al tratarse de un juego de ritmo pausado nunca llega a afectar demasiado a la jugabilidad, sí es un poco engorroso. Se nota que su origen está en PC y no se diseñó desde un principio para el pad.

Si bien en los combates no se cometen grandes fallos, tampoco es el mejor sistema que hayamos visto entre los SRPG. Además, el juego escala a los enemigos según nuestro progreso con la intención de ofrecer siempre un reto, pero también anula un poco el sentido a los enfrentamientos. La verdad es que el sistema de combate cumple sin más, y la valoración es un poco más positiva por el resto de apartados.

Por suerte, la banda sonora orquestal –un poco escasa y tiende a repetirse, eso sí- y los gráficos están a un buen nivel teniendo en cuenta su origen, ya no sólo independiente, sino financiado en Kickstarter. Tampoco es que tenga nada de memorable en ellos, pero el sombreado en los modelados encaja bien con los escenarios pintados de manera más tradicional.

Conclusiones

A veces da la sensación de que Regalia - Of Men And Monarchs quiere abarcar demasiado en lugar de centrarse y pulir una base sólida de SRPG –los combates son de lo que menos nos ha entusiasmado-. Aun así, como proyecto pequeño ofrece decenas de horas con una dificultad que siempre presenta cara, jugabilidad variada –relaciones sociales, gestión del tiempo, rol- y un aspecto audiovisual bastante digno.

Como título de rol estratégico puede decepcionar por la falta de profundidad, como aventura global da una mejor impresión.

Hemos realizado este análisis en PS4 Pro con un código que nos ha proporcionado Crunching Koalas.