No sabemos si son Flash o Quicksilver, pero sí sabemos que son muy rápidos cuando se trata de navegar por internet: Japón ha roto el récord alcanzando una velocidad de conexión a Internet de 319 terabits por segundo. Para que os hagáis una idea de cuán grande es esta cifra, la anterior marca estaba fijada en los 178 terabits por segundo, que alcanzaron los ingenieros de Reino Unido el pasado año. En otras palabras: la conexión del país nipón viaja a la velocidad del rayo.
Japón revoluciona la velocidad de internet
¿Lo mejor de todo? Tal y como apuntan desde TechSpot, sólo han necesitado "algo de ingenio y ajustes" para hacer que este nuevo invento funcionara. Y lo mejor aún de todo es que estas nuevas fibras ópticas son compatibles con los equipos existentes hoy en día, lo que significa que no debería ser especialmente desafiante modernizar las líneas actuales. "Para lograr esta hazaña, los investigadores (dirigidos por Benjamin J. Puttnam) construyeron un sistema de transmisión que utiliza completamente la tecnología de multiplexación por división de longitud de onda combinando diferentes tecnologías de amplificación", señalan en el medio. Podéis ver un esquema de la idea sobre estas líneas.
Para lograr esta hazaña, el Instituto Nacional de Tecnología de la Información y las Comunicaciones (NICT) de Japón utilizó tecnología avanzada de fibra óptica en un entorno de laboratorio. Para adentrarnos en más detalles, hablamos de una fibra óptica de cuatro núcleos (con un diámetro exterior estándar de 0,125 mm); los datos se enlazaron a través de bits en espiral que crearon una distancia de transmisión simulada de aproximadamente 3 kilómetros. Todo ello sin que se generara una degradación en la velocidad.
Una vez que trazaron el camino, los investigadores emplearon un láser de 552 canales que se disparaba en múltiples longitudes de onda a través de múltiples amplificadores. ¿El resultado? Alcanzar una velocidad de internet que ha hecho que estemos aquí hablando del hallazgo: 319 terabits por segundo. Para que os hagáis una idea de la velocidad que supone esta cifra, en GameSpot utilizan el siguiente ejemplo: descargar los 220 GB que pesa un videojuego como Call of Duty: Black Ops Cold War requeriría de 0.005552 segundos para descargarse. Sin duda, estamos ante los primeros pasos de lo que encontraremos en términos de velocidad de internet... en un futuro muy próximo.
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