Desde hace ya algunos años, los juegos de rol multijugador masivo han ido intentando ofrecernos diferentes experiencias con las que hacerse un hueco en un mercado donde World of Warcraft parece que marca el camino a seguir. WildStar ya es un juego que desde su estética se perfila como una opción diferente, y ahora tenemos la oportunidad de conocer los primeros detalles sobre una de sus principales apuestas de cara al contenido endgame o Elder-game: los Warplots.
¿Qué son los Warplots?
Los Warplots son una de las posibilidades del modo PvP –jugador contra jugador– que nos permite crear nuestro propio campo de batalla. El terreno sobre el que se construye es una base flotante, por lo que el enfrentamiento real comenzará cuando aceptemos un desafío ajeno, momento en el que se unirán los dos terrenos y comenzará el asalto. Se producirán así enfrentamientos de 40 contra 40 jugadores.
Una vez hayamos alcanzado el nivel 50 en el juego, podremos comenzar a trabajar en nuestro primer Warplots, y organizar una "Warparty" que sentará las bases sobre las que comenzaremos a personalizar la experiencia. Si por casualidad no tenemos los suficientes jugadores en nuestro equipo, o si preferimos simplemente jugar por nuestra cuenta, tenemos el sistema de "mercenarios", por el cual podemos jugar de manera puntual en cualquier Warplot.
Manos a la obra
Si queremos construirnos nuestro campo de batalla, comenzaremos con 500 monedas virtuales para empezar a personalizarlo. Cada mapa tiene siete zonas totalmente modificables –de manera similar a lo visto en la personalización de casas–, donde colocar todo tipo de sistemas de ataque y defensa, que se verán potenciados por elementos como puntos de reaparición, e incluso la posibilidad de invocar a jefes que hayamos derrotado en una raid para que detengan a nuestros atacantes.
Tras la batalla, una victoria supondrá recompensas tanto para el Warplot, como para la Warparty como para los mercenarios, mientras que la facción derrotada no sólo se llevará la pérdida, sino que además se verá obligada a gastar dinero para reparar su Warplot si no quieren verse indefensos para el próximo enfrentamiento.
Profundidad estratégica
Carbine Studios ha querido enfatizar la profundidad estratégica que ofrecerá este modo, además, por supuesto, de los combates propiamente dichos, ya que los Warplots tendrán multitud de variables a la hora de elegir los componentes que lo forman. Divididos en "plugs" de diferentes tipos, tendremos que determinar la función de cada uno, mejorarlos y vigilar los costes de cada uno.
Tenemos Travel Plugs –pensado para la aparición de los enemigos–, Small Plugs –sistemas de ataque y defensa básicos–, Large Plugs –sistemas de ataque y defensa avanzados–, Superarmas –varios tipos de ataques muy potentes, incluyendo la invocación de un jefe–. Como véis, son múltiples las opciones al respecto, y su función varía dependiendo de dónde se vea ubicado en el Warplot. Tenemos zonas traseras, delanteras y centrales, y su naturaleza es siempre diferente.
Además de personalizar el Warplot como tal, también podemos elegir los "privilegios" de cada miembro de la Warparty y el control que tiene sobre nuestro campo de batalla, algo nos ayudará también a organizarnos tanto durante la creación del Warplot como durante su mantenimiento y de cara a la batalla.
¿Cómo vencer en el combate?
Según explicaba el estudio desarrollador, ahora mismo hay dos maneras de vencer en un combate de Warplots. La primera sería mermando las fuentes de energía del Warplot rival y de sus luchadores, imposibilitando la reaparición de éstos, mientras que la segunda sería invadiendo el terreno rival y destruyendo los dos generadores que éste alberga –ubicados en las zonas traseras que comentábamos anteriormente–.
El sistema todavía se encuentra en fase beta, pero Carbine asegura estar trabajando en un sistema que recompense y penalice a las Warparty de una manera justa en función de su rango, además de hacer lo propio con los mercenarios para asegurarse de que todas las partidas se dan en las circunstancias más igualadas posibles, convirtiendo la victoria en un bien preciado.
De cara al futuro
Otros detalles que el estudio afirma tener en marcha es un gran apoyo para el futuro de este modo. Por el momento las batallas son entre diferentes facciones, pero estudia añadir la posibilidad de elegir encuentros únicamente entre la misma facción. También planean añadir un modo espectador, aunque señalan que esto no es una prioridad, y podría llegar bastante más adelante.
Un tema que nos comentaron fue también el de mejorar el rendimiento gráfico del juego en este modo. El problema que encuentran muchos usuarios es que al enfrentarse hasta 80 jugadores en entornos "cerrados", la tasa de imágenes por segundo puede sufrir algunos bajones importantes en los momentos más caóticos, pero Carbine señala estar al tanto, y estar trabajando para mejorar la experiencia, tanto en lo visual, como en el código de red del juego, etcétera.
Una nueva razón para no perderlo de vista
WildStar sigue luchando por destacar en los meses previos a su lanzamiento, sumando razones para seguirle la pista hasta que éste se produzca el próximo mes de julio. Los Warplots se convierten por el momento en una razón de lo más interesante de cara a su modo PvP, añadiendo una nueva capa de profundidad al trabajo en equipo y a la estrategia para los que busquen una nueva dimensión en los enfrentamientos jugador contra jugador.
Recordad que podéis probar el juego por vosotros mismos si llegáis a tiempo a nuestro reparto de betas, ya que, si bien todavía quedan varias dudas por resolver de cara a lo que el juego de Carbine Studios tiene que ofrecer una vez se lance su versión final, los nuevos aspectos que vamos conociendo de él se convierten en adiciones positivas para este nuevo contendiente de cara a la batalla de los MMOR