Análisis de Uncharted: El Legado Perdido (PS4)
En los últimos años estamos viendo están recuperando algunas de las cosas buenas del pasado. Aunque obviamente nos siguen sacando dinero por otros lados, parece que las compañías han dejado atrás modelos cuestionables como los pases online para jugar a juegos de segunda mano o bloquear contenido en el disco, y están apostando por traer de vuelta cosas como las expansiones. Pero las expansiones de verdad, no un par de niveles hechos en dos tardes.
Tiene sentido, ya que les permite reutilizar la tecnología y los assets de sus juegos, pudiendo ofrecer un nuevo producto con un coste de desarrollo mucho menor a un juego nuevo. A veces, estas expansiones son tan grandes que se convierten en un contenido independiente, como es el caso de la que nos ocupa: Uncharted: El legado perdido.
¿Uncharted 5?
Uncharted: El legado perdido es una expansión de Uncharted 4: El desenlace del ladrón, y como tal es bastante continuista, por lo que no esperéis una secuela propiamente dicha.
Vuelve a ser un juego de exploración y acción, donde se alternan secuencias frenéticas con momentos pausados, saltos con puzles y tiroteos con diálogos, todo envuelto en unos espectaculares valores de producción.
En la nueva aventura no vemos ninguna mecánica nueva que cambie por completo el estilo de juego, aunque sí hay algunas novedades. La primera es que Chloe Frazer, la nueva protagonista (que recordaréis de la segunda y la tercera entrega de Uncharted, puede forzar cerraduras, algo que se convierte en una mecánica bastante recurrente durante el juego, ya que encontraremos unas cajas donde encontrar munición, tesoros o incluso armas necesarias para superar una batalla.
La otra novedad es una mayor apuesta por el sigilo –al menos jugando en difícil–, algo que se refleja en una mayor presencia de pistolas con silenciador, que no han sido demasiado populares en la saga hasta ahora. En cualquier caso, la mayoría de los combates se acaban solucionando con tiroteos a lo grande, como viene siendo habitual. Como curiosidad, Chloe también puede hacer fotos con su móvil de ciertos lugares durante su aventura, algo que se convierte en un nuevo coleccionable a sumar a los mencionados tesoros y a las conocidas conversaciones opcionales.
Lo demás resultará más que conocido a los que jugaron a Uncharted 4: El desenlace del ladrón, ya que las principales novedades de éste (la cuerda para balancearse, las zonas de exploración con el coche...) siguen aquí presentes. Esto, de hecho, nos lleva a una parte del juego que nos ha parecido bastante mejorable.
Una gran parte de Uncharted: El legado perdido es una zona abierta centrada prácticamente por completo en la exploración a bordo de nuestro 4x4. Es la zona más grande que se ha hecho para un Uncharted hasta la fecha, y en ella tenemos una tarea principal y una secundaria. Ambas consisten en llegar a diferentes puntos del mapa y resolver un puzle o acabar con los enemigos de la zona, pero nos parece que esta libertad es un arma de doble filo, ya que va en contra de uno de los pilares de la saga: el ritmo.
El ritmo es esencial en Uncharted, y en esta zona se puede ver muy mermado. Si nos centramos en hacer sólo la misión principal no le pasa mucha factura, pero si hacemos también la secundaria y nos ponemos a recoger los tesoros, es un tramo que se nos acaba haciendo demasiado largo. Podemos pasar un buen rato coche arriba, coche abajo; y aunque es entretenido, no es Uncharted.
Por suerte, el resto de la aventura es justo lo que cabría esperar, con momentos increíbles, secuencias trepidantes, esa sensación de descubrimiento cuando llegamos a una nueva zona, y paisajes para el recuerdo. Eso sí, no vamos a negar que echamos de menos los diálogos de Drake y Sully, y aunque Nadie y Chloe tienen una relación que va evolucionando bastante durante la aventura, nunca consiguen tener esa química que vemos entre los veteranos.
Chloe, Nadine, y la estela de Uncharted 4
Uncharted: El legado perdido nos cuenta la historia de Nadine (nuestra enemiga en Uncharted 4: El desenlace del ladrón) y Chloe Fraiser (veterana de la saga que apareció en el segundo y tercer episodio) tras los hechos de la cuarta entrega. Esta vez nos vamos a la India, en búsqueda del mítico colmillo dorado de Ganesh, en una nueva aventura repleta de artefactos, secretos, pistas a priori incomprensibles, y malos que nos necesitan para encontrar el tesoro.
