Mike Tyson se arruinó por completo y pasó de ser una personalidad rodeada de millones y excesos a estar sin apenas un duro. Vendió propiedades, cambió su forma de vivir y a sus 54 años, se rehizo y volvió al ring. Acompañado de un buen asesor, decidió fundar su propia empresa de plantación de cannabis, Tyson Ranch, ubicada en el estado de California, donde el consumo de marihuana es legal. Con esfuerzo e inteligencia, Tyson se encontró en el momento oportuno: ahora es una de las compañías que más facturan en este incipiente sector (vía InfoBae).
Tyson Ranch estaría facturando medio millón de dólares al mes
Según ha podido conocer el medio Cheat Sheet, Tyson Ranch estaría facturando cantidades cercanas o superiores a los 500.000 dólares por mes en la venta de marihuana, una cifra gigante a la que habría que sumarle las ganancias derivadas de la constante invitación de famosos a su rancho e instalaciones, unas citas que retransmite en directo y que aprovecha para hacer publicidad, ofreciéndoles sus mejores variedades. Cada una de estas, estaría otorgándole números mensuales que van entre 30.000 y 40.000 dólares extra por velada. El mítico boxeador se metió en este negocio a finales de 2018, justo cuando comenzó a ver un cambio de tendencia en el mercado en Estados Unidos, que se está abriendo a la legalización generalizada de la marihuana y productos derivados del cannabis. Él mismo es un fumador y consumidor declarado, y ha llegado a admitir que, durante su regreso a las peleas en los cuadriláteros fumó marihuana antes del combate-exhibición contra Roy Jones Jr.
Tyson llegó a ganar 584 millones de dólares en su carrera, una suma que obtuvo tras combatir en 56 encuentros oficiales. Pero como suele pasar en el deporte de élite si no se está bien rodeado o asesorado, Tyson gastó su dinero muy rápido, invirtiendo mal, comprando casas grandes y caras, coches llamativos de último modelo e incluso adquiriendo tigres domésticos. Tras una serie de malas inversiones y adicciones, en 2003, Mike Tyson se vio obligado a declararse en quiebra, confirmando que tenía una deuda de 28 millones de dólares con diferentes acreedores. La historia de Mike Tyson está llena de giros locos y comportamientos excéntricos, como él mismo ha confirmado. Luchó contra su adicción a la cocaína y decidió controlar su ira de diferentes maneras, participando incluso en proyectos de Hollywood, como Resacón en las Vegas. Las cosas le fueron poco a poco algo mejor, y contó con un serie de televisión animada llamado Mike Tyson Mysteries que lo ayudó a convertirse de nuevo en un símbolo pop querido y admirado.
Con un podcast llamado Hotboxin With Mike Tyson, uno de los más populares del momento en el ámbito deportivo, Tyson ha sabido competir contra él mismo a lo largo de la vida. Y es ahí dónde entra Tyson Ranch, su rancho de maría y apuesta personal. Tyson dirige y administra su propia finca, donde cultiva y vende su propia marca de cannabis, así como productos de bienestar y cuidados a base de hierba. Entre el negocio de marihuana y el combate del pasado diciembre, por el que ganó 10,5 millones de dólares, parece que el boxeador ha vuelto con fuerza.
