Aunque Kevin Spacey sostiene sobre sus hombros todavía una treintena de acusaciones, se han desestimados los cargos por agresión sexual del único caso por el que ha ido a juicio: el del joven en Nantucket (Massachusetts).
El joven denunciante, que contaba 18 años por aquel entonces, argumentó que el dos veces ganador de un Oscar le había "toqueteado" en el bar Club Car de Nantucket, y supuestamente lo había grabado todo y había enviado ciertos mensajes sobre el hecho. Una vez que Spacey se declaró inocente y la defensa sostuvo que aquel encuentro había sido consentido, pidieron que se mostrara el teléfono como prueba.
Sin embargo, dicho teléfono - que debía entregarse de forma "completa e inalterada" - nunca apareció en juicio. A principios de julio, el denunciante señaló que el móvil "se había perdido", mientras que la defensa insistía en que se habían borrado las imágenes y los mensajes de texto.
De esta forma, la presunta víctima hizo uso de la Quinta Enmienda, que le ofrece la posibilidad de no hacer más declaraciones si cree que su testimonio puede incriminarle.
La Fiscalía de Nantucket, finalmente, ha desestimado los cargos del actor por este caso de supuesta agresión sexual. Eso sí, el protagonista de American Beauty todavía tiene que enfrentarse a otras tantas investigaciones y a más de 30 denuncias por supuesta agresión sexual, procedentes tanto de Los Ángeles como de Inglaterra.
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