La piratería es uno de los peores males de la industria del entretenimiento. En Japón se persigue, con especial ahincó, cualquier tipo de filtración relacionada con anime y manga, pero a pesar de los esfuerzos de las autoridades los contenidos acaban en internet más pronto que tarde generando, por consiguiente, pérdidas millonarias. Desde Fuji News, confirman ahora que el sector del manga ha llegado a registrar pérdidas de 55.000 millones de dólares anuales, una auténtica barbaridad.
Pérdidas de 55.000 millones en el manga por el peor mal de la industria: es casi incontrolable y una amenaza
Teniendo en cuenta lo delicada que es la industria del manga, y más actualmente donde revistas tan populares como la Weekly Shonen Jump andan en busca de un pelotazo para tomar el relevo de viejas glorias, las filtraciones juegan una terrible pasada para que los usuarios consuman los tomos y capítulos que se van publicando, tanto de manera física como digital. En Japón no se andan con chiquitas con este asunto, pero es un problema tan colosal que es casi imposible controlarlo.
Incluso en producciones anime como 'Kimetsu no Yaiba: La fortaleza infinita' o 'Chainsaw Man - La película: arco de Reze' aseguraron que tomarían medidas estrictas con las filtraciones, amenazando hasta a los anónimos, pero las cintas llegaron de igual forma a redes: "Tomaremos medidas legales rigurosas, incluyendo medidas civiles y penales, contra actividades como la piratería y las publicaciones ilegales", informan los productores a través de un comunicado recogido por Anime Updates. "Incluso quienes publiquen de forma anónima podrán ser identificados y serán considerados responsables", decían desde Ufotable.
No parece que la situación vaya a cambiar a corto plazo, puesto que los formatos de publicación continúan siendo los mismos, pero quizá, con el tiempo, se establezca un modelo de lanzamientos más privado para que los usuarios no puedan filtrar los proyectos manga, acto que corta en gran medida los ingresos potenciales de las obras.