A nivel argumental no esperéis muchas sorpresas –aunque sí hay una que hemos agradecido bastante–, aunque la historia sigue estando muy bien contada, alternando diálogos mientras jugamos y secuencias de vídeo para los momentos claves. Al menos, tenemos varias localizaciones completamente nuevas, que por desgracia nos han spoileado ya en los vídeos promocionales.
Hay que reconocer que, siendo una expansión y a pesar de que transcurre en un país diferente, hay muchos elementos claramente reciclados de Uncharted 4: El desenlace del ladrón, sobre todo en exteriores y zonas "salvajes". Obviamente, no es ningún problema, aunque a veces nos deje una sensación de déjà vu, pero no deja de ser una expansión. También guarda algunos escenarios increíbles y completamente nuevos, por supuesto.
Y es que a nivel visual, Uncharted: El legado perdido es uno de los títulos más punteros de PS4, e incluye HDR tanto en PS4 como en PS4 Pro para ofrecer un resultado todavía más espectacular. Horizon: Zero Dawn está por encima en lo técnico, pero la naturaleza más cerrada del juego de Naughty Dog nos deja un título mucho más rico en detalles, donde todo está cuidado al milímetro. No ha avanzado mucho con respecto a su predecesor, pero sí que nos deja escenarios más grandes, con unas distancias de dibujado abrumadoras.
Tenemos también un modo foto con muchas opciones, incluyendo expresiones para Chloe o poder cambiar la posición del sol. No sólo nos permite tomar instantáneas en cualquier momento, sino ver el detalle con el que todo está hecho, o alejar la cámara para obtener una panorámica de algún escenario.
En lo sonoro, Naughty Dog vuelve a realizar un trabajo excepcional, con mención especial para el tratamiento de las voces y los efectos de sonido, y cómo se modifican –generando distorsión o eco, por ejemplo– en función del escenario. Como es habitual, nos llega doblado al castellano (y con opción para jugar con subtítulos en un idioma y voces en otra), y aunque el trabajo es muy profesional, hay algún que otro patinazo en la traducción o el tono de voz de los personajes.
Comentar también que tras completar el juego encontraremos todos los extras habituales, como una galería para ver los modelos de los personajes y objetos del juego en detalle, bocetos y arte conceptual, trajes adicionales para los protagonistas, nuevos modelos de renderizado y trucos, que siempre se agradecen. Además, también tenemos acceso completo al modo multijugador de Uncharted 4, incluyendo el modo competitivo, el modo cooperativo de supervivencia, y la nueva Arena de supervivencia, un nuevo modo cooperativo diferente del que ya conocemos, y que no hemos podido probar, ya que se habilitará cuando el juego se lance.
Por último, mencionar uno de los aspectos que más ha dado que hablar: la duración. Jugándolo en difícil, haciendo la misión secundaria de la zona abierta, explorando y consiguiendo 49 de 68 tesoros, nos ha durado 7 horas y 12 minutos. Teniendo en cuenta que incluye el modo historia y el multijugador por unos 40 euros nos parece una duración correcta, aunque ya os podéis imaginar que si vais a terminarlo sin entreteneros mucho se puede completar mucho más rápido.
El legado de Uncharted
Uncharted: El legado perdido, como expansión independiente, cumple con creces. Nos ofrece una nueva aventura con grandes momentos, de esos que son señas de identidad de la saga, aunque también tiene un tramo un tanto cuestionable y una sensación de déjà vu comprensible en otros. Audiovisualmente es una delicia, y su gameplay sigue funcionando genial, con pequeños cambios que se agradecen.
Obviamente, no es el mejor de los Uncharted, pero su objetivo no deja de ser el de "expandir" lo que jugamos en Uncharted 4: El desenlace del ladrón. Quizás el dúo protagonista no es el más carismático, ni la historia la más original, pero por menos de 40 euros tenemos un título completo, que ofrece modo historia y modo multijugador, y que consigue volver a dejarnos boquiabiertos con sus paisajes, sus secuencias de acción y su puesta en escena.
Hemos realizado este análisis con un código de descarga proporcionado por Sony.