Christopher Nolan, considerado uno de los directores más influyentes de su generación, sigue sorprendiendo con sus métodos poco convencionales de trabajo en un mundo cada vez más dominado por la tecnología más avanzada. Aunque es conocido por su destreza técnica, Nolan mantiene una peculiar tradición en sus rodajes: utiliza una televisión portátil Casio EV-4500, un dispositivo obsoleto de los años 90, para supervisar las escenas que filma con carísimas cámaras IMAX. Esta elección contrasta fuertemente con la magnitud de sus producciones, pero refleja su enfoque minimalista y su creencia en la autenticidad.
La paradoja del cineasta de IMAX que mira en 4 pulgadas
A pesar de ser un pionero en el uso de tecnologías avanzadas en el cine, Nolan prefiere una pantalla de apenas 4 pulgadas y con una resolución de 405x305 para revisar sus planos. En un set típico, los directores suelen recurrir a monitores de alta definición en el “video village”, pero este cineasta ha optado por una Casio que ni siquiera se fabrica en la actualidad.
Este aparato, diseñado para emitir televisión en tiempo real, ha sido adaptado para recibir las señales de las cámaras IMAX mediante un sistema rudimentario. Para él, la calidad de la imagen no es lo primordial, sino la composición del plano.
Una visión arraigada en lo analógico
El uso de una TV portátil en producciones multimillonarias puede parecer ilógico, pero para el director es coherente con su filosofía. Él ha demostrado en múltiples ocasiones su preferencia por lo analógico, una postura que va más allá de sus rodajes. Nolan no utiliza smartphone ni correo electrónico, lo que concuerda con un estilo de vida que rehúye de la constante hiperconectividad moderna.
Un aparato que le ha acompañado hasta en 'Oppenheimer' e 'Interstellar'
A lo largo de su carrera, Nolan ha dirigido una amplia variedad de géneros, desde la ciencia ficción con Interstellar y Tenet, hasta dramas históricos como Oppenheimer. Sin embargo, en cada uno de estos proyectos, su Casio EV-4500 ha sido una constante. Es irónico que, en un mundo donde Nolan ha llevado las imágenes en IMAX a su máximo esplendor, su herramienta favorita para visualizar los planos sea una pantalla de baja resolución. Para él, esta combinación de alta y baja tecnología no es una contradicción, sino una manera de concentrarse en lo esencial: el arte de contar historias. De hecho, es una visión que actores acostumbrado a trabajar con él como Cillian Murphy, han asegurado que mientras otros directores llenan el set de pantallas para que todo el equipo vea lo rodado, Nolan opta por mantener el set libre de estas 'revisiones', para dejar hueco a la creatividad y la improvisación.