Análisis Rally Arcade Classics, una mirada nostálgica a los recreativos de conducción (PC)
El 30º aniversario de Sega Rally, cumplido recientemente, nos ha recordado esa época en la que grandes editoras apostaban por los arcades de velocidad, innovadores y espectaculares. No es que el género haya desaparecido totalmente, ahí tenemos las sagas Forza Horizon, The Crew o títulos de karts –Mario, Crash…- pero la versión más simple y clásica está cubierta casi exclusivamente por los títulos indie.
Rally Arcade Classics es un juego de conducción ya disponible en Steam que ha sido desarrollado por el estudio barcelonés Netk2 Games, con sólo tres creadores que se han inspirado en el gameplay de los primeros juegos 3D donde lo importante era mejorar tiempos, pasar checkpoints y, dependiendo del modo, superar a nuestros rivales en carrera.
Nada de ajustes mecánicos ni simulación perfectamente realista, sólo la preocupación de tomar curvas con largos derrapes y evitar, en la medida de lo posible, levantar el pie del acelerador.
"Easy left, medium right…"
Lo primero es lo primero, y antes de pisar a fondo tendremos que obtener licencias, que viene a ser un pequeño entrenamiento para tomar contacto con las físicas del juego y comprobar la importancia de tomar las curvas sin apenas bajar la velocidad. Hay más de 40 vehículos inspirados en clásicos de este deporte del motor –el Startros R es primo del Lancia Stratos… - y casi 50 circuitos inspirados en diversas localizaciones, que aseguran que te llevará un tiempo hasta ver todo lo que ofrece. Pero por supuesto, no se trata sólo de ganar, sino también de batir récords y marcas personales.
El modo principal es Tour, que incluye circuitos y desafíos -contrarreloj, vs, carreras...- para ganar créditos y estrellas según el rendimiento: cuanto mejor lo hagas, más fácil te será avanzar. Es posible que el sistema de progreso pueda ralentizar un poco el desbloqueo de contenido o compra de vehículos, pero es difícil equilibrar esto en su justa medida. Quizás la mecánica de carnés, que nos puede recordar a Gran Turismo –o la saga también española Super Woden GP, que próximamente se reinventará con Super Woden: Rally Edge- no termine de gustar a los más impacientes, pero a medio y largo plazo es un buen incentivo para aquellos que no se piquen lo suficiente con los tablones online.
Tenemos varios modos con los retos más típicos del género, como arcade, que nos pone en la cola de la competición y debemos superar a 14 rivales; también contribuye con créditos e incluso algunos coches exclusivos. Chrono nos permite practicar en un circuito, con su hora y clima para recortar segundos al reloj y superar al resto de jugadores. Rally es el clásico de estos juegos –avanzar por la competición en uno de los cuatro países, en condiciones aleatorias-, y los eventos semanales o mensuales te pondrán a punto contra el resto de la comunidad con el mismo circuito y coche. Dada la limitación del proyecto y sus recursos, no encontramos un multijugador online ni local, aunque la desarrolladora no lo descarta para un futuro.
Ya sea en los desafíos de derrape, los enfrentamientos contra otro piloto o simplemente las contrarrelojes, los vehículos de Rally Arcade Classics se controlan estupendamente. Hemos encontrado algunas pegas en ciertos circuitos con un ancho algo estrecho o poco margen para los adelantamientos porque eso exige un poco de precisión y, para nuestro gusto, lo aleja del espíritu arcade más desenfadado, pero encontrarás pocas sensaciones más reconfortantes que superar una chicane sin bajar la velocidad. Igualmente el manejo no es puro arcade noventero de Sega o Namco, sino un punto intermedio entre arcade y simcade.
Rally Arcade Classics viene acompañado de música pegadiza y buen sonido de motor dentro de sus posibilidades, sin licencias oficiales. Visualmente es un poco menos llamativo que el indie Rush Rally 3 y le falta el carisma de, por ejemplo, Old School Rally, que al imitar la estética de 32 bits no se acerca al realismo de Rally Arcade Classics pero en cierta manera apela más a la nostalgia de esa generación. Que no se entienda como una crítica dura porque el trabajo de Netk2 es fenomenal y por encima de la media, los coches están bastante detallados y su inspiración no está tanto en el colorido de Sega Rally o el aspecto retro de los primeros Colin McRae Rally o V-Rally, sino más bien en RalliSport Challenge (2002) y los títulos de mediados de los 2000, por lo que hablamos de algunos efectos llamativos y una iluminación en carreas nocturna impensable en la década de los 90. Hay varias cámaras a elegir, desde el capó y el parachoques a otras un poco más alejadas o aéreas, no así una desde el interior del vehículo.
Conclusiones
Sin duda, Rally Arcade Classics merece mucha más atención de la que está recibiendo en sus primeras semanas y esperamos que esto no sea un indicativo del desinterés del mercado actual por los arcades de velocidad. No pretende reinventar la fórmula arcade sino homenajearla, ni llenará totalmente ese hueco que dejó la desaparición de las recreativas, pero es un proyecto hecho con pasión que no tiene mucho que envidiar a la competencia actual en el espacio indie salvo que consideres completamente esencial la existencia de un modo multijugador.
Dispone de una demo en Steam con un vistazo a cuatro modos de juego en tramos cortos de Finlandia, Cataluña, Grecia y Montecarlo, y su precio de lanzamiento es de 19,50 euros, razonable para las horas de juego que nos puede proporcionar.
Hemos realizado este análisis adquiriendo el juego en PC.