Análisis de ARC Raiders: El 'extraction shooter' para todos: Divertido, tenso y brillante en su diseño (PC, Xbox Series X, PS5)
La evolución que han sufrido los videojuegos multijugador durante los últimos años es de lo más interesante. Nos encontramos con un patrón que parece repetirse con demasiada frecuencia como para que sea casualidad, y que ha vuelto a ocurrir con Arc Raiders y ese relativamente nuevo género de los extraction shooters.
Mirando unos cuantos años atrás tenemos, por ejemplo, la llegada de los MOBA con el mod DOTA para Warcraft que tuvo varias alternativas hasta que un estudio llamado Riot Games lanzó League of Legends que no inventó el género, pero que supo adaptar la fórmula para hacerla atractiva a todo tipo de jugadores.
Ya dentro de lo que podríamos considerar una misma familia (para el que os escribe es así ya que creo que todo parte del inicio de los juegos de supervivencia) todo comenzó con DayZ, el mod inicialmente lanzado para Arma II que acabó convirtiéndose en un juego independiente que logró captar a mucho público y que terminó viralizándose con Rust, Ark o The Forest. Después, como una evolución de esta idea llegaron los battle royale con PUBG primero y Fortnite después, que fue el juego que llevó la popularidad del género a nuevas cuotas.
Ahora tenemos los juegos de extracción, que ya han gozado de bastante popularidad con Escape from Tarkov (que, por cierto, lanza su versión 1.0 este mismo mes de noviembre) y que pueden convertirse en un género de masas con Arc Raiders, que llega para ofrecer una experiencia más amigable que está encantando a los jugadores.
Un extraction shooter bien calibrado en casi todo
La fórmula de los juegos de extracción es una de las más intensas de los títulos multijugador, but también puede ser una de las más duras y desesperantes sobre todo para los jugadores que busquen una fórmula más desenfadada.
El loop de juego de los extraction shooter
El concepto inicial o el bucle del género, que también está presente en Arc Raiders, es sencillo, pero vamos a explicarlo a grandes rasgos para los que aún no conozcan este tipo de títulos:
- Preparación: En este caso en la ciudad de Speranza que sirve como base. Aquí tenemos nuestro taller que podemos mejorar, aceptamos misiones, comerciamos y personalizamos nuestras habilidades y armas antes de iniciar la partida.
- La incursión: Viajamos a distintas zonas ya sea en solitario o en equipo (de tres en este caso). ¿El objetivo? Buscar recursos para mejorar nuestro arsenal y cumplir misiones.
- El conflicto: Sin embargo, no todo va a ser tan sencillo ya que en la zona hay enemigos tanto controlados por la IA del propio juego (en forma de distintas clases de robots) como otros jugadores o Raiders que compiten con nosotros por el botín y que pocas veces tendrán clemencia si nos encontramos con ellos.
- La extracción: Una vez hayamos obtenido el botín deseado o decidamos que ya tenemos suficiente, debemos ir a alguno de los puntos de extracción que hay en la zona (que cuentan con sus propias reglas o tiempos de activación) para volver a salvo a Speranza, ya que si en algún momento morimos durante la partida lo perdemos absolutamente TODO.
Una fórmula más amigable... a la que no le falta tensión
Arc Raiders cuenta, como veis, con todos los elementos clásicos de un juego de este tipo, aunque sus creadores han apostado por intentar ofrecer una experiencia un tanto más ligera para adaptarla a todo tipo de jugadores y dar ese impulso que lleve a los títulos de extracción de ser populares a ser "masivos".
De entrada, la cámara en tercera persona y la posibilidad de abrir bastante el ángulo de visión ya hacen que la tensión durante varios momentos de la partida baje un par de peldaños, mientras que su estética y su arte más colorido también nos dan una falsa sensación de que estamos ante un juego más relajado.
