Cuando Margot Robbie entró en la sala de casting de El lobo de Wall Street, lo hizo con un hándicap evidente: era prácticamente una desconocida en Hollywood. Frente a ella estaban nada menos que Leonardo DiCaprio y Martin Scorsese, dos nombres que podían intimidar a cualquiera. Pero lo que sucedió en aquella audición iba a cambiar su carrera para siempre.
La australiana consiguió el papel de Naomi Lapaglia gracias a un movimiento tan inesperado como atrevido: improvisó un bofetón directo a DiCaprio durante la escena. Cualquiera podría pensar que aquella osadía la mandaría de vuelta a casa, pero fue justo lo contrario. Scorsese y DiCaprio se quedaron encantados con su energía y su instinto, dándole la oportunidad de unirse a una de las películas más recordadas de la década. Pero hoy se arrepiente. Cree que podría haberlo hecho mucho mejor.
Margot Robbie confiesa: “Me encantaría volver a interpretar mi papel en El lobo de Wall Street, no lo hice demasiado bien”
Durante el rodaje, Scorsese le dio margen para moldear el personaje a su manera, algo que Robbie aprovechó para dejar huella. Ese papel fue su trampolín definitivo hacia la industria, el que la puso en el radar de los grandes estudios. Desde entonces llegarían proyectos tan dispares como Yo, Tonya o El escándalo, que además le reportaron dos nominaciones al Óscar, y su salto a franquicias como el Universo Extendido de DC, donde se convirtió en la inolvidable Harley Quinn.
Pero Robbie, a día de hoy, no está del todo satisfecha con aquella primera gran interpretación. En una entrevista reciente con Screen Rant mientras promocionaba Un gran viaje atrevido y maravilloso, confesó que le encantaría rehacer el papel de Naomi.
"Me encantaría reinterpretar mi papel en El lobo de Wall Street. La verdad es que era muy joven y no creo que fuese muy buena actuando entonces. Estoy convencida de que hoy lo haría mucho mejor. Me encantaría volver y hacerlo bien", explicaba con total sinceridad. No entró en detalles sobre qué cambiaría de su trabajo junto a Scorsese, pero dejó claro que lo ve con otros ojos tras más de una década de experiencia. Y no es raro: muchos actores y actrices, al mirar atrás, sienten la tentación de reescribir parte de su propia carrera.
El lobo de Wall Street no solo fue un retrato excesivo y corrosivo sobre la caída de Jordan Belfort, también fue la puerta que permitió a Margot Robbie consolidarse como uno de los grandes nombres de su generación. Quizá ella no esté del todo conforme con su versión de Naomi Lapaglia, pero lo cierto es que aquel papel marcó un antes y un después en su trayectoria.















