El fin del mundo tal y como lo conocemos, algo de boga por el estreno de The Last of Us, no vendría por un hongo o por un virus. La catástrofe global más peligrosa podría venir por un colapso informático, algo conocido como cibercatástrofe, que llevaría a un apagón total de los sistemas asociados a internet y que regresaría a la humanidad a la edad de piedra en cuestión de días.
Los expertos de seguridad alertan: el colapso informático de todo el planeta es una realidad muy posible
El Foro Económico Mundial ha publicado su Global Security Outlook Report 2023, en el que se alertan de las más nefastas posibilidades de un posible apagón tecnológico producido por hackers, un virus informático o un colapso concatenado a las inestabilidades geopolíticas que atraviesa el planeta en estos momentos. Este informe, que se publica cada año, analiza las amenazas en materia de ciberseguridad en diferentes ámbitos y concluye de forma tajante que, en menos de dos años, asistiremos a la catástrofe tecnológica más grande que la humanidad ha experimentado.
"En dos años como muy tarde el mundo se verá amenazada por una cibercatástrofe de dimensiones colosales como consecuencia de la incertidumbre de naturaleza geopolítica", explican en el informe enlazado más arriba. Esta posibilidad, avalada por el 93% de los expertos y el 86% de los directivos consultados en el informe del Foro Económico Mundial, destaca lo débil de las protecciones de muchas instituciones, empresas y gobiernos, que podría estar a merced de piratas informáticos, malware o las cada vez más presentes inteligencias artificiales. Además, los firmantes del estudio hacen hincapié en que nunca antes tantas personas se habían puesto de acuerdo sobre el advenimiento de un evento de colapso tan masivo como el descrito.
¿Cómo sería el gran apagón o colapso informático de la civilización?
Figuras de la cultura popular, como actores de Hollywood y grandes filántropos como Bill Gates, han afirmado que el gran colapso o apagón, el evento que termine con la tecnología y la sociedad tal y como la conocemos, sucederá más pronto que tarde. ¿Cómo? Algunos expertos creen que los ciberataques rusos sobre operadores y sistemas de satélite y sus consecuencias de largo alcance en entornos varios, podrían ser una causa.
Los países como Rusia invierten millones de dólares en legiones de hackers que piratean hospitales, bancos centrales, gobiernos o sistemas eléctricos, como ya ocurrió con los aerogenedadores o la destrucción de canalizaciones de gas. Un ataque coordinado podría condenar a la zozobra a diferentes países al mismo tiempo, generando incertidumbre social y geopolítica y llevando a un efecto mariposa que condene a regiones y continentes enteros en poco tiempo, según los expertos.
No sería algo instantáneo, se produciría en días o semanas, viéndose el mundo sumido en un caos progresivo del que sería difícil salir. Países enteros se quedarían sin luz o suministro de gas, las grandes ciudades no tendrían alimentos, el dinero perdería valor con la caída de los sistemas financieros e internet desaparecería, cortando las comunicaciones más básicas.
¿Cómo nos afectaría? Es difícil de predecir, si bien se hablan de colapsos en los suministros energéticos, en las comunicaciones por teléfono o internet, un aspecto que afectaría a más ámbitos de nuestra vida de lo que somos capaces de predecir, ya que todo o casi todo depende de una conexión a la red. En cuestión de horas, todo lo que damos por supuesto podría acabarse, regresando a la humanidad a un estado prehistórico de la noche a la mañana. Por eso, Jürgen Stock, secretario general de Interpol, confiesa que, si bien la situación es preocupante, hay que redoblar esfuerzos en dar respuestas a estas amenazas informáticas. En el pasado, países como Albania han sufrido estos ataques coordinados de fuerzas externas. Edi Rama, el primer ministro de Albania, lo adelantó: "las consecuencias de la cibercatástrofe serán mucho peores que las propiciadas en su día por la pandemia del coronavirus".