Seguro que tienes más de un estropajo de limpieza en tu cocina, sea por el motivo que sea. Es frecuente dejar varios de estos utensilios a mano para que siempre podamos eliminar cualquier mancha de nuestro mármol o mesa en un poco tiempo y de forma instantánea. Sin embargo, eso provoca que los estropajos se ensucien y se hagan trizas continuamente obligándonos a tener que cambiarlos cada dos por tres, e incluso a veces manchamos más de lo que realmente limpiamos porque no están lo suficientemente bien lavados. Pero para todo hay un truco, y este caso no es excepción: ¿Cómo se puede aprovechar mejor el estropajo de cocina y eliminar así más bacterias?
El truco definitivo para aprovechar al máximo los estropajos de cocina y eliminar más bacterias
Tal y como informan desde AS, existe un viejo truco para que los estropajos de cocina tengan una mejor utilidad: cortar sus esquinas. Parece absurdo a simple vista, pero tiene mucho sentido realmente. Como os decíamos, solemos usar uno o más estropajos de forma habitual en nuestra cocina, y al usarlos los dos de forma constante ambos acaban muy estropeados y pierdan su capacidad para eliminar bacterias. Pero si a uno de ellos le cortamos las puntas queda diferenciado del otro, y aquí viene el truco: usaremos el que no está cortado habitualmente para limpiar platos y dar la primera capa a la suciedad del mármol o mueble de cocina y, el otro que está cortado, servirá para desinfectar lo que quede, manteniéndose más pulcro y por tanto con mayores capacidades para sanear nuestro espacio para cocinar.

Con todo esto evitaremos la contaminación cruzada y podremos tener un entorno más higiénico. Se trata de un truco extremadamente sencillo y que cualquiera puede hacer en casa. Si esto lo acompañamos con paños y otros utensilios útiles, entonces ya nos quedara un especio envidiable.