A mediados de la semana pasada nos llegó a Netflix la que es considerada por muchos como la mejor película argentina de toda la historia. Hablamos de un thriller soberbio dirigido por el mítico y veterano director Juan José Campanella, quien en el pasado ha firmado obras recordadas como 'El hijo de la novia', 'Luna de Avellaneda' o 'El mismo amor, la misma lluvia'.
Campanella ha estado detrás de las cámaras en algunas series de televisión para Estados Unidos como 'Halt and Catch Fire' o 'Colony', pero sin duda, su trabajo más formidable hasta la fecha y su gran obra maestra es este largometraje protagonizada por Ricardo Darín en 2009 del que venimos a hablaros: 'El secreto de sus ojos'.
'El secreto de sus ojos', una extraordinaria película de suspense que se ha convertido en toda una obra maestra del género
La sinopsis de 'El secreto de sus ojos' que nos ofrece la ficha de Netflix es la siguiente: "La novela biográfica de un agente judicial jubilado sobre el asesinato sin resolver de una recién casada acaba convirtiéndose en la clave para descubrir la verdad".
A menudo cuando solemos pensar en películas modernas de suspense con investigaciones policiales de por medio se nos suelen venir a la cabeza grandes éxitos de culto que han pasado a la historia, como la archiconocida 'Seven' de David Fincher o la magnífica 'El silencio de los corderos' de Jonathan Demme. Pese a ser ambas cintas de la década de los años 90, siguen siendo muy recordadas a día de hoy.
En este sentido, creemos que 'El secreto de sus ojos' es otra cinta que deambula por los mismos derroteros y nada tiene que envidiar a los grandes referentes del thriller, pues desde su estreno hace ya casi 15 años esta película protagonizada por el gran Ricardo Darín ha demostrado ser una obra maestra irrepetible.
La trama de 'El secreto de sus ojos' no podría ser más intrigante y acertada para el terreno en el que se mueve, en ella se nos presenta utilizando una narrativa no lineal al oficial de un Juzgado de Instrucción de Buenos Aires recién retirado, Benjamín Espósito, quien vive obsesionado desde hace 25 años por un brutal asesinato del que fue testigo. Carcomido por este hecho, Espósito decide escribir una novela del caso que todavía sigue sin resolverse, lo que le lleva a revivir el pasado y recordar a una mujer de la que continúa enamorado en silencio.
La historia de la película, que explora climas políticos y sociales, se basa en la novela 'La pregunta de sus ojos', del autor argentino Eduardo Sacheri, quien escribe mano a mano el guion con Campanella, y la producción de la misma es una colaboración con España que cosechó un éxito sin precedentes en su país de origen como hacía décadas que no se vivía.
Esta obra logró convertirse rápidamente en una de las películas más vistas en las salas de cine de Argentina, atrayendo a más de dos millones y medio de espectadores, y su ascenso meteórico la llevó a estar presente en la gala de los Óscar de 2010, ceremonia en la que ganó el premio a la Mejor película de habla no inglesa (la segunda vez que ha ocurrido esto; la primera fue con 'La historia oficial', de 1985).
Todos estos reconocimientos que se ha labrado 'El secreto de sus ojos' solo se entienden una vez vista la película, por supuesto. Y es que estamos ante cine en mayúsculas. Una propuesta de estilo clásico a la vez que un viaje de ritmo y nervio tremendamente contemporáneo que ahoga al espectador en su intriga y lo pone al borde del asiento con escenas que se graban a fuego en la retina (imposible de olvidar esa adrenalínica persecución en el estadio de fútbol con un plano secuencia de más de 5 minutos de duración).
Si todavía no has tenido ocasión de disfrutar de esta maravillosa película, no lo dudes, es una de esas estrellas fugaces que pasan pocas veces por el firmamento. Por fortuna, su estatus y gran reputación la mantienen a menudo disponible en los catálogos de múltiples plataformas de streaming, como en Prime Video, HBO Max o Disney+, así que no dudes en buscarla si no estás suscrito a Netflix. No necesitas saber mucho más sobre ella, es uno de esos trabajos que se disfrutan más cuanto menos se conocen.