Pompeya es una de las minas de oro para la arqueología y los amantes de la mitología. Situada en la región de Campania, allá en el sur de Italia, esta emblemática ciudad quedó enterrada bajo metros de cenizas y piedra tras la terrible y trágica erupción del monte Vesubio en el año 79 d.C. El lugar, como prácticamente todo el territorio italiano, está excavado y estudiado de la cabeza a los pies por su rigor e importancia histórica. Sin embargo, un grupo de expertos se ha topado con una sorpresa al encontrar un saltón oculto en la ciudad mencionada plagado de obras de arte relacionadas con la mitología y la guerra de Troya.
Pompeya sigue sorprendiendo a los expertos y un grupo de arqueólogos encuentra importantes obras de arte en muy buen estado
El salón en cuestión, de 15 metros de largo por otros seis metros de ancho, está bañado en obras protagonizadas por personajes de la Ilíada, una de las grandes epopeyas griegas de Homero cuya trama relata lo acaecido durante 51 días en el décimo y último año de la guerra de Troya bajo la cólera de Aquiles, uno de los principales guerreros del conflicto bélico. Gabriel Zuchtriegel, director del Parque Arqueológico de Pompeya, realizó unas declaraciones para explicar cuál era la función de ese salón y lo que representa: "La gente se reunía aquí para festejar después de la puesta de sol, la luz parpadeante de las lámparas de aceite hacía que las imágenes parecieran moverse, sobre todo después de unos vasos de un buen vino de Campania".
"La frecuente presencia de figuras mitológicas en las pinturas de las salas de estar y de convivencia de las casas romanas tenía precisamente la función social de entretener a invitados y comensales, proporcionando ideas para la conversación y la reflexión sobre la existencia", añadía el directivo. Casandra, hija de Hécuba y Príamo, los últimos reyes de Troya, es una de las figuras más destacadas del salón oculto de Pompeya que habla, según sus responsables de "la relación entre el individuo y el destino" mediante figuras como Helena y el príncipe Paris: "Hoy, Helena y Paris somos todos nosotros: cada día podemos elegir si preocuparnos solo de nuestra vida íntima o explorar cómo esta vida nuestra se entrelaza con la gran historia, pensando por ejemplo no solo en las guerras y la política, sino también en el clima humano que estamos creando en nuestra sociedad, comunicándonos con los demás en persona y en las redes sociales", recogen desde AS.