Juego de tronos, la serie más laureada de la historia de la televisión, finalizó hace tres años por todo lo alto. La producción de HBO, que adapta las novelas de George R.R. Martin, nos contó una historia de fantasía pocas veces vista en el medio. Entre los muchos actores y actrices que catapultó a la fama, destaca Maisie Williams, una intérprete que ahora describe su paso por la serie como Arya Stark con "silencioso arrepentimiento" en el medio GQ británico.
Juego de tronos influyó en la manera de ser de Maisie Williams y aún no sabe cómo lidió con la fama tan joven
Williams dio vida a Arya Stark, la hija de Ned Stark que anhelaba ser una guerrera, y que acabó viviendo su propia aventura a través de Poniente y Essos. La actriz cree sin ninguna duda que Juego de tronos influyó en su mentalidad y en la manera en la que ha madurado.
Hace especial hincapié en el momento en el que le entregaron un sujetador en el plató, algo que ha calificado como un punto de inflexión en su carrera y el momento en el que el papel de Arya se apartó de su propia identidad. "Creo que cuando empecé a convertirme en mujer, estaba resentida con Arya porque no podía expresar en quién me estaba convirtiendo", añade Maisie Williams en la entrevista.
"Y luego también estaba resentida con mi cuerpo, porque no estaba alineado con la parte de mí que el mundo celebraba", afirma al mismo tiempo. No obstante, Williams fue elegida para dar vida a Arya Stark con apenas 12 años, una edad con la que nadie sabe lidiar con la fama y en la que cualquier movimiento en el mundo del espectáculo puede ser muy perjudicial. Juego de tronos fue subiendo el nivel de su escala y sus historias, y en la tercera temporada, ya había consolidado su éxito entre los espectadores. Había pasado de serie notable y de nicho a un fenómeno global pocas veces visto en la televisión. En esas fechas, Williams pisó una alfombra roja por primera vez, viéndose obligada a aceptar y asumir nivel de fama que, de haber sido más joven, no está "segura de lo que me habría hecho mentalmente".
Pero no se arrepiente de Juego de tronos y la gran mayoría de recuerdos son buenos. Si bien es cierto que no echa demasiado de menos la serie de HBO, sí agradece su paso por la misma. "¿Por qué querría sentirme triste por lo más grande que me ha pasado?", admite Williams. La actriz, que dejó a Arya Stark atrás, se ha preparado para Pistol, un proyecto que ahondará en la influencia de los Sex Pistols en los años sesenta. Encarnará a una modelo y pionera del punk. Si queréis más del universo de Canción de hielo y fuego, os recordamos que La casa del dragón se estrenará en agosto. La precuela que ahonda en la dinastía Targaryen es uno de los estrenos del año en HBO Max.
