Análisis NBA 2K26: El juego de baloncesto más divertido de los últimos años (PS5, PS4, Xbox One, Xbox Series X, PC, Switch 2, Switch)
Año tras año llegan los simuladores deportivos para gozo y disfrute de los aficionados al motor, al fútbol o, en el caso que hoy nos ocupa, al baloncesto, con un rey de la pista claro llamado NBA 2K.
Este año no iba a ser menos y desde hace unas semanas tenemos aquí NBA 2K26, una nueva entrega que llega para hacernos vivir la magia de uno de los deportes más espectaculares del planeta en un videojuego que es divertidísimo a los mandos y que está cargado de contenido para ofrecernos horas y horas de triples, bandejas, mates, bloqueos, robos y la tensión de este trepidante deporte.
El rey de la cancha: una jugabilidad que da un paso adelante
Vamos a empezar por la jugabilidad, el aspecto más importante de cualquier simulador deportivo, ya que de nada sirve lo demás si no tenemos un videojuego que sea disfrutable dentro de la cancha.
Desde luego, NBA 2K26 es divertidísimo de jugar.
Sobre el papel tenemos varias mejoras gracias al motor de movimiento ProPLAY basado en una herramienta IA de aprendizaje automático que recoge movimientos y datos de partidos reales de la NBA para acabar trasladándolos al videojuego.
En esta ocasión es algo que va más allá de los clásicos movimientos personalizados de cada jugador para que se comporten de una forma más similar a la vida real, sino que también se nota en el resto de movimientos de ataque y defensa de cada jugador, ofreciéndonos una experiencia mucho más realista y divertida.
Y es que no vamos a desmenuzar cada tecnología como tal, ya que no serviría más que para complicar el texto en demasía. Basta con decir que este año nos ha encantado cómo se comporta el juego tanto en defensa como en ataque, permitiéndonos trenzar jugadas más fluidas y haciendo que todo sea mucho más satisfactorio a los mandos.
La IA también creemos que ha mejorado de forma evidente y las físicas de la pelota dan un salto hacia adelante, sobre todo a la hora de interactuar con el aro, tanto para acabar dentro de la canasta como para salir despedida y obligarnos a luchar por el rebote.
Todo esto hace que estemos, sin temor a equivocarnos, ante el NBA 2K26 más divertido de los últimos años, un título que merece la pena para los amantes de este deporte o para quienes lleven bastante tiempo sin disfrutar de un NBA 2K.
Conviértete en leyenda con sus modos de juego
Además de una jugabilidad de lo más satisfactoria, como siempre 2K nos ofrece bastante contenido en forma de distintos modos de juego, siendo Mi Carrera y Mi Equipo los más importantes y en los que vamos a centrarnos principalmente, aunque hay mucho más.
Mi CARRERA: Vuelven las historias que han hecho triunfar el modo
NBA 2K26 vuelve a la senda de las historias más clásicas con Out of Bounds, donde encarnaremos a un jugador que comienza su trayectoria como una promesa del baloncesto desconocida y oculta en un pequeño pueblo y que tendrá que luchar por llegar a la NBA.
Sin ser una auténtica locura, la historia nos convence, nos invita a seguir jugando y es una buena excusa para ir desarrollando nuestro jugador de baloncesto mientras nos impregnamos de su narrativa y agradecemos que se vuelva a apostar por esta dinámica. Eso sí, hubiésemos agradecido que en un juego con el presupuesto de NBA 2K26 se hubiesen incluido licencias oficiales de los equipos europeos que aparecen en el modo.
Además, por supuesto, vuelve La Ciudad con un nuevo diseño que distribuye mucho mejor todas las localizaciones para que sean más accesibles, a lo que hay que sumar nuevas facciones, parques, clasificaciones... todo para que tengamos decenas por no decir cientos de horas dentro de este modo de juego.
MyTEAM: La revolución de los equipos mixtos
La principal revolución de MyTEAM este año tiene nombre y apellido: la WNBA. Por primera vez en la historia de la saga, nos encontramos con la posibilidad de crear quintetos mixtos, siguiendo la tendencia que comenzó EA con EA Sports FC permitiéndonos crear equipos mixtos. La realidad es que funciona de maravilla. Esta inclusión no es un simple añadido estético, sino que aporta una capa estratégica completamente nueva que además sirve para dar un impulso a una liga cada vez más importante como la WNBA.
