Son realmente pocos los directores que pueden aproximarse al talento de Gareth Evans cuando se trata de filmar escenas de acción. El responsable de 'The Raid' y 'Gangs of London' es un experto en el arte marcial indonesio y uno de los culpables de que la fiebre de 'John Wick' se extendiera en Hollywood como si no hubiera un mañana. El británico y también coreógrafo de peleas vuelve a ponerse tras las cámaras para estrenar 'Estragos' en Netflix con Tom Hardy, y por supuesto estamos ante una de las películas del año.
'Estragos' es la mejor heredera de 'The Raid' con un Tom Hardy colosal: Gareth Evans se reafirma como uno de los mejores directores de acción del sector
'Estragos' empuja al espectador directamente a una vertiginosa persecución cargada de adrenalina que sirve como carta de presentación para la producción de Evans: Después de que un robo de drogas tenga consecuencias fatales, un policía lucha contra el submundo criminal de una ciudad corrupta para salvar al hijo de un político. Tom Hardy se encarga de dar vida a ese agente que debe sumergirse en lo más profundo del mundo criminal, lo que lógicamente lo lleva a lidiar con peligrosos gánsteres y otros polis corruptos.
Acostumbrados a ver 'John Wick' y subproductos exploit como 'Nadie', 'La vieja guardia' o 'Atomic Blonde' que buscan exprimir los estilemas de la acción contemporánea, bañada en luces de neón, música tecno y coreografías en plano secuencia, Gareth Evans da un fuerte golpe sobre la mesa para recordar al patio de butacas lo que fueron sus filmes de 'The Raid' con unos combates sangrientos y espectaculares donde Hardy deslumbra e impacta con su presencia en la puesta en escena. Todo ello sin renunciar a las corrientes actuales que ya funcionan como un código algorítmico para la audiencia.

Evans recupera sus inspiraciones en el cine asiático y las artes marciales, especialmente en la figura de John Woo, y construye un relato repleto de giros y traiciones que derivan en una concatenación de muertes y salvajismo donde las balas ensordecen, los puñetazos duelen y los hachazos sirven para rellenar el suelo de litros de hemoglobina. 'Estragos' no pretende abrumar al espectador con su potente narrativa, sino atraparlo en un thriller cargado de secretos que, a su vez, se destapen paulatinamente en base a escenas muy robustas.
De igual forma que Timo Tjahjanto, el cineasta británico basa sus productos en la potencia de su carga coreográfica y en cómo los enfrentamientos no se limitan simplemente a una pelea estandarizada, añadiendo elementos que hacen que los tiroteos y sucesión de combos acaben aumentando progresivamente su nivel inverosimilitud hasta romper los límites del pseudorealismo en favor del pan y circo. Es por eso por lo que 'Estragos' consigue impactar tanto, porque productos como el de Keanu Reeves puede haber decenas, pero pocos o casi ninguno como los que llevan el sello indonesio.

La presencia de Tom Hardy, sin ninguna duda, eleva el conjunto, y es que el actor posee un porte y una seriedad que siempre reafirman el conjunto de los productos cinematográficos en los que aparece, siendo 'Venom' la única excepción reciente debido al tono buscado por Sony y Marvel. Gareth Evans firma otra vez otra película memorable que se queda cerca de 'The Raid' y se convierte en su mejor heredera.