En la nueva entrega de Civilization nos encontramos ante la siguiente premisa: la humanidad ha dejado el planeta y ha llegado la hora de colonizar otros mundos. En una sesión Pre-E3, el estudio Firaxis Games nos ha mostrado una versión alfa, que todavía presenta pequeños fallos, pero que es perfectamente "jugable" en sus primeros 60 turnos.
En Beyond Earth nos encontramos ante un mundo alien en el que, no solo nos tendremos que enfrentar a las criaturas de estos territorios inexplorados, sino que también habrá momentos de enfrentamiento contra otros líderes colonos. Nada más comenzar la partida, tendremos que elegir nuestra afiliación con uno de los líderes disponibles y la nave respectiva. Al aterrizar en el nuevo planeta, en un inicio es recomendable que exploremos el terreno y evitemos batallas, mientras construimos granjas, minas, zonas de cultivo y creamos nuevas unidades de exploración y soldados.
Los jugadores irán construyendo la historia dependiendo de las decisiones que tomen a lo largo de la partida. En determinados momentos nos toparemos con mensajes de "quests" o misiones y se nos darán varias opciones a elegir. Nuestra selección marcará diferencias en el transcurso de la historia.
En Civilization Beyond Earth contaremos con tres afinidades: Harmonía, Supremacía y Pureza. La Harmonía es una afinidad destinada a que convivamos mejor con el nuevo entorno en el que nos encontramos. Si expandimos nuestras habilidades de Harmonía encontraremos maneras de domesticar a ciertas especies del planeta y utilizaremos elementos como la modificación genética.
Por su parte, con la Supremacía incentivaremos nuestra tecnología y mejoraremos los batallones. Con la Pureza intentaremos convertir el nuevo planeta en algo más similar a la Tierra y construiremos defensas más efectivas. Estas tres afinidades tienen varias ramificaciones en un nuevo "tech tree" o "árbol tecnológico" que, a diferencia de entregas anteriores no es lineal, sino que cuenta con diferentes apartados a través de los que podemos navegar horizontalmente o verticalmente. Hay decenas de opciones disponibles en diferentes apartados, como por ejemplo, la química, física, colonización etc.
Por otra parte, la jugabilidad se mantiene: en cada turno controlaremos uno de los elementos que hayamos creado. El primero será la unidad de exploración que se irá trasladando por cada uno de los mosaicos o espacios (los nuevos "tiles" que adquiramos nos darán riqueza en un área diferente, como por ejemplo cultura o cultivo). Es importante crear, asimismo, unidades de soldados que se irán encargando de aniquilar las especies alienígenas existentes.
Nuestros esfuerzos tendrán que centrarse, en un primer momento, en acabar con los nidos de aliens circundantes, para que no puedan seguir generando enemigos. Si nos acercamos demasiado corremos el riesgo de caer en una "marisma", que se trata de una especie de nube tóxica que dañará la salud de nuestros soldados. Alrededor de la ciudad veremos cómo aparecen una especie de gusanos gigantescos subterráneos que serán más difíciles de aniquilar, hasta que contemos con un mayor progreso. Para debilitar a todos los enemigos que se encuentren acechando la ciudad, podremos atacarles con misiles desde el centro. El jugador tendrá la opción de utilizar sus turnos para devolver los soldados al centro de la ciudad con el objetivo de que reparen daños.
A medida que vayamos avanzando puede que nos topemos con otras ciudades de líderes diferentes que también se encuentran en expansión. En esos momentos aparecerá un mensaje del líder correspondiente ofreciéndonos varias opciones de diplomacia: si queremos entrar en guerra (no recomendable en un principio) entonces pulsaremos la opción correspondiente; aunque también se puede firmar un tratado de colaboración o simplemente cerrar el mensaje. Al conquistar una ciudad, ésta adquirirá nuestra arquitectura de manera inmediata.
Y con estos primeros puntos, ya nos adentramos de lleno en la primera demo jugable de Civilization Beyond Earth. Comenzamos en una ciudad del nuevo planeta con una unidad de exploración y otra de soldados. La ciudad se convertirá en el centro económico principal. Lo que queremos hacer en un primer momento es explorar lo que se encuentra en nuestro entorno. En algunos apartados nos topamos con aliens con los que debemos acabar si estos presentan una resistencia fácil y, mientras exploramos, tenemos que dar algo que hacer a la ciudad.
