Tim Lomas, Brendan Case y Michael P. Masters, en un estudio, invitan a una reevaluación de los avistamientos de OVNIS, conocidos como UAP (Fenómenos Aéreos No Identificados). Piden considerar que estos fenómenos podrían ser obra de entidades que llevan viviendo ocultas entre nosotros durante milenios. Denominada hipótesis criptoterrestre, plantea una posibilidad fascinante: que seres inteligentes y tecnológicamente avanzados, denominados "criptoterrestres", habiten en la Tierra y la Luna en bases secretas, o incluso se mezclen entre nosotros.
Los 'estraterrestres' se esconden bajo tierra
Los investigadores de la Universidad Tecnológica de Montana y el Programa de Desarrollo Humano de Harvard sugieren que los seres criptoterrestres utilizan estructuras subterráneas tanto en la Tierra como en la Luna para esconderse. Esta hipótesis, aunque suene a ciencia ficción, tiene precedentes en relatos como el conocido "Caso Conil" en España y otros incidentes similares. El artículo también menciona a Harold E. Puthoff, un físico e ingeniero que en 2022 propuso la existencia de culturas terrestres ocultas con posibles orígenes interdimensionales o como criptoterrestres homínidos o terópodos.
El incidente de Conil en España, también conocido como el "Caso Conil," ocurrió el 29 de septiembre de 1989 en Conil de la Frontera, una localidad costera en la provincia de Cádiz, España. En este incidente, cinco jóvenes afirmaron haber visto a unos seres extraterrestres transformarse en humanos mientras caminaban por la playa de Los Bateles. Los testigos describieron cómo estas entidades adoptaron una apariencia humana y se mezclaron entre la gente del paseo marítimo. Este evento ha sido objeto de considerable especulación y debate dentro de la ufología y es citado frecuentemente como un ejemplo de avistamientos de criptoterrestres, seres supuestamente avanzados que viven ocultos entre los humanos.
Seres de otras dimensiones
La teoría criptoterrestre también se entrelaza con la noción de seres de otras dimensiones. Según los autores, los UAP podrían involucrar entidades que coexisten en dimensiones adicionales a las que conocemos, permitiéndoles viajar en el tiempo y observar diferentes épocas de la historia terrestre. Esta idea sugiere que nuestros propios descendientes, tras descubrir la tecnología del viaje temporal, podrían estar estudiando su pasado evolutivo desde una dimensión superior.
Ángeles, hadas o elfos
En su análisis, los científicos destacan la necesidad de una apertura científica para investigar estos fenómenos. Aunque la hipótesis carece de pruebas concretas, plantea escenarios intrigantes, como la posibilidad de que los criptoterrestres sean menos tecnológicos y más mágicos, comparándolos con figuras mitológicas como ángeles, hadas o elfos. Este enfoque menos convencional abre una nueva perspectiva sobre los avistamientos de ovnis y otros fenómenos anómalos.
El artículo recoge numerosos casos de avistamientos inexplicables, como el informe de 1987 sobre un objeto submarino no identificado que siguió a una fragata neozelandesa. Estos incidentes sugieren la existencia de bases subterráneas o submarinas que podrían ser utilizadas por estos seres ocultos. La falta de evidencias tangibles no impide que estas teorías continúen desafiando nuestras concepciones tradicionales sobre la vida extraterrestre y los fenómenos anómalos. Aunque se considera poco probable, recientes observaciones sugieren cierta validez, incrementando la probabilidad de esta hipótesis del 1% al 10%.
A medida que la comunidad científica profundiza en estas ideas, es esencial mantener un equilibrio entre el escepticismo y la curiosidad. Los autores del estudio subrayan que, aunque creen que la hipótesis criptoterrestre probablemente es falsa, merece una investigación científica rigurosa. Esta postura resalta la importancia de considerar todas las posibilidades, por más inverosímiles que parezcan, en la búsqueda de explicaciones para los fenómenos aún no comprendidos.
El estudio del programa Human Flourishing de Harvard también plantea la existencia de criptoterrestres como una forma de abordar el creciente interés global en los UAP y ovnis. Proponen que estos seres podrían habitar en puntos críticos de avistamientos, como volcanes y lagos, que servirían como entradas y salidas a sus sociedades ocultas. La teoría sugiere que las agencias federales podrían estar oscureciendo deliberadamente la naturaleza extraordinaria de muchos eventos relacionados con los UAP, lo que añade una capa de complejidad a la discusión.