Factor 5 es uno de los grupos de desarrollo más reputados en el género de los matamarcianos y, cuando se anunció que ya no trabajarían en exclusiva para consolas Nintendo, sino para "otras plataformas", fueron muchas las cábalas sobre cuál sería el nuevo proyecto de los creadores de la exitosa saga Rogue Squadron durante los últimos años. El gato al agua se lo llevó Sony of América, aparentemente, y Lair es el primer título que los creadores de Turrican preparan para la nueva generación. Hasta el momento se había mostrado muy poco, pero recientemente, gracias a Sony España, hemos tenido oportunidad de probar este prometedor juego.
En Lair cabalgaremos sobre un dragón, como el trailer, y las distintas imágenes mostradas hasta ahora, han dejado bien claro a todos los jugadores. Se trata de un juego de acción y disparos similar a un juego de naves como los Rogue Squadron de la propia compañía, pero aparte de disparar llamaradas de fuego por la boca del dragón, el piloto también intervendrá en la lucha. Además, podremos "aterrizar" en el suelo, y combatir contra unidades terrestres enemigas. Pero lo que más nos ha llamado la atención es que el juego usa el mando SixAxis de PlayStation 3, y su detección de movimiento, para controlar el movimiento del dragón.
Tuvimos ocasión de probar un nivel de tutorial y uno de los primeros niveles del juego, donde teníamos que librar una batalla contra dragones en los cielos y enemigos en un largo puente. En el tutorial aprendíamos a manejar el dragón usando la detección de inclinación del mando de la consola, y a pelear contra dragones en el aire. Para lo primero se usaban los clásicos anillos en el aire, habituales en este tipo de juegos, y muy necesarios para calibrar cómo se controla el dragón. Inclinando el mando hacia delante bajamos, hacia atrás subimos, y hacia los lados giramos. Cuesta cierto tiempo adaptarse a este tipo de control, tan habituados al analógico izquierdo, y resulta cómico acompañar inconscientemente el movimiento del mando con el del cuerpo. Como en el caso de Wii, es preciso un tiempo para adaptarse a la sensibilidad del control, cuánta inclinación hace falta para lograr determinado cambio en la dirección del dragón.
Para acelerar usaremos el botón X, y para frenar cualquiera de los botones analógicos, ahora con largo recorrido, L2 y R2. El combate estándar de los enemigos se soluciona disparando bolas de fuego por la boca, pulsando el botón cuadrado, pero lo que verdaderamente nos enseñaba el tutorial era cómo combatir cuerpo a cuerpo contra los dragones enemigos. Enfocando a los enemigos, usando los botones L1 o R1, tenemos la opción de perseguirlos y ponerlos a su lado. En ese momento el juego entra en una especie de modo cinemática donde la dirección del dragón es automática, y nosotros solo tendremos que preocuparnos de enfrentarnos al enemigo que tenemos al lado.
En este modo de enfrentamiento deberemos mover rápidamente el mando en la dirección del dragón enemigo para chocar contra él, o bien pulsar los botones; tras unos cuantos choques, podremos ejecutar un ataque cuerpo a cuerpo con el dragón, y el juego entrará en un modo de acción cinemática al estilo de los Quick Time Events de Shenmue, o de God of War, aunque, al menos en esta demo, era mucho más sencillo. Cuando los bordes de la pantalla se ponen en rojo, podremos pulsar uno de los botones, y nuestro dragón (y su piloto) comenzará un combo para acabar con el dragón enemigo, que podremos ir cambiando en tiempo real según el botón que pulsemos cada vez que la pantalla nos lo indique. Estas secuencias mortales son bastante espectaculares y aparentemente serán bastante variadas.
Una vez demostradas nuestras dotes pilotando nuestro fiel dragón, llegaba la hora de enfrentarnos a un nivel real, sin consejos en la pantalla y un número de enemigos mayor. En este primer enfrentamiento real con los enemigos pudimos comprobar la capacidad del motor gráfico del juego que, aunque prometedor, todavía parecía estar en una fase temprana de desarrollo. Lair muestra unos grandes escenarios, con unos efectos de agua especialmente llamativos, y un buen número de personajes en pantalla, tanto soldados como enemigos. Los primeros todavía se mostraban un tanto preliminares, con unas animaciones no muy completas ni un nivel de detalle que esperamos que mejore.
En el nivel teníamos que lidiar contra numerosos dragones surcando los cielos del modo que ya hemos explicado, pero también, como comentábamos al principio, habrá que hacer frente a los numerosos enemigos que había en el puente, peleando contra nuestras tropas. Un medidor de moral determina el estado de la batalla, al estilo de Dynasty Warriors aunque, curiosamente, nuestro color es el rojo, y el del enemigo el azul, al contrario que en la mencionada saga. Para evitar que la barra acabe completamente azul, teníamos que acabar con los múltiples dragones que amenazaban a nuestras tropas, y dar buena cuenta de las enemigas.
Para lograrlo podíamos no solo disparar bolas de fuego hacia el suelo y hacia elementos del escenario (en los que podemos enfocar el objetivo), sino también aterrizar y "dar un paseo" acabando con los enemigos, ya sea a garrazos, o escupiendo bolas de fuego. Un detalle curioso es que si pulsamos el botón cuadrado lanzamos una bola de fuego, pero si lo mantenemos pulsado, nuestro dragón escupirá una llamarada continúa mucho más efectiva. Tenemos otros ataques para hacer auténticas masacres, aunque en la demo mostrada era difícil mantenernos en el suelo ya que el movimiento del dragón es muy sensible a la inclinación del mando Sixaxis.
Como decíamos, la demo está en un estado bastante preliminar, parece más destinada a demostrar las capacidades del Sixaxis que de mostrar el potencial del juego. Muchas posibilidades, como la prometida evolución del dragón y el personaje, o la especulación sobre los daños en tiempo real que irá mostrando nuestra montura –al estilo de juegos como King Kong-, no estaban implementadas, y el sistema de combate parecía simplemente funcional, esperamos mucho más de él.
En nuestros primeros minutos con Lair pudimos comprobar que se trata de un juego bastante prometedor, aunque todavía está un poco verde, ya que le quedan muchos meses de desarrollo. Gráficamente está claro que mejorará mucho más, viendo la calidad de otros juegos de PlayStation 3, y a nivel jugable esperemos que acabe teniendo muchas más opciones, ya que lo mostrado hasta ahora parece un esbozo de lo que acabará siendo. Si Factor 5 logra aprovechar la potencia de PlayStation 3 con la misma maestría que la de GameCube y Nintendo 64, estaremos ante un título muy a tener en cuenta. A mediados del año que viene lo descubriremos.