Dragon Ball Super sigue desarrollando el épico arco argumental de Granola y su lucha contra los Saiyans. Tras sorprendernos en tomos anteriores, parece que Akira Toriyama y Toyotaro aún se guardan cartas en la manga, y a tenor de lo que podemos leer en sus últimas páginas, se avecinan giros argumentales inesperados. Si queréis podéis descubrirlo de forma gratuita, porque a partir de hoy ya podemos leer de forma completamente gratuita y en español el Capítulo 76 en Mangaplus, la web oficial de Shueshia. A continuación procedemos a hacer un resumen de lo que incluye, ¡cuidado con los spoilers!
¿El combate contra Granola alcanza su épico desenlace?
¡Spoilers!
El capítulo arranca con fuerza. Granola, que sigue pletórico tras imponerse a Vegeta, ataca constantemente al guerrero hasta que pierde su forma de Megainstinto. Sin embargo, tras proclamar a los cuatro vientos que está a punto de acabar con Vegeta y con los Saiyans, Goku interviene con un golpe sorpresivo asestado bajo la forma SSB. Pero cuando parece que estos dos héroes van a coordinarