Mario y Sonic son sin duda los atletas que más medallas acumulan en unos juegos olímpicos. En 2007 Sega y Nintendo nos sorprendieron uniendo a sus dos símbolos en Mario y Sonic en los Juegos Olímpicos poco antes de los Juegos Olímpicos de Pekín. Después llegaron los de Londres (2012) y Río de Janeiro (2016) y, en la versión de juegos de Invierno, los de Vancouver (2010) y Sochi (2014). Quitando los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang, los dos personajes y el resto de personajes que les suele acompañar casi no se han perdido una cita con los aros olímpicos.
Gameplay comentado
Los juegos que ha acompañado a estas citas mundiales con el deporte han tenido un recorrido un tanto irregular que osciló entre lo normal y lo bueno. Pero el año que viene Mario y Sonic juegan en casa ya que los Juegos Olímpicos se celebran en Japón (Tokio repite ya que fue sede en 1964) y las empresas que los crearon han puesto toda la carne en el asador en un juego con múltiples posibilidades y en el que se nota que se ha puesto mucho cariño tanto en el modo historia como en el hecho de que hay más pruebas que nunca. En total hay 24 pruebas en el Tokio actual y 10 en el de 1964, mientras que en el juego de los JJ.OO. De Río había 17.
Estas son todas las pruebas:
- 100 M
- 400 M vallas
- Salto de longitud
- Maratón
- Plataforma 10 M
- Salto
- Piragüismo
- Judo
- Voleibol
- Tiro
- Gimnasia - Ejercicio de suelo
- Natación - 100 M libres
- Hípica - Saltos
- Canoa bliplaza (C-2) 1000 M
- 100 M Vallas
- Fútbol
- Tiro con arco
- Bádminton
- Boxeo
- Lanzamiento de jabalina
- Rugby a siete
- Esgrima
- Escalada deportiva
- Kárate - Kumite
- Surf - Tabla corta
- Skateboarding - Park
- Tiro olímpico de fantasía
- Carrera de fantasía
- Kárate de fantasía
También llama la atención la cantidad de posibilidades que hay de jugarlo ya sea en solitario ya sea como party game con hasta otros tres jugadores de forma presencial o por internet, y todos contra todos o en equipos de dos. Otro detalle que muestra el interés que ha tenido el estudio en dar a los jugadores todas las opciones posibles es que podemos jugar todas las pruebas utilizando la detección de movimiento de ambos Joy-Con o utilizando un solo mando o de utilizar solo botones, aunque si decidimos que el control elegido no va bien para la prueba en la que estemos compitiendo no hay opción de cambiar y hay que salir al menú principal y volver a entrar para cambiar el control.
Las dos ediciones celebradas en Tokio se dan la mano
La primera sorpresa agradable llega con la introducción de una parte retro ya desde los primeros instantes del modo Historia de forma que están presentes a la vez Tokio 1964 y Tokio 2020, algunos con disciplinas comunes, aunque el multijugador está solo disponible en el del presente. El aspecto de los personajes, los escenarios y hasta los controles son muy diferentes en los dos.
De Tokio 1964 nos pareció encantador aunque no realmente complicado el salto de longitud, con controles muy sencillos: solo hay que pulsar múltiples veces el botón A lo más rápido posible para correr más rápido y, llegar a la línea de penalización pulsamos B ligeramente hasta llegar al ángulo de salto deseado y soltar ahí. Más reto supone el salto desde la Plataforma de 10 m, en la que podemos elegir entre varias pulsaciones de botones que hay que apretar rápido en el mismo orden para que el personaje elegido empiece el salto con elegancia. Un solo fallo provoca que caigamos al agua en plancha. Si conseguimos acertar todas las pulsaciones hay algunas más extra que sirven para decidir cómo es la entrada al agua. Algo similar sucede con Gimnasia.
Los juegos en equipo funcionan muy bien en el multijugador
Algunas disciplinas parecen pensadas para jugarlas en solitario, como el skateboarding, y otras para disfrutarlas en multijugador (la esgrima o el boxeo resultan ideales para dos jugadores). El piragüismo se adapta a todas las modalidades, y es especialmente complejo jugando dos personas en el mismo equipo ya que deben sincronizar el ritmo de pulsación del botón para remar. El fútbol constituye un valor seguro tanto en solitario como compitiendo contra otros jugadores y repite el Rugby 7 que ya estaba en los juegos de Río y sigue siendo muy divertido en multijugador.
Todos los detalles han sido pensados con mimo y hay algunos que nos roban el corazón como la Carrera Bala que constituye una de las primeras pruebas del modo historia en la que el Sonic de los 16 bits debe competir contra un tren bala. Pero hay otras muchas características que están pensadas para quienes conocen bien Tokio -los personajes se van moviendo sobre un mapa de la ciudad -mejor dicho, los dos Tokio, uno de la actualidad y el otro de 1964-, para ir de un escenario olímpico a otro- o los amantes de los Juegos Olímpicos, ya que hay desperdigadas por los escenarios numerosas preguntas que hacen referencia a la historia de las Olimpiadas modernas.
20 personajes de los universos de Mario y Sonic
No todo es más en esta edición de Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos; en esta ocasión hay 20 personajes (más uno oculto en algunas disciplinas), y, de lo que hemos jugador, no hay ni rastro de los amiibo ni se pueden utilizar Mii, jugamos con los personajes de los mundos de Sonic y Mario, que tienen características definidas que los hacen idóneos para cada forma de jugar.
Sin ser nada del otro mundo, el modo Historia está jalonado de detalles que pueden encandilar a los jugadores, hay pruebas de dificultad diversa, lo que garantiza que siempre habrá varias idóneas para la situación en la que vayamos a jugar, aunque ir de una prueba a otra puede llegar a ser lioso por el tipo de control que tienen algunas disciplinas; unas necesitan cierta habilidad o memoria mientras que otras son puros machacabotones.
Durante las dos horas que probamos primero el modo Historia y luego el multijugador el tiempo pasó muy rápido y las competiciones son muy cortas y tan variadas que no dieron lugar a aburrirse; nos quedamos con la sensación de que se adapta a varios entornos y tipos de jugador. Las distintas posibilidades de control que ofrecer Switch transmiten sensaciones muy diferentes aunque en ocasiones puede resultar demasiado complejo para un juego tan ligero. Lo que sí consigue Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos: Tokio 2020 es que sintamos que son unos juegos de Japón y que toda la ciudad los siente como parte de sí, lo que es una buena sensación meses antes de que comiencen los Juegos. Se pondrá a la venta el 8 de noviembre en exclusiva para Nintendo Switch.
Estas impresiones se han escrito después de haber probado el juego en el showroom de Nintendo en Madrid.