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Fecha de lanzamiento:
PS3, PC, X360:
FICHA TÉCNICA
Desarrollo: Splash Damage
Producción: Bethesda Softworks
Distribución: Koch Media
Precio: 64,95 €
Textos: Español
Voces: Español
Online: 2 a 16 jugadores
ANÁLISIS

Impresiones Brink

Elige bando y juega solo o con compañía.
Versiones PS3, Xbox 360, PC. También disponible en Ordenador y Xbox 360.

Brink es un juego que llama la atención desde el primer momento en que lo ves. Con un estilo gráfico muy peculiar que usa personajes caricaturescos (pero con un acabo espectacular) es un juego que desde el principio destaca frente a otros exponentes del género. Y eso es sólo la primera impresión, ya que según profundizas se encuentras con un juego que promete eliminar las barreras entre el juego online y el offline, ofreciéndonos unas buenas opciones de personalización sin llegar a unos niveles que nos acaben cortando el ritmo, y es que Brink es ante todo un juego de acción.

En este E3 tuvimos la oportunidad de echar unas partidas al modo multijugador del juego, aunque antes nos pusieron en antecedentes de la historia que nos traerá. La acción transcurrirá en la ciudad flotante de Arc en el 2045, una ciudad en la que hay una guerra abierta entre dos grupos: Seguridad y Resistencia, enfrentados por los recursos del lugar.

A la hora de jugar, tanto la campaña como el modo online, podrás elegir cualquiera de las dos facciones y ver la historia desde su punto de vista.

Elige quién quieres ser

A la hora de elegir personaje no sólo podrás escoger su bando, sino que también podrás personalizarlo totalmente. El editor de personajes es bastante completo, aunque sólo se pueden hacer personajes masculinos. A la hora de personalizar nuestro avatar podremos elegir el tipo de complexión (delgada, media o fuerte) y luego ir eligiendo uno a uno los distintos aspectos del personaje como el pelo, la forma de la cara o incluso tatuajes. El interfaz del editor nos ha parecido muy atractivo e intuitivo promete tener muchas posibilidades. Una vez tengamos el físico del personaje podremos elegir sus ropas, que variarán en función del bando al que pertenezcamos, lo que sin duda ayudará a reconocer a nuestros compañeros en el campo de batalla. Pero no sólo podremos personalizar nuestro personaje, sino que también podremos "construirnos" nuestras propias armas eligiendo de entre una amplia gama de piezas y posibilidades.

Como en otros juegos del género podremos elegir la clase del personaje de entre cuatro opciones: soldado, médico, operativo o ingeniero. Cada una de estas clases tendrá sus propias habilidades y podremos cambiar entre una y otra siempre que veamos un terminal en el escenario (desde este terminal además podremos cambiar de armas o elegir una nueva misión). El soldado podrá dar munición a sus compañeros, el operativo tendrá como arma el sigilo y podrá disfrazarse del enemigo, el médico podrá curar y revivir a sus compañeros y el ingeniero podrá piratear terminales. Otro detalle es que en el juego se irá ganando experiencia con las misiones que cumplamos o los enemigos que matemos (experiencia que nos permitirá ganar nuevas habilidades), pero además, cada una de las clases tendrá una forma propia de ganar experiencia. Baste el ejemplo del médico que si cura a un compañero ganará un extra de experiencia, mientras que si se cura así mismo, lo perderá.

Algo que nos gustó de Brink la primera vez que lo vimos y que ahora hemos podido probar en primera persona ha sido el sistema de acrobacias que nos permite movernos por el escenario de una forma mucho más rápida y espectacular. Así, si le damos al botón de correr, el personaje se moverá automáticamente saltando o enganchándose a las superficies por las que pase. Sin duda estos movimientos son muy dinámicos y están estupendamente bien integrados, permitiendo que podamos jugar con el escenario a la hora de plantear las estrategias para el combate.

La barrera entre online y offline se difumina

Uno de los puntos fuertes de Brink es la integración del modo para un jugador y el online. De entrada, el personaje que usemos jugando solos será exactamente el mismo que si lo hacemos en compañía de otros jugadores humanos. Además, si estamos jugando solos se podrán conectar otras personas a nuestra partida sin que se interrumpa nada ni notemos nada. Como comentábamos antes, nosotros probamos el modo online, por lo que no pudimos comprobar la inteligencia artificial del juego (vital para la experiencia que quieren dar a este Brink), pero esperamos que estén haciendo un buen trabajo.

A la hora de jugar estaba disponible tan sólo un modo en el que debíamos acabar con el equipo contrario. Ambos equipos tenían su base en la que había un terminal desde el que acceder al cambio de clase o de arma y donde los personajes volvían a aparecer al morir. Por lo que pudimos probar el juego nos dio la sensación de ser tremendamente ágil y rápido (aunque puede ser por el modo de juego y el escenario, de un tamaño no muy grande). Nos gustó que la forma de interactuar con otros personajes era sencilla, pudiendo ver en todo momento la clase a la que pertenecían e interactuando con ellos sólo con un botón, por ejemplo, para darles munición.

Gráficamente el juego es realmente espectacular. Por una parte, como comentábamos al principio, el juego cuenta con un diseño de personajes realmente llamativo y que sin duda hace que nos quedemos con el juego al primer vistazo. Estos personajes, aunque tengan unas proporciones algo caricaturescas (narices y barbillas enormes, por ejemplo) cuentan con un modelado impecable y unas animaciones muy suaves (algo que se puede apreciar cuando vemos a nuestros compañeros realizando acrobacias. Los escenarios por otra parte contaban con bastante detalle y una iluminación muy buena, aunque lo cierto es que no pudimos ver demasiado del nuestro, ya que nos enfrentábamos al equipo rival en un espacio relativamente pequeño.

Tras esta breve pero intensa toma de contacto con Brink podemos decir que estamos deseando tenerlo en nuestras manos para poder jugarlo a fondo y comprobar si va a cumplir todas las expectativas. Y es que la idea de fusionar el modo online y offline es realmente atractivo pero lleva consigo una serie de requisitos como una IA excelente (sus desarrolladores prometen que no seremos capaces de diferenciar si jugamos con la máquina o con otros jugadores) o un buen equilibrio de juego que haga que el multijugador nos tenga enganchad durante horas. De momento queda esperar, un poquito menos ya que el juego sale en otoño, y ver que como acaba todo.