El que la sigue la consigue. Ridley Scott, a través de su productora Scott Free, ha anunciado que se hará con los derechos de la novela The End of October de Lawrence Wright. El título, escrito por el ganador del premio Pulitzer, relata cómo el mundo sucumbe a una peligrosa pandemia que hace derrumbarse la sociedad y multitud de gobiernos de Occidente y Asia. Scott no ha desvelado si se se hará adaptación en formato serie o película. Lo que sí es digno de reseñar es que fue el propio director de Alien el que sugirió la idea a Wright luego de que el cineasta se obsesionase con La carretera, la novela Cormac McCarthy. Una vez más, la realidad supera la ficción.
No, no está basada en la crisis del coronavirus
Como explican desde Deadline, el parecido de la novela, su temática y los hechos relatados, que parecen un reflejo terriblemente exacto de los que se están viviendo en todo el mundo, se trata de una casualidad. De hecho, Wright ha confirmado que parte de los beneficios de la novela irán directamente a los bolsillos de los sanitarios y trabajadores que están trabajando para frenar al virus en hospitales y otros centros sociales y sanitarios. Wright, ganador del premio Pulitzer y estimado escritor neoyorquino cuyos libros incluyen The Looming Tower: Al-Qaeda y Road to 9/11, ha querido documentarse para describir lo que parecen una serie de eventos que cualquiera de nosotros podríamos haber vivido en primera persona en estos tiempos de COVID-19.
En la novela, el virus ficticio, la influenza o gripe de Kongoli, es mucho más mortal que el coronavirus, aunque también se originó en China y pronto dio el salto a otros países. Con sospechas de que se haya originado en un laboratorio, los países hacen caso omiso a las advertencias y pronto deben confinarse, cerrar economías, clausurar escuelas, y poner en cuarentena a millones de personas. Wright, para enfatizar el carácter mediático y letal del virus, cuenta entre sus víctimas a miembros de la Corte Suprema de Estados Unidos, Taylor Swift y Brad Pitt. Casi nada. En The End of October, la población de riesgo potencial es aquella compuesta por las personas más sanas, lo mismo que pasó durante la gripe de 1918, y al igual que el coronavirus, no hace distinción entre clases sociales o ideologías.
Wright también relata en su libro un desabastecimiento de objetos esenciales, así como de medicamentos y utensilios sanitarios, como gafas, retrovirales, mascarillas y equipos de protección, derivados de la delicada situación que viven en su ficción países como la India y China, con entornos de fábricas gigantescos cerrados y paralizados. The End of October también juega con la idea de importantes disturbios, bandas de violadores y criminales y saqueos constantes, con grupos de huérfanos -cuyos padres han fallecido en la pandemia- que se suman a la protección tribal que les garantizan las mafias que comienzan a proliferar por todo Estados Unidos. Centrándose en el microbiólogo estadounidense Henry Parsons, que es enviado a la zona cero por la Organización Mundial de la Salud para investigar el brote inicial en Indonesia, nos narrará una historia a medio camino entre el drama y el thriller científico.
De momento, Scott cumple así su sueño de adaptar una novela con esta temática, pues ya intentó en los años noventa dirigir la adaptación de Zona caliente, la novela de Richard Preston, que iba a contar con una pareja protagonista con Jodie Foster y Robert Redford. Si bien se desconoce qué productora o plataforma se hará con este jugoso proyecto, se rumorea que Netflix está en la posición ideal para encabezar la lista de interesadas. Tras el éxito a posteriori de films como Estallido y Contagio, no sería de extrañar que la adaptación tuviese una gran número de pretendientes.