Además, tampoco habrá reinicios o "wipes" de la progresión (al menos no de la forma tradicional), una mecánica habitual del género que vuelve a ponernos cada cierto tiempo en la casilla de salida, teniendo que comenzar de nuevo todo el proceso (estos wipes suelen ir acompañados de nuevo contenido o grandes actualizaciones que influyen en la experiencia de juego). En este caso, conservaremos todo y lo que habrá son actualizaciones regulares con nuevo contenido, algo que por un lado nos parece una buena idea... y por otro nos genera ciertas dudas a nivel de equilibrio y de escalabilidad a medio y largo plazo lo que podría jugar en contra de Arc Raiders en el futuro.
Sin embargo, ajustar detalles para ofrecer una experiencia un tanto más desenfadada y accesible para todos los públicos no quiere decir que Arc Raiders renuncie a la tensión, sobre todo cuando cogemos algún objeto bastante extraño por el que otros Raiders matarían (literalmente) o en una situación muy concreta: la aproximación a los puntos de extracción.
Ahí está la olla a presión de la tensión de la partida. Por un lado, tenemos a los jugadores que pueden planear realizar emboscadas en ese punto para hacerse con nuestro botín y, por otro, estos puntos de extracción no son inmediatos: no es llegar y besar el santo. Tenemos que activarlos de ciertas formas, y al hacerlo hacen muchísimo ruido que alerta tanto a jugadores como a máquinas en los alrededores. Además, tenemos que esperar unos cuantos segundos —que se pueden hacer eternos— a que se abran las puertas. E incluso ya dentro del punto de extracción no estaremos seguros del todo hasta que esas mismas puertas se cierren, ya que hasta el último momento otro jugador puede acabar con nuestra vida.
Este pico de tensión es, sin duda, el más satisfactorio de cada partida, el que nos ha acelerado el corazón y el que realmente hace que el cuerpo nos pida más, nos pida volver a vivir ese pico de adrenalina que funciona tan bien.
Por otro lado, durante el resto de la partida no sentimos esta tensión, quizás porque después de muchas horas a títulos como PUBG o Escape from Tarkov estamos más preparados para los enfrentamientos PvP o PvE. Aunque, precisamente, uno de los encantos de Arc Raiders es que no sea tan "hardcore", que podamos disfrutarlo en cualquier momento sin importar nuestro cansancio o estado de ánimo. Ese contraste de una experiencia más desenfadada con grandes picos de tensión funciona realmente bien.
Buenas mecánicas de disparo... con ajustes que hacer en algunos puntos
Lógicamente, uno de los puntos capitales de un título de este tipo es el combate y, por ende, las mecánicas de disparo que, a nivel de sensaciones, de control y de jugabilidad, nos han gustado bastante. Destacan la precisión a la hora de apuntar y disparar, reaccionando muy bien incluso a movimientos bruscos de ratón y ofreciendo una experiencia fluida.
Aquí, sin embargo, hay que hacer algunos ajustes si nos fijamos en el armamento. Por un lado, nos gusta el giro que se ha querido dar para ofrecernos armas diferentes creadas con chatarra y restos de piezas que podemos ir mejorando también con algunos accesorios. También nos ha gustado bastante el retroceso y comportamiento a la hora de disparar de alguna de ellas, y que el control de las armas que supuestamente son más poderosas sea exigente.
La cuestión es que creemos que el equilibrio del armamento aún no está bien ajustado: las armas supuestamente más poderosas y complicadas de manejar a veces no recompensan esa dificultad y, en muchos casos, nos ha dado la sensación de que el armamento con mayor velocidad de disparo tiene ventaja sobre el más potente. Por otro lado, creemos que, sumado al escudo, el tiempo para abatir a un enemigo es, quizás, demasiado elevado, aunque esto último probablemente sea una decisión de diseño para darnos más oportunidades de sobrevivir, dentro de esa idea de ofrecer una experiencia más amigable.
El equilibrio PvPvE está mejor ajustado que en la beta en la mayoría de los casos, aunque creemos que las zonas más avanzadas de la partida todavía necesitan algunos ajustes. Por suerte, todo lo que decimos es fácil de reconducir y pulir en un título de este tipo.
