Análisis de Fast RMX (Switch)
En Switch los juegos de carácter digital e independiente van a tener un peso muy relevante. Y es que al menos de inicio el catálogo de esta nueva máquina va a nutrirse principalmente de esta tipo de desarrollos, como bien puede ser esta que nos ocupa: FAST RMX.
Lejos de ser un título completamente nuevo, lo cierto es que esta obra de los germanos Shin'en Multimedia es un refrito (por así decirlo) del excelente FAST Racing Neo de Wii U, el arcade de carreras de claras reminiscencias "F-Zerianas" que tantos buenos momentos nos hizo pasar a muchos de nosotros.
Emoción excitante y futurista
Velocidad futurista de la mejor calidad.
Esa es la propuesta principal que nos ofrece este título, un vertiginoso arcade de conducción en el que podemos controlar naves antigravedad que poseen diferentes características (velocidad, aceleración y turbo) y cuyo número va creciendo a medida que progresamos.
El manejo de dichas aeronaves es realmente bueno y, además, una de las innovaciones que incluye esta edición en relación a lo disfrutado en el título original de Wii U es la compatibilidad con la vibración HD. Gracias a esto es posible percibir perfectamente el lugar exacto del choque o impacto y su intensidad, algo que en este tipo de títulos se deja notar bastante ya que añade más inmersión a la experiencia de juego básica.
Pero de lo que no cabe duda es que el gran protagonista de este juego es su increíble sensación de velocidad. Hasta que no te pones a los mandos de cualquiera de las naves elegibles y pisas a fondo en el trazado correspondiente no sabes hasta qué punto es rápido este título: es de los más frenéticos y vertiginosos en su género.
Precisamente por eso es necesario mantenerse concentrados en todo momento, a lo que se suma un nivel de dificultad relativamente desafiante… ¡o casi imposible si optamos por jugar en el llamado modo Héroe! Una modalidad sólo apta para expertos que seguramente provocará enfados y también muchas alegrías a aquellos que se aventuren a probarlo.
Y luego está el tema de las phases de las naves, que pueden ser azul y naranja. Esta dualidad es muy importante debido a que las zonas de turbo que se encuentran repartidas por cada escenario presentan un color determinado, siendo necesario hacer coincidir el tono de nuestra nave (o phase) para aprovecharnos del impulso extra, sucediendo justo el caso contrario si pasamos por dicha zona con la phase opuesta.
Un juego completo y deslumbrante
En cuanto a las modalidades de juego que ostenta esta obra, se trata de un título realmente completo que condensa en un mismo pack una gran cantidad de posibilidades tanto para jugar en solitario como en compañía.
En solitario y más allá del mencionado modo Héroe, también es posible disfrutar del modo Campeonato, en el que a lo largo de varias copas distintas debemos ir demostrando que somos los mejores sobre el asfalto (o la superficie que sea) en una buena ración de pruebas distintas. Una modalidad bastante trillada y para nada original pero que funciona perfectamente y, además, puede durarnos bastantes horas.
Y luego tenemos el modo multijugador. Es posible disfrutar de carreras a cuatro bandas en la misma consola, opción que también estaba disponible en el original pero que en este caso funcionan a 60 cuadros por segundo bastante estables y una resolución dinámica que según parece oscila entre 1080p y 900p. Todo un logro.
También está el multijugador competitivo online, el cual puede albergar hasta ocho participantes simultáneos. Y si bien ahora mismo no abundan todavía las partidas activas, apostamos a que pronto este pequeño inconveniente desaparecerá debido a la escasa cantidad de títulos disponibles para Switch y a la gran calidad que atesora esta producción, por lo que seguro que acaba siendo adquirida por muchos usuarios.
Además esta opción online funciona realmente bien y sin problemas perceptibles de lag ni demás contrariedades técnicas derivadas de la faceta online. Una modalidad que por sí misma puede proporcionar muchas semanas de diversión, al igual que el modo local para ocho jugadores que también presenta el título.
Otra de las innovaciones más importantes que ostenta esta nueva versión del juego en relación a lo plasmado en la edición para Wii U es su parcela gráfica. Y es que si ya en Wii U presentaba un aspecto visual despampanante, en Switch mejora todavía más, especialmente si disfrutamos del título en modo portátil.
Es un verdadero espectáculo contemplar el juego en movimiento. En modo portátil funciona a 720p y 60 imágenes por segundo constantes, mientras que en la televisión se comporta de igual forma (incluso a dobles en pantalla dividida) pero subiendo hasta los 1080p de resolución.
Y lo más impactante de todo es que a pesar de este hecho tanto el diseño de los circuitos, llenos de detalles, como el de las propias aeronaves es verdaderamente bueno, sumándose a esto una gran cantidad de efectos de luz, climatológicos y demás que añaden aún más vistosidad a su acabado técnico. Sin duda es uno de los títulos más llamativos de todo el catálogo de Switch.
El apartado sonoro rinde a un nivel similar, destacando la banda sonora de corte electrónico que nos acompaña en cada carrera, y los variados y magníficos efectos que es posible escuchar con suma nitidez.
Diversión y explosividad
Shin'en demuestra una vez más que son unos artistas a la hora de exprimir el potencial de las consolas de Nintendo. FAST RMX es un título de velocidad futurista trepidante muy bien construido, repleto de trazados y contenido y que ofrece sensacionales modalidades multijugador tanto online como en red local. Desafiante y divertido, supone uno de los mejores juegos que es posible adquirir de todos los disponibles para Switch. ¡No solo de The Legend of Zelda: Breath of the Wild vive el hombre (pero casi)!
Este análisis ha sido elaborado utilizando un código proporcionado por Nintendo.