La segunda temporada de La Casa del Dragón sigue desarrollándose con intensidad y los dragones y sus jinetes están ganando mayor protagonismo. Después de la última batalla, ambos bandos intentan recuperar fuerzas y recursos para tener más opciones de victoria. Rhaenyra Targaryen, en su búsqueda por nuevos jinetes para sus dragones, enfrenta desafíos significativos. (Spoilers del último capítulo a partir de aquí). Su intento inicial de vincular al caballero Steffon Darklyn con el dragón Bruma falla trágicamente, pero abre la puerta a nuevas oportunidades. La serie resalta cómo, en el universo de Juego de tronos, las acciones siempre tienen consecuencias inesperadas.
La importancia de la ascendencia valyria, particularmente la sangre Targaryen o Velaryon, se reitera en ambos La Casa del Dragón y Juego de Tronos como un requisito para vincularse con un dragón. En el episodio seis, Rhaenyra investiga la ascendencia de Steffon Darklyn para que intente reclamar a Bruma, la bestia de su primer marido, Laenor Velaryon. Aunque su plan inicial fracasa con la muerte de Darklyn, Bruma se muestra interesado en Addam de de la Quilla, el hijo bastardo de Corlys Velaryon, sugiriendo que la ascendencia valyria aún juega un papel crucial en la capacidad de montar dragones.
La dinámica entre Bruma y de la Quilla evoluciona significativamente en el sexto episodio. Bruma muestra un interés inusitado en Addam mientras trabaja cerca de la playa, culminando en una confrontación en la que el destino de este queda en suspenso. Al final del episodio, Rhaenyra recibe noticias de que un dragón sin jinete ha sido avistado con alguien a sus lomos. Aunque inicialmente piensa que se trata de un Targaryen del bando de los Verdes, todo indica que Addam ha logrado vincularse con Bruma, lo que representa un giro crucial en la narrativa.
Una explicación que se encuentra en los escritos de la Vieja Valyria
La posibilidad de que alguien que no sea Targaryen monte un dragón se explora a través de los escritos de la Vieja Valyria. Jacaerys sugiere que la ascendencia Targaryen puede no ser estrictamente necesaria, y que los relatos glorifican a los señores dragón para justificar su superioridad. Esto abre la puerta a la idea de que la conexión con los dragones podría depender más de la ascendencia valyria en general, lo que explicaría por qué Addam, con sangre Velaryon, podría montar a Bruma.
La conexión ancestral entre las casas Targaryen y Velaryon también se destaca como una posible explicación de por qué Addam puede montar a este dragón. Ambas casas provienen de la Vieja Valyria, y a pesar de que los Velaryon tradicionalmente no eran señores dragón, su linaje valyrio podría ser suficiente para establecer una conexión con los dragones. Este vínculo ancestral y las frecuentes uniones matrimoniales entre las casas podrían haber dejado rastros de sangre Targaryen en los Velaryon.
Otra teoría es que Bruma haya elegido a su propio jinete, viendo en Addam una semejanza con Laenor, su antiguo jinete. La serie muestra a Bruma merodeando por Rocadragón, posiblemente echando de menos a Laenor. Mysaria sugiere que el dragón podría sentirse solo, lo que podría haber motivado a Bruma a buscar un nuevo jinete en Addam, quien comparte características de honor y bondad con Laenor.
La lealtad de Addam a la casa Velaryon y, por ende, a Rhaenyra, se explora a través de su relación con Corlys Velaryon y su posición dentro de la casa. Aunque Addam no ha interactuado directamente con Corlys en la serie, su vínculo con la casa Velaryon sugiere que, al unirse con Bruma, se alineará con el bando Negro en la guerra civil. Esto es consistente con la narrativa del material original, Fuego y Sangre, donde Addam y Bruma juegan un papel significativo en la Danza de los Dragones.