La semana pasada os hablábamos de un misterioso monolito metálico aparecido en Utah luego de una ronda de investigación rutinaria en el desierto en busca de una serie de animales. La extraña escultura de más de tres metros de altura abandonada conquistó la actualidad nacional e internacional, copando titulares en España y otros países. ¿Qué demonios es esa estatua? ¿Una obra de arte? ¿Una muestra física de la existencia de los extraterrestres? Bueno, pues resulta que, al igual que apareció, ha desaparecido.
El monolito se ha ido
Imaginad: se encuentra un monolito en el desierto de Utah (Estados Unidos), todo el mundo se vuelve loco buscando los orígenes o el significado de esta escultura, y tras alimentar todo tipo de especulaciones de ciencia ficción y a los tabloides de medio planeta, desaparece. Según informan algunos medios locales estadounidenses, al parecer, el objeto fue retirado el viernes por la noche sin dar pistas ni dejar rastro sobre su paradero. Y es difícil, pues hablamos de una pieza metálica, aparentemente maciza y de unos 3,5 metros de altura.
Los empleados del Departamento de Seguridad Pública de Utah únicamente pudieron examinar el monolito de metal de forma preliminar, sin conocer quién lo había puesto allí o de qué manera había acabado estando en un lugar tan lejano, apartado y extraño. De hecho, las autoridades se negaron a revelar la ubicación del monolito para no atraer hordas de curiosos, pues como ya os comentábamos en nuestro artículo la semana pasada, se encontraba en una zona aislada, de difícil acceso, y que podría ser incluso peligrosa en el caso de accidente. Sin embargo, como suele pasar con estas cosas, rápidamente se inició una carrera online para determinar su localización, y gracias a los detalles de las fotos y las formas rocosas de la zona, se encontró el sitio exacto a través de apps como Google Earth.
El misterio sigue adelante. Muchos creen que se ha eliminado del sitio por parte de los responsable del Departamento de Seguridad Pública de Utah, y otros piensan que ha sido el galerista y gestor del legado del artista fallecido John McCracken, cuyas obras guardan un remoto parecido con este monolito, el que ha retirado la escultura para evitar la posible multa federal.
