Cada vez son más los indicios que parecen indicar que el mundo se avecina a una tercera Guerra Mundial. Con el conflicto entre Rusia y Ucrania aun en auge y Oriente Próximo en constantes bombardeos ocupando titulares y noticieros de todo el mundo, los países de Europa se preparan para el peor escenario y parece que desde Francia quieren apostar por una armada cargada de robots para operaciones especiales.
Francia revoluciona el sector militar y quiere el ejército más moderno y amenazante de Europa con el programa 'DROIDE'
Según informan desde AS, la Dirección General de Armamento (DGA) francesa ha realizado un acuerdo con KNDS France y Safran Electronics & Defense, empresas muy relevantes en el ámbito militar, para desarrollar el programa DROIDE durante los próximos siete años, enfocado a la creación y ampliación de sistemas autónomos para reforzar las fuerzas terrestres hasta, aproximadamente y de momento, 2035.
De momento, sabemos que se están fabricando y desarrollando robots de reconocimiento, de combate y logísticos, todos destinados a potenciar el ámbito militar francés para impulsar las fuerzas terrestres a un nivel superior de potencia con respecto a otros países. Alemania también se está armando en estos momentos, y Francia quiere llevar su ejército a un plano completamente diferente, más enfocado a lo tecnológico y lo que aun consideramos futurista.
El programa DROIDE va a perfeccionar a sus robots con pruebas de campo y entrenamientos con soldados, para que los sistemas de estos complementos automatizados sea lo mejor posible y no entorpezca en ningún caso al ejército humano, sin poner tampoco vidas de los soldados en peligro debido a errores. Para garantizar esto último, van a realizarse simulaciones y pruebas en laboratorio antes de probar a los nuevos robots en el campo de batalla.
Cada tipo de robot va a tener unas especificaciones concretas y responderá a una serie de órdenes y objetivos delimitados por los comandantes, dependiendo de las tareas que se requieran en cada momento específico del conflicto. Se trata de un apoyo muy importante, puesto que los robots no se cansan, no sufren dolor y se pueden reparar o sustituir muy fácilmente por nuevas unidades, de modo que Francia apunta a ser la mayor amenaza de Europa si es que su plan DROIDE llega a desenvolverse con éxito durante los próximos años.
