Michael Mann es un cineasta incansable. Hace unos años dirigió a Chris Hemsworth en una película que fue un auténtico fracaso de taquilla en 2015 y que, ahora, confiesa que no estaba del todo bien hecha ni armada. El responsable de Collateral o Heat -que tendrá una segunda parte si todo va bien-, explica que su Blackhat: Amenaza en la red no era buena y que gran parte de la culpa de que se la pegase en salas fue la falta de un guion inteligente y sólido.
Michael Mann pide perdón por la horrible Blackhat: Amenaza en la red con Chris Hemsworth, una de sus peores películas y un fracaso absoluto en taquilla
Tenía todos los ingredientes para triunfar. Por un lado, Chris Hemsworth. Hablamos del incombustible Thor en el Universo de Marvel, que en esta ocasión interpreta a Nicholas Hathaway, un hacker muy peligroso y convicto que es reclutado por el gobierno en una operación especial que busca dar caza a un pirata informático que amenaza el orden mundial. Con un guion firmado por Morgan Davis Foehl, estaba visto para ser un auténtico pelotazo en manos de Mann. Pero no fue así. La cinta se la pegó en la taquilla y se convirtió incluso en carne de meme.
Contó con un holgado presupuesto un thriller de esta índole, más de 70 millones de dólares y una partida promocional enorme -tienes a Hemsworth y hay que dejarlo claro-, pero Blackhat no funcionó. Apenas recaudó 19,6 millones en taquilla en todo el mundo y sus responsables se quedaron pasmados. ¿Qué había fallado? Bueno, ahora, años después, en una interesante entrevista en Variety, Michael Mann pide perdón y con un análisis sencillo afirma qué falló. el cineasta sabía que el guion estaba muy verde y que, pese a la premisa, no estaba listo para ser filmado. "No estaba terminada. No se tendría que haber filmado", afirma.
Y hay más. Muchos críticos y espectadores achacaron que la cinta incluía demasiada ciencia ficción o elementos poco reales en su recreación de este mundo afectado por ataques informáticos. Y ese bulo se extendió. "Había varias personas que pensaban que todo esto era fantasía. Error. Todo es absolutamente preciso", comunicaba el director de Miami Vice. Una lástima, pues el punto de partida de esta historia ha acabado confirmándose como algo real y tangible en un mundo cada vez más conectado y dependiente de internet y las tecnologías asociadas. Con 80 años, Michael Mann ha vuelto a demostrar que es un visionario aunque esta vez no le ha salido bien.
