Hablar de Rocky es hablar de la cima creativa de Sylvester Stallone, pero también de un milagro cinematográfico que estuvo a punto de no ocurrir jamás. La película que cambió para siempre el cine deportivo nació entre penurias económicas, rodajes casi clandestinos en las calles de Philadelphia y la obstinación de un actor que se negaba a rendirse. Ahora, todas esas peripecias darán el salto a la gran pantalla en forma de I Play Rocky, un filme que funcionará como un making of dramatizado y que ya tiene protagonista confirmado: Anthony Ippolito.
El mito continúa: confirman quién interpretará al joven Rocky
El joven actor neoyorquino, originario de Long Island, será el encargado de ponerse en la piel de un Stallone que, en los setenta, aún luchaba por sobrevivir en Hollywood. A sus 26 años, Ippolito sabe bien lo que es cambiar de rumbo: fue un prometedor jugador de béisbol antes de decidir que su futuro estaba en la interpretación. Y no se equivocó. Desde sus primeros papeles en Píxeles, Grand Army o la comedia negra Fool’s Day, hasta el romance juvenil Corazones malheridos —que triunfó en Netflix—, ha sabido hacerse un hueco en la industria.
Pero fue La oferta, la miniserie de Paramount que retrató las turbulencias del rodaje de El padrino, la que lo catapultó interpretando nada menos que a Al Pacino. El fichaje por I Play Rocky casi parece escrito por el destino. Nada más conocer el proyecto, Ippolito envió por iniciativa propia una audición grabada, sin que nadie se lo pidiera. Su interpretación convenció de inmediato a los responsables de Amazon Studios, que no dudaron en darle los guantes de boxeo para encarnar a un Stallone joven y desesperado por hacerse un nombre.
La historia que contará no es menor: Stallone estaba arruinado cuando escribió Rocky, hasta el punto de vender a su perro Butkus por apenas 40 dólares para poder comer. Rodó la película con un presupuesto mínimo, sin permisos en muchas localizaciones, filmando a escondidas y corriendo para no levantar sospechas. El resultado fue un fenómeno inesperado que conquistó tres Oscar, incluido el de Mejor Película, y levantó una saga con múltiples secuelas y un legado que hoy continúa con Creed.
I Play Rocky promete mostrar no solo cómo nació un mito del cine, sino también cómo un hombre, contra todo pronóstico, se abrió paso a puñetazos en la industria más dura del mundo.