Una gran calidad audiovisual y un buen rendimiento en todo tipo de PC
Pasando al apartado más técnico y "artístico", nos ha gustado mucho todo el diseño de ARC Raiders: desde la estética de los trajes, las armas u otros elementos de este particular mundo, hasta la paleta de colores, el diseño de los escenarios (que son preciosos) y cómo luce todo y entra de una forma casi mágica por los ojos. Da gusto ver el mundo que nos rodea y también toda la trama que han ido metiendo al juego, aunque para nosotros pueda ser secundaria en este tipo de títulos.
A nivel de rendimiento hemos probado ARC Raiders en varios ordenadores. Comenzando por nuestro PC de gama alta con tarjeta gráfica NVIDIA GeForce RTX 5080 junto a procesador Ryzen 5900X, 64 GB de memoria RAM DDR4, almacenamiento SSD y Windows 11; hemos podido jugar a 4K, con gráficos en modo épico (ray tracing incluído), DLSS en modo Calidad y generación de frames múltiple superando los 200 FPS.
El segundo equipo de pruebas fue un portátil con una NVIDIA GeForce RTX 4060, procesador i9-14900HX, 32 GB de RAM, almacenamiento SSD y Windows 11. Aquí pudimos jugar a 1080p, con gráficos en alto, DLSS en modo calidad y generación de frames a en torno los 120 FPS.
Por último hemos probado el juego en un PC consolizado ROG Xbox Ally X en el que hemos podido jugar también a 1080p, esta vez con gráficos en medio, FSR equilibrado y generación de frames de AMD obteniendo unos 80 FPS a 35 W conectados a la corriente y unos 75 FPS en el modo batería a 25 W.
También nos hemos dado cuenta que en todos los casos las animaciones de los personajes se ven un tanto "lentas" contrastando con la suavidad de movimiento del resto de la imagen por lo que probablemente hay algún tipo de fallo técnico relacionada con ellas que deben pulir, pero no es nada especialmente grave.
Por otro lado, la banda sonora nos ha encantado, y los sonidos que nos rodean en los escenarios o de las armas también nos han gustado mucho. Sin embargo, creemos que a nivel direccional el audio de las pisadas quizás necesita algunos ajustes pero, en general, el trabajo es muy bueno tanto en esta área como en la traducción al castellano.
Conclusiones
Arc Raiders es el segundo juego de Embark Studios. Sus creadores ya demostraron mucho de su potencial con The Finals, un título que quizás no gozó de la popularidad y el reconocimiento que merecía. Esa suerte sí la está teniendo este nuevo videojuego, que ha sido uno de los pocos intentos dentro del género de extracción que verdaderamente llega para aportar algo y para poder rivalizar con Escape from Tarkov, algo que han intentado sin éxito grandes estudios como Activision.
Las decisiones para hacer la fórmula del género más ligera y hacerla masiva sin renunciar a su esencia son bastante inteligentes. Combinan bien una experiencia más relajada con momentos de tensión (especialmente alrededor del punto de extracción), permitiéndonos disfrutar de este título en cualquier momento sin tanta "frustración" como puede provocar el ya mencionado Tarkov.
A nivel artístico y de diseño de mundo nos ha encantado, pero lo único que nos chirría es el equilibrio de las armas y las dudas que nos genera que la falta de wipes pueda hacer que el contenido se "queme" demasiado rápido o que no sea tan escalable como el estudio piensa.
Pero, desde luego, Arc Raiders es un juego divertidísimo, que engancha, que da momentos de "puro cine" y que va a encantar a aquellos que busquen un título de este tipo algo más ligero o disfrutar con amigos de partidas multijugador muy satisfactorias. Ahora solo falta saber si Embark Studios podrá mantener un alto ritmo de actualizaciones —esencial para este tipo de títulos—, aunque sus planes para ello son bastante ambiciosos.
Hemos realizado este análisis gracias a un código para PC proporcionado por Embark Studios.