El coronavirus, la pandemia que está dejando paralizada a Hollywood y a la industria del entretenimiento, sigue retrasando películas, series y otras producciones. Hasta la fecha, las principales editoriales de cómics como Marvel y DC parecían ajenas o intocables, pero con el cierre de las grandes superficies y las tiendas especializadas, ambos sellos están siendo bastante dañados a nivel económicos. Diamond Distributors, el principal distribuidor de cómics y tebeos en Estados Unidos, ha confirmado que no habrá copias físicas hasta nuevo aviso.
Marvel y DC podrían aprovechar para aprovechar el formato digital
La crisis ha comenzado a hacer mella en otras variantes del entretenimiento y la cultura popular. Diamond Comics Distributors, el principal distribuidor de cómics de Estados Unidos, ha dicho a los editores que ya no aceptará nuevos productos en sus almacenes, según ha confirmado The Hollywood Reporter. "La medida esencialmente paraliza una parte importante de la industria del cómic en el futuro previsible", explican fuentes norteamericanas. En este caso, os recordamos que este ente tiene en su poder los derechos comerciales de Marvel Entertainment, DC, Dark Horse Comics, Image Comics, Boom! Estudios y Dynamite Publishing. Casi nada.
Además también tiene en su poder los derechos de publicación y distribución de cómics, novelas gráficas y otros productos británicos. La decisión de la compañía de rechazar la entrega de nuevos productos a sus almacenes pone a la industria de los cómics impresos de Occidente en pausa por un tiempo indeterminado, retrasando también el calendario en otros países europeos, que os recordamos, están en su mayoría en cuarentena o confinamiento por culpa de la pandemia del coronavirus. La medida será efectiva hasta el próximo abril. ¿Cómo puede afectar esto a Marvel y DC y otras editoriales? Si bien la compra de cómics en grapa está muy mermada con respecto a hace unos años, sigue siendo una parte importante del circuito comercial.
En estos momentos, y al igual que en la industria del cine, se podría optar por un acortamiento de las ventanas de distribución y los lanzamientos digitales, en los que ambas editoriales han ido ganando peso poco a poco.