Pero las novedades van más allá con una serie de nuevos modos y mecánicas, destacando por encima de todo el nuevo All-Star Team-Up, que nos permite juntarnos con otros nueve jugadores para disputar partidos cooperativos 5vs5 completos, una de las funciones más pedidas por la comunidad. A esta vertiente social se suma el regreso del parque de Triple Amenaza a Sunset Beach, ahora en una vistosa versión nocturna con luces de neón que añade también canchas 2vs2 a la fórmula. Para el jugador que prefiera jugar en solitario, se estrena Breakout: Gauntlet, un desafiante modo donde debemos superar rondas de dificultad creciente usando cada carta una sola vez, obligándonos a exprimir al máximo nuestra colección. Si a esto le sumamos las nuevas Game Changer Cards —consumibles que otorgan pequeñas ventajas— y la personalizable MyTEAM Arena para exponer nuestros logros, nos queda un conjunto de añadidos que aporta bastante variedad.
Otra cosa es el tema de las temporadas y los micropagos. Creemos que el juego sigue monetizando en demasía ciertas mecánicas y que para ser competitivo al máximo nivel es prácticamente obligatorio pasar por caja, pero para jugar de forma tradicional en Mi Equipo no vais a tener problemas y, de hecho, creemos que los micropagos se siguen notando más si optamos por las vertientes multijugador pensadas para nuestro jugador personalizado.
Mi NBA, La W, Mi GM... y otros modos para tener un banquillo de lujo
Mi Jugador y Mi Equipo son los dos modos principales y son, prácticamente, dos juegos en sí mismos, pero además NBA 2K26 tiene un "banquillo de lujo" con modos para todo tipo de amantes del baloncesto.
Entre ellos encontramos La W, la vertiente de Mi Jugador en la WNBA que añade más mejoras para ofrecernos un modo cada vez más completo; Mi GM, en el que nos convertimos en el mandamás de una franquicia de la NBA y que cuenta con más escenarios de pretemporada y nuevos elementos para dar aún más posibilidades a los jugadores; o Mi NBA, con nuevos banner dinámicos.
Más cerca que nunca de la realidad
A nivel técnico, la saga NBA 2K siempre ha sido bastante avanzada y un referente en lo que a acabado gráfico se refiere y NBA 2K26 no iba a ser menos y nos ofrece una entrega más llamativa en lo visual.
Es cierto que en las texturas de los jugadores es difícil en la actualidad ver diferencias a simple vista, aunque si jugamos con cámaras cercanas o vemos una repetición y hacemos zoom podemos ver los pequeños detalles que se mejoran como los bordados de las camisetas o la definición de los músculos.
Más allá de eso, ya hemos hablado de que a nivel jugable las animaciones son mucho más suaves (algo en lo que también interviene lo técnico) y también observamos una iluminación más trabajada en los elementos principales del estadio y ciertas mejoras en el público para hacerlo más realista.
En cuanto al rendimiento, hemos jugado en una PS5 Pro y los 60 FPS han sido estables, aunque el juego sigue teniendo la "deuda" de contar con algunos tiempos de carga que en ocasiones son demasiado largos, algo en lo que probablemente interviene la conectividad casi permanente del título.
Por último, como siempre, el trabajo sonoro es de 10, tanto en las voces de los comentaristas, los sonidos típicos de la pista o la fantástica banda sonora que siempre acompaña a los juegos de la saga y que es un fiel reflejo de la cultura estadounidense.
Conclusiones
NBA 2K26 no es una revolución en el género del baloncesto pero es, sin lugar a dudas, la entrega más pulida y disfrutona a nivel jugable de la que hemos disfrutado en mucho tiempo, con un equilibrio perfecto que encantará tanto a los jugadores más casuales como a los más expertos y mejoras evidentes en animaciones o, sobre todo, el comportamiento del balón en acciones complejas como los rebotes.
El modo Mi Jugador vuelve a apostar por una historia en colaboración con Spike Lee que sin ser revolucionaria le sienta mucho mejor que lo que vimos el año pasado, Mi Equipo añade nuevos modos de juego, la WNBA y otros detalles para hacerlo más disfrutable y el resto de modos de juego incluyen cambios para ofrecernos una entrega repletísima de contenido.
En cuanto a los micropagos, es un poco lo de siempre. Si vamos a jugar y a divertirnos no hará falta pasar por caja y en Mi Equipo la mayoría de los jugadores van a disfrutar de una experiencia bastante justa, aunque en Mi Jugador esto se complica algo más y es algo más necesario volver a pasar por caja pero, pese a todo, creemos que estos micropagos se han ido equilibrando durante los últimos años.
Por lo tanto, ¿merece la pena NBA 2K26? Si sois aficionados al baloncesto la respuesta es un sí rotundo. No vais a encontraros una revolución, pero sí el título más disfrutable de la saga en mucho tiempo que va a conquistar a cualquier amante de uno de los deportes más frenéticos y espectaculares del planeta.
*Hemos realizado este análisis gracias a un código proporcionado por 2K España.