En este caso, tenemos la opción de crear una clínica para mejorar la salud de nuestros ciudadanos en general o una reliquia para mejorar la cultura y crecer de manera más rápida; elegimos la primera. A continuación, desplegamos nuestro árbol tecnológico para ver qué áreas deberíamos comenzar a mejorar. La ecología nos puede ayudar más tarde a acabar con los aliens, pero la tecnológica incentivará la construcción, así que nos decantamos por la segunda. Es en este momento en el que nos cruzamos con los aliens y sus nidos, así que vamos atacando por turnos y los misiles lanzados desde el centro de la ciudad parecen más potentes para debilitar a los enemigos de mayor tamaño.
Mientras tanto, la unidad de exploración va expandiendo el área conocida. Nuestro objetivo es analizar las áreas de este nuevo ambiente extraterrestre para ver por dónde nos vamos a expandir. Nos convendrá una zona cercana a un río, por ejemplo, ya que es un elemento primordial. Cuando avanzamos un poco más, en uno de los turnos, nuestra unidad de exploración se encuentra con un cofre de recursos, que ha sido enviado de manera previa desde el planeta Tierra y que adquirimos situándonos sobre él. Es importante buscar estos cofres.
Tras haber seleccionado la edificación de la clínica en primer lugar, ahora creamos constructores que se encarguen de preparar los "tiles" o segmentos que hemos ido adquiriendo. También podemos utilizar varios turnos para crear soldados en caso de que los necesitemos para nuevos ataques.
En nuestro avance, escogeremos virtudes que afecten a nuestra ciudad, como por ejemplo, producir más rápido o ser más poderoso en los ataques, lo cual nos vendrá bien en un inicio para acabar con los enemigos que nos encontramos en el planeta. En este momento aparece uno de los "quests" que nos permite tomar la decisión de ofrecer salud a nuestros trabajadores o a todos los ciudadanos en general. Escogemos la segunda opción y es importante destacar, en este punto, que una vez seleccionada, no tendremos la opción de volver atrás, ya que estaremos escribiendo la historia de nuestra civilización. Volvemos al "web tech" para escoger biología alien con el objetivo de que nuestros trabajadores se vuelvan inmunes a las nubes tóxicas o marismas, tal y como nos lo describen los responsables de Firaxis Games.
Con los puntos de energía acumulados podremos adquirir directamente edificios sin tener que esperar a que terminen de construirse en varios turnos. A medida que progresamos por las zonas inexploradas, nos vamos topando con nuevos enemigos, como unos aliens raptores con mayor resistencia que nuestros grupos de soldados. En estos casos queremos evitar acercamos con las unidades de exploración para que no acaben con ellas (a veces los aliens nos atacarán en caso de que nos acerquemos a uno de sus nidos).
A medida que nuestra civilización avanza se nos ofrecen herramientas útiles, pero en cada caso tenemos que seleccionar la mejor opción acorde a la situación. Si queremos seguir conquistando terreno, un repelente de las marismas nos vendría bien para acabar con las zonas tóxicas a nuestro alrededor; pero también podríamos desarrollar un repelente ultrasónico para mantener a todos los aliens alejados, incluidos los gusanos que acechan el centro de la ciudad, que son los más complicados de eliminar.
Turno de escoger otra virtud y esta ocasión queremos construir más rápido para poder expandirnos posteriormente. El juego cuenta con un sistema de ayudas para aconsejarnos qué hacer en cada momento.
Una vez hayamos progresado, descubriremos que las unidades pueden ser actualizadas. Por ejemplo, en un soldado se pueden mejorar los movimientos y su fuerza. Las mejoras afectan a toda la unidad en su totalidad, pero cada soldado puede generar puntos de manera individual. Y hasta aquí llegamos a los 60 turnos que se nos permiten jugar en esta primera demo.
En definitiva, con Civilization Beyond Earth se mantienen las claves del éxito de esta saga de estrategia, pero se cambia el planteamiento del árbol tecnológico, se añaden variaciones en la historia acordes a nuestras decisiones y nos dedicamos a la exploración espacial. Este episodio marcará un antes y un después en la saga. Su lanzamiento está previsto para el próximo otoño y será compatible con Mac OS X, Windows y Linux.