En el Festival de Sundance, Presence, la última obra del aclamado director Steven Soderbergh, rompió con la tradición al captar la atención total de su elenco durante la proyección. A diferencia de la norma donde los actores suelen ausentarse durante la premiere, el reparto del film incluyendo a Lucy Liu y West Mulholland, permaneció en la sala, compartiendo la ansiedad y tensión palpable del público, que no fue capaz de soportar.
Este thriller de terror sobre la familia Payne, que lucha contra una presencia, fue un punto de inflexión para los actores, especialmente para Liu, quien admitió estar profundamente afectada por la experiencia. La película se destaca por su enfoque único, narrado desde la perspectiva del fantasma, una decisión artística audaz de Soderbergh que evita las tomas convencionales y se enfoca en capturar la historia desde un ángulo peculiar. El cineasta, también actuando como director de fotografía, utilizó técnicas poco convencionales como perseguir a los actores con cámaras equipadas con lentes de 14 mm mientras llevaba zapatillas de artes marciales para no hacer ruido.
Presence no solo mantuvo a su elenco 'atrapado', sino que también generó una gama de reacciones entre el público de Sundance. Algunos espectadores encontraron la tensión de la película demasiado intensa, llevándolos a abandonar la sala abrumados y estresados, un fenómeno poco común en los estrenos de Soderbergh. Por otro lado, la reacción general fue de entusiasmo y alabanza, consolidando la película como una de las más destacadas del festival y un posible éxito en el género de terror.
Aunque Presence aún no tiene fecha de estreno en cines, su impactante presentación en Sundance sugiere que será un tema de conversación importante en el mundo del cine. Además, el incansable Soderbergh ya está planificando su próximo proyecto, Black Bad, un thriller de espías que contará con la colaboración de David Koepp y un reparto estelar incluyendo a Cate Blanchett y Michael Fassbender.
