Anunciada hace ya varios años con gran ambición, la serie animada de Magic: The Gathering para Netflix ha permanecido envuelta en un prolongado silencio, lo que llevó a muchos a preguntarse si seguía en pie. Ahora, Terry Matalas —guionista y productor ejecutivo de la adaptación— rompe esa calma con una actualización que confirma que la hoja de ruta de desarrollo sigue su curso aunque a fuego lento y con algún que otro cambio de rumbo.
La serie de 'Magic: The Gathering' resurge en Netflix con una esperanzadora novedad: no está cancelada
Durante su intervención en The Sackhoff Show, el podcast conducido por la actriz Katee Sackhoff, Matalas confirmó que los guiones de la primera temporada ya están completamente terminados. La producción ha entrado en una fase clave: la selección de voces para el reparto y el desarrollo de las primeras secuencias.
Lejos de tratarse de un simple anime, Matalas describe la serie como una ambiciosa epopeya animada generada por ordenador, diseñada para capturar la esencia del vasto multiverso que caracteriza a Magic. “No es un anime. Es una maravilla colosal realizada en CGI”, explica el creativo, subrayando que solo con animación es posible reflejar fielmente los incontables planos y mundos del juego sin disparar el presupuesto hasta cifras imposibles para una producción televisiva.
La decisión de optar por CGI no es solo estética, sino también estructural. La animación permite iterar, reescribir y ajustar escenas incluso después de haber grabado las voces, algo impensable en acción real salvo con presupuestos de superproducción cinematográfica. “Puedes ver una animación, darte cuenta de que algo no funciona, reescribirlo y volver a grabar. Esa flexibilidad es oro”, señala Matalas.
Aunque la serie está siendo producida bajo el paraguas de Netflix, el guionista subraya que no se trata de una iniciativa unilateral. En el desarrollo están involucrados Hasbro —actual propietaria de la licencia— y Wizards of the Coast, custodios tanto de Magic como de Dungeons & Dragons, y que pronto sacarán una película por su parte. El objetivo, según Matalas, ha sido siempre preservar la integridad de licencia.
“Ha sido una experiencia increíble. Todos hemos estado en sintonía. Eso no es lo habitual en estos proyectos”, añade, en una reflexión que parece aludir a otros intentos fallidos de adaptar grandes sagas con múltiples manos creativas en disputa. Ahora bien, quienes esperen ver pronto esta serie en sus pantallas tendrán que armarse de paciencia.
Aunque el desarrollo avanza, aún queda camino por recorrer antes del estreno. “Estamos apenas en el casting y las secuencias de animación. Lleva tiempo. Pero va a merecer la pena”, asegura Matalas. Por el momento, no hay una fecha de lanzamiento concreta, pero todo apunta a que Netflix guarda esta adaptación como una de sus futuras apuestas de animación para los próximos años.
