Fast & Furious 11 lleva inmersa en problemas desde hace meses. A pesar de la circulación de imágenes y vídeos que sugieren avances en la producción, distribuidos por un ilusionado Vin Diesel, el rodaje de Fast 11 aún no ha comenzado de manera oficial. La esperada entrega de la saga parece estar atrapada en una serie de obstáculos logísticos y en la compleja agenda de su estelar reparto.
¿Se cala el motor de ‘Fast & Furious 11’? La película de Vin Diesel se encuentra con grandes obstáculos y su reparto espera
Vin Diesel, figura central de la saga, ha estado compartiendo actualizaciones en redes sociales con imágenes de entrenamientos y detrás de cámaras, lo que ha generado confusión sobre el verdadero estado del proyecto.
Aunque algunos informes han insinuado que la filmación ya está en marcha, declaraciones de miembros del equipo indican lo contrario. La undécima película de la saga principal—duodécima si se cuenta el spin-off Hobbs & Shaw—se perfila como el desenlace de la historia de Dominic Toretto y su icónica “familia”. Sin embargo, el cierre definitivo de la saga sigue siendo una incógnita, pues no se descarta la posibilidad de una entrega adicional.
El plan original situaba el estreno de Fast & Furious 11 en la primavera de 2025, pero las huelgas de Hollywood en 2023 y otros contratiempos han provocado retrasos significativos, desplazando la fecha de lanzamiento hasta 2026. En una conversación con ScreenRant Alan Ritchson—quien retomará su papel de Aimes, el sucesor de Mr. Nobody en la agencia—reconoció que la producción se enfrenta a un desafío recurrente en la franquicia: sincronizar las agendas de sus numerosas estrellas.
"Hablamos de ello con frecuencia. Uno de los mayores desafíos que enfrenta la licencia es que hay demasiados nombres importantes: Dwayne [Johnson], Vin [Diesel], [Jason] Momoa y yo, y todos estamos increíblemente ocupados. Lograr que los astros se alineen para que podamos filmar será una hazaña en sí misma", comentó Ritchson.
La saga Fast & Furious, que comenzó en 2001 como un thriller de carreras callejeras, ha evolucionado hasta convertirse en una de las sagas de acción más desmesuradas y rentables de Hollywood. Con cada entrega, el reparto ha crecido exponencialmente, lo que ha complicado la planificación de cada producción.
Eso sí, Universal quiere apostar por la nostalgia y bajar el presupuesto, sobre todo tras los problemas en el guion de esta nueva entrega. La major no quiere que vuelva a ser un tropiezo en taquilla como la anterior secuela.
