Cuando se desveló el pack de contenido Viaje a Batuu en la pasada Gamescom fue recibido con división de opiniones: el universo de La Guerra de las Galaxias es demasiado atractivo para aquellos que se sientan motivados en algún grado por el universo de LucasArts pero utilizar un mundo ya creado sonaba demasiado restrictivo para los amantes de Los Sims, a los que les gusta utilizar los elementos que nos da Maxis para crear sus propias historias. Las dudas entre la comunidad de jugadores mostraban también que los amantes de una franquicia no tenían por qué interesarse por la otra. Y es cierto. Para los jugadores de Los Sims 4 puede resultar interesante moverse en Batuu y encontrarse allí con Kylo Ren y Rey, pero es poco probable que a los aficionados de Star Wars les compense comprar el juego base más la expansión a no ser que ya les interesase el juego previamente.
Llama la atención que no se haya creado un barrio residencial nuevo con la ambientación de Star Wars y en cambio hay creado uno de destino de vacaciones, pero tiene su explicación en que Maxis ha llevado a su mundo virtual la atracción "Star Wars: Galaxy’s Edge" de Disneyland ambientada en Bantuu, con tres zonas diferenciadas: el Bosque de la Resistencia donde están los rebeldes, el Distrito de la Primera Orden dominio de los herederos del Imperio y el puesto avanzado de la Aguja Negra, un terreno donde operan los canallas (contrabandistas) y que pueden llevarse bien -o mal- con los otros dos bandos.
La expansión recrea este espacio del parque temático de Disney, que tiene una personalidad definida y meditada pero todos aquellos elementos que en la vida real son divertidos o necesarios se trasladan igual de bien a un juego, y Batuu se nota bastante vacío, hay pocos edificios con los que se pueden interactuar y de casi ninguno conocemos el interior, ni siquiera de la que es residencia del sim durante las vacaciones.
Los sims que aparecen en cada escenario no parecen residir por allí sino que en muchas ocasiones da la sensación de que aparecen en el momento adecuado, y los encuentros parecen forzados.
El personaje desaparece en la puerta y aparece tras haber realizado en el interior lo que le hayamos ordenado. Lo mismo sucede en las misiones a bordo del caza de la Primera Orden, la nave rebelde (llamada aquí Ala X) o el Halcón Milenario o en algún restaurante. Solo la cantina de Oga se convierte así en un lugar de encuentro, y en ella es donde pasaremos buena parte del tiempo, sobre todo si optamos por apoyar a la Primera Orden o nos convertimos en un canalla, ya que en la cantina está su principal líder.
Produce un cosquilleo de emoción la primera vez que viajamos a Batuu y el acercamiento de la cámara al personaje se acompaña por el tema principal de la serie de película. Con ese espíritu empezamos a hacer misiones y a recorrer el punto de partida de la aventura, el puesto avanzado de la Aguja Negra, que es el centro neurálgico ya que en él se encuentra el alojamiento del sim -y el único lugar en el que el personaje puede mejorar la higiene y aliviar la vejiga. Aquí también está la cantina, hay restaurantes y podemos comprar objetos estéticos para utilizar en los barrios residenciales y otros necesarios para las distintas misiones y, un detalle relevante, es donde podemos entrenar con el sable láser.
Misiones repetitivas
Después, dependiendo de la facción que hayamos elegido, iremos visitando las otras dos zonas. De hecho, estaremos constantemente cambiando entre zonas, con sus correspondientes tiempos de espera, a veces porque se prolonga una misión y hay que volver al puesto al alojamiento o porque hay que ir a hablar con alguien y volver… . Hay siempre varias misiones para elegir y sirven, aparte de para conseguir créditos galácticos, para mejorar la reputación dentro de una facción, a costa de empeorar la de la contraria, pero muchas suelen ser repetitivas y, un clásico en la serie, a veces alguna se convierte en imposible por un fallo de programación.
Viaje a Batuu ha optado por el contenido narrativo, lo que frena a los jugadores para desarrollar sus propias historias: las relaciones con Kylo Ren y Rey o lo demás líderes de facción, están limitadas y no hay nada que incite a hablar con otros habitantes de Batuu (excepto, quizás, el interés de timarles si formamos parte de los canallas). Casi todos están además condicionados por la facción a la que pertenecen, una vez nos decantamos claramente por una u otra los miembros de la rival empezarán a sospechar y tendremos que tener mucho cuidado de que no nos pillen cuando intentamos abrir una caja de suministros o piratear un puesto de control o tendremos una pelea que, si perdemos, supondrá la expulsión de la zona.
Kylo Ren es uno de los personajes más logrado. Vestido con una túnica negra y la máscara se pasea entre el puesto de mando y el Tie Fighter y es habitual escuchar su cavernosa voz y, si fallamos una misión, nos castigará sintiendo el poder de La fuerza. Viaje a Batuu tiene esos momentos en los que sí que nos sentimos dentro del planeta de "Star Wars", como cuando peleamos en un combate láser o entrenamos o cuando estamos bebiendo leche azul en la cantina de Oga mientras escuchamos versiones de algunas canciones conocidas de las películas, o cuando tenemos un enfrentamiento con el sable o compramos un droide y utilizamos sus capacidades en alguna misión, y es cierto que tiene limitaciones, pero hay que destacar que mantiene en todo momento el aire de juego de Los Sims y que, aunque el aspecto narrativo no es de los más fuertes del estudio, hemos estado varias horas probando distintas facciones y cambiando de parecer o compaginando las misiones en la resistencia o la Primera Orden con otros "trabajillos" en los canallas.
Al tratarse de un pack de contenido podremos luego llevar a la residencia habitual del sim los objetos que hayamos conseguido durante la estancia en Baatu y los que se han añadido al catálogo para decorar el solar y crear una casa o un solar comunitario temático con un aspecto de una galaxia muy lejana lo que abre nuevas posibilidades para la decoración, aunque también hay que decir que hemos echado de menos posibilidades para las paredes y los suelos que encajen bien con esta ambientación.
Misiones que podrían ser mejores con una historia que les diera coherencia
Viaje a Batuu se dirige a una parte muy específica de jugadores de Los Sims y es probable que estos se queden insatisfechos porque se les muestran esos personajes que les gustan pero no se les permite interactuar con ellos a fondo por la necesidad de ir cumpliendo misiones para conseguir nuevos objetos y ropas, no hay wookies ni están los protagonistas de las trilogías anteriores, pero el pack de contenido tiene momentos muy buenos y que nos hacen sentir parte de ese universo.
Hay misiones que tienen personalidad y gracia y que serían mucho mejores si hubiera habido una historia que diera coherencia al conjunto de trabajos que hay que hacer más allá de conseguir una reputación dentro de cada facción para llevarla a la victoria. Puede que no sea el pack que mejor responda a los deseos de la comunidad de jugadores pero sí es uno que tiene personalidad y permitirá dar variedad a los vecindarios.
Hemos jugando a la versión de PC con un código proporcionado por Electronic Arts.