El desmantelamiento de Ensemble Studios, los creadores originales de Age of Empires, puso en entredicho la continuidad de una de las primeras sagas de juegos de Microsoft, pero esta Gamescom nos ha sacado de dudas. Microsoft prepara una nueva entrega de Age of Empires, probablemente el cambio más radical en la saga desde su creación en los años 90. El juego de estrategia en tiempo real de la compañía da el salto a la red, y Age of Empires Online intentará captar nuevo público adoptando algunas mecánicas de los juegos de mundo persistente online, pero manteniendo su jugabilidad básica. También le han dado un par de vueltas al apartado visual.
Tras el preciosismo gráfico de Age of Empires III, los fans de la saga se preguntaban hacia dónde podría ir una nueva entrega, si adoptaría un look ultrarealista y oscuro a lo Gears of War o si mantendría el estilo de los primeros juegos pero beneficiándose de la mayor potencia gráfica de hoy en día. El resultado, a la vista de todos, no ha dejado indiferente a nadie. El juego tiene un aspecto colorido y ligeramente infantil, y ésa fue nuestra primera pregunta a los desarrolladores, el porqué de la decisión.
Los responsables de Robot Entertainment y Microsoft Game Studios nos explicaron que el objetivo del juego es atraer a más público, y que además sea más fácil aproximarse al juego. También nos comentaron que piensan que, más allá de modas de cada dos o tres años, el objetivo de Age of Empires Online es que dure unos cuantos más, y que este estilo gráfico nunca caduca.
La idea de Age of Empires Online es dotar a cada jugador de una ciudad, su capital, donde podrá construir edificios, desarrollar tecnologías y hasta añadir elementos de decoración. Cada jugador tiene su capital, que hace las veces de personaje. La ciudad sube de nivel, y la tecnología que desarrollemos substituye al árbol de habilidades de los juegos de rol masivos online. Cada edificio que construyamos puede ser configurado con ítems que le dotarán de una u otras habilidades extra, como más defensa o puntos de golpe, y del mismo modo las diferentes unidades que iremos descubriendo pueden recibir también configuraciones personales. Podremos elegir también a un consejero para cada una de las facetas del gobierno de la ciudad, que nos dotará de aptitudes como desarrollar tecnología más rápido, más daño de los arqueros y otras mejoras, cada una dependiente del consejero en cuestión, que podremos elegir según cuál nos convenga más.
Los jugadores pueden interactuar entre ellos de varias formas: haciéndose amigos, enviándose mensajes, y también visitando las ciudades para ver cómo han dispuesto los edificios, y para comprar en las tiendas de otros amigos. Cuando un jugador compre en las tiendas de nuestra ciudad, donde puede que haya productos a los que él no tiene acceso en la suya, recibiremos una comisión.
La capital es persistente, en el sentido de que, aunque no juguemos, sigue estando online, disponible para los otros jugadores, y funcionando; es decir, produciendo recursos o desarrollando tecnología, sin necesidad de estar nosotros jugando. En este sentido, Age of Empires funciona como todos esos juegos online que tanto han proliferado en los últimos años, pero sin la "trampa" de requerirnos esa atención constante que tantas relaciones personales ha estropeado a los jugadores de Ogame. La cudad no va a ser atacada por fuerzas enemigas ni destruida, como mucho la visitarán para comprar ítems raros, y además recibiremos una comisión.
Es decir, el componente online de Age of Empires Online no es tan fuerte como uno podría imaginarse en un primer momento, los jugadores no estarán compitiendo con otros imperios, a no ser que lo deseen mediante una escaramuza multijugador sin mayores consecuencias que un ganador y un perdedor, sin que nuestra civilización sea penalizada. Del mismo modo, podemos jugar misiones cooperativas.
Pero el núcleo de Age of Empires Online sigue siendo un modo campaña que funciona como el de World of Warcraft o similares. Iremos conquistando otras ciudades, abriendo más partes del mundo, y eso nos permitirá jugar más aventuras que nos irán haciendo ganar experiencia y subiendo de nivel, haciendo que nuestra civilización crezca y vaya convirtiéndose en un Imperio, pero sin competir con otros jugadores, sino contra el propio desarrollo predefinido del juego. Es una decisión cuestionable, pero sin duda muy amigable para aquellos jugadores que solo busquen disfrutar de un Age of Empires con una larguísima campaña.
Nuestra última pregunta fue acerca de las civilizaciones, concretamente si habrá alguna más que la griega, y la respuesta por supuesto fue que sí. Pero no anunciarán nada por el momento. Age of Empires puede decepcionar a algunos seguidores de la saga, tanto por la forma de jugar que plantea como por su apartado gráfico, pero al mismo tiempo tiene muy buenas ideas y puede gustar a muchos jugadores. Llegará en primavera de 2011.