Análisis de Night in the Woods (PS4, Switch, Xbox One, PS5, PC)
Los juegos independientes se han convertido en una fuerza casi tan grande como los triple A, y con toda la razón del mundo. 2017 puede ser uno de los mejores años de la historia reciente de los videojuegos si la cosa sigue así. Junto a juegazos como Resident Evil 7, Horizon: Zero Dawn o The Legend of Zelda: Breath of the Wild tenemos pequeñas joyas que no arrastran tantos fans, pero que se merecen toda nuestra atención. Uno de ellos es Night in the Woods.
Night in the Woods se anunció allá por 2013 con el objetivo de financiarse en Kickstarter, donde recaudó más del cuádruple de los 50.000 dólares que pedía.
Previsto originalmente para 2014, el juego se volvió cuatro veces más grande de lo esperado y acabó llegando cuatro años después de su anuncio. Aunque es un juego bastante particular, creemos que la espera ha merecido la pena.
Una noche en el bosque
Night in the Woods es un juego centrado en la narrativa, con elementos de plataformas y exploración, donde la historia es todo. La historia toma el rol principal, pero se integra con soltura con la jugabilidad, y no da una sensación de juego lento, algo de lo que sí pueden pecar otros títulos que priorizan el argumento. Sí es cierto que tiene altibajos en algunos momentos, pero profundizaremos en ello más adelante.
Aquí vamos a descubrir la historia de Mae, una gata antropomorfa que vuelve a su ciudad natal en Possum Springs después de dejar los estudios. Mae descubre desde el primer momento que las cosas son muy diferentes a cómo ella las recuerda, y que todos estos años no han pasado en vano. Lo primero que descubre, de hecho, es que hasta sus padres se han olvidado de ella, y recuperar la vida que tenía quizás no va a ser tan fácil.
Lo más importante de este juego es el argumento, y si no sabéis nada sobre él, mejor que mejor. Nosotros no os vamos a contar demasiado, y sólo os diremos que es un juego que sabe dar donde duele cuando tienes veintitantos o trentaitantos, eres un joven adulto, y te enfrentas a lo que, al fin y al cabo, es la vida, sobre todo si os habéis ido de vuestra ciudad natal. Oh, y si los problemas cotidianos no fuesen suficientes, además hay algo en el bosque. Como decían en un antiguo programa de televisión: "hasta aquí puedo leer".
No todo gira en torno a Mae, sino que también conoceremos a otros personajes que se enfrentan a otros problemas completamente diferentes a los nuestros, pero no por ello menos importantes. La clave es que lo hace desde el humor, un humor a veces un tanto oscuro, pero que no evita tener mucha verdad detrás de cada broma. Además, incluso bromeando podemos saber lo que realmente sienten los personajes.
Y es que donde brilla es en cómo están escrito los diálogos. Son totalmente naturales, y saben reflejar perfectamente lo que quieren decir los personajes. Acostumbrados a diálogos enlatados con expresiones que jamás diría nadie, se agradece algo tan natural y bien escrito, que nos permite empatizar más con los personajes por fantásticos que sean. Cómo evolucionan, cómo muestran (u ocultan) sus inseguridades, como interactúan… para nosotros, un ejemplo a seguir en este aspecto.
Si os gusta lo que habéis leído hasta el momento, tenemos también lo que puede ser una noticia mala para muchos. Night in the Woods está íntegramente en inglés, y aunque se puede seguir la historia con un nivel básico, creemos que hay que tener un nivel algo más avanzado para disfrutar de todos los matices que guarda. Sin esto, el juego sigue siendo disfrutable, pero como decíamos, apreciar los diálogos lo lleva a otro nivel.
La vida como una gata
Parte de la gracia de Night in the Woods es que al volver a casa, volvemos a caer en la rutina. Cada día nos levantaremos, miraremos nuestro ordenador, hablaremos con nuestra madre y quedaremos con nuestros amigos. Cuando salimos a la calle también podemos explorar y encontrar eventos secundarios que nos permiten aprender más sobre el mundo de Mae.
Para pasar el rato también tenemos una serie de minijuegos, que van desde un Guitar Hero cuando ensayamos con nuestro grupo hasta una especie de roguelike que podemos encontrar en nuestro portátil. Además, hay momentos bastante plataformeros en los sueños de la protagonista, y cabe mencionar que el control en estos casos responde mejor de lo que esperábamos.
También tenemos decisiones, aunque muchas veces son más para hablar sobre el pasado que para alterar el futuro. De un modo u otro, nos sirven para vincularnos más con la historia. En general, dentro de la importancia del diálogo, tenemos una aventura razonablemente variada y con un buen equilibrio entre sus partes, que nos puede dar unas 8 horas de media (en función de si nos entretenemos más o menos), y que sólo se nos ha hecho un poco más pesado en el tramo final.
Un estilo artístico sorprendentemente acertado
Seguro que, viendo estas imágenes, no podéis pensar que el juego trate de temas serios, pero lo cierto es que lo hace, y el estilo artístico es sorprendentemente acertado. El mejor ejemplo que se nos ocurre es el de Brian O’Malley (Scott Pilgrim, Seconds, Lost at Sea), que con un estilo cartoon toca temas serios tras un trasfondo de humor en sus obras y consigue que el lector se sienta cercano a los personajes.
Los colorines, las líneas simples o jugar como una gata no nos supone ninguna barrera para acercarnos a los personajes. Casi como los propios personajes, el estilo artístico guarda temas serios y reales, que vamos descubriendo según nos familiarizamos con él. Algo parecido podemos decir de la música, que de manera sutil pero efectiva nos acompaña en todo momento, siendo rara vez protagonista.
Una historia que vivir
Night in the Woods es un juego para gente madura que quiere vivir una historia donde detrás del humor y los colorines hay una realidad muy auténtica. Cuando decimos "gente madura", simplemente nos referimos a jugadores preparados para comprender una historia con la que un joven adulto puede sentirse identificado.
Más allá de necesitar tener un buen nivel de inglés para apreciar lo bien escrito que está el juego y disfrutarlo en todo su esplendor, y algunos altibajos que tiene en el ritmo –sobre todo al final–, pocas pegas le podemos poner a este título. Si estás buscando una de esas historias que tocan, dale una oportunidad.
Hemos realizado este análisis en su versión de PS4 adquiriendo el juego en PlayStation Store.