Desde la pandemia de COVID-19, las plantas de interior han dejado de ser simples elementos decorativos para convertirse en compañeras emocionales para muchas personas.
Un estudio publicado en Plant-Environment Interactions identificó cuatro perfiles de propietarios de plantas: "Altamente Conectados" (14%), que desarrollan vínculos emocionales profundos con sus plantas; "Comprometidos" (42%), que disfrutan cuidándolas sin un apego emocional intenso; "Compromiso Limitado" (23%), que las ven principalmente como decoración; y aquellos "Sin Relación" (12%), que no les prestan atención significativa .
Cada vez se venden más plantas
Este fenómeno ha tenido un impacto notable en el mercado global de plantas de interior, que en 2023 alcanzó un valor de 10.450 millones de dólares y se proyecta que llegará a 14.720 millones para 2030 . El crecimiento ha sido impulsado por la creciente demanda de elementos naturales en espacios interiores y la búsqueda de bienestar emocional.
Además, la tendencia ha generado un auge en productos y servicios relacionados, como aplicaciones móviles para el cuidado de plantas, macetas inteligentes y comunidades en línea donde los entusiastas comparten consejos y experiencias. Este movimiento refleja una reconexión con la naturaleza y una adaptación a estilos de vida más conscientes y sostenibles.
Es importante destacar que, al integrar plantas en hogares con mascotas, se debe considerar la seguridad de estas. Existen numerosas especies de plantas no tóxicas que son seguras para perros y gatos, lo que permite disfrutar de la jardinería interior sin comprometer la salud de las mascotas.















