George R.R. Martin vuelve a ser viral, y no por haber dicho cuándo entregará -o no- el próximo libro de Canción de hielo y fuego, su excelente y multipremiada saga literaria, origen de Juego de tronos. Su nombre ha vuelto a los titulares tras conocerse que odia los fanfic o fan ficciones, las historias que los aficionados a un escritor, novela o universo crean y comparten por internet. Eso sí, pese a que cree que son un problema para los escritores y autores profesionales, Martin aclara que le ayudan a ordenar la mente pues él mismo llegó a escribir algunas historias cuando era joven. Pero, ¿son nuevas las declaraciones sobre los fanfic? No, son de 2019. Os explicamos de dónde viene la polémica.
George R.R. Martin cree que los fanfic son un fenómeno peligroso y desafiante, así como algo engañoso y tortuoso para los escritores
Decir que George R.R. Martin, uno de los autores que sentó las bases para el universo de fantasía actual más importante y para la serie de televisión más importante de la televisión, Juego de tronos, odia los fanfic no es del todo cierto. Martin no es fan de este tipo de contenidos literarios, muy populares en internet en nuestros días, porque piensa que generan más problemas que beneficios. "No soy un defensor de los fanfictions", explicando en su día, allá por 2019 que, cuando era mucho más joven, fanfiction era algo que se llamaba ficción escrita por fanáticos, en lugar de lo que ahora significa, que es ficción que usa personajes y mundos inventados por otros autores para contar nuevas historias o versiones.
El novelista es consciente de que la mayoría de las personas que escriben fanfiction no están tratando de escribir profesionalmente ni dedicarse a ello, pero para aquellos que lo hacen, no cree que el fenómeno fanfiction ni dedicarse a ello sea una buena manera de hacerlo. "La otra cosa es que hay todo tipo de problemas de derechos de autor cuando usas el trabajo de otras personas...", explicó en su momento. "Mi entendimiento de la ley es que, si supiera que están haciendo algo con mi trabajo, lo detendría", continúa.
"No creo que sea una buena manera de entrenar para ser un escritor profesional cuando estás tomando prestado el mundo y los personajes de otras personas", afila. "Para mi es como andar con una bicicleta con las ruedas de apoyo. Y luego, una vez te quitan las ruedas, te caes, yo me caí mucho, pero debes quitártelas en algún momento. Tienes que inventar tus propios personajes, tienes que construir tu propio mundo, no puedes simplemente pedírselo todo prestado a Gene Roddenberry o George Lucas o a mí o a quien sea", confirmaba Martin, que confiesa que él mismo escribió relatos en su día.
Para Martin, el principal miedo es la infracción de derechos de autor. Y da ejemplos. Habló de Marion Zimmer Bradley, la autora de la serie Darkover. La autora amaba y fomentaba el fanfiction hasta el punto de leerlo ella misma y participar en las discusiones. Pero un día pasó algo. Uno de esos relatos compartía puntos vitales y tramas muy parecidas a las del libro que estaba preparando. La seguidora de la escritora había escrito cosas muy muy similares, hasta el punto que la novelista, asustada por las posibles represalias, tuvo que reconstruir su historia. La fan, en lugar de apoyar a la autora, reclamó el 50% de los derechos de autor y las ventas de los libros y amenazó con denunciar a Zimmer Bradley si no hacía caso a sus demandas. Se consideraba coautora de la novela junto a su ídolo.
La autora desechó todo el trabajo, el libro entero, pera evitar problemas legales. Por eso Martin no los ve con buen ojo. Curiosamente, HBO está sacándole partido a su universo de fantasía con dinastías y dragones, anunciando nuevos spinoff y series derivadas completamente originales, pero basadas en su trabajo previo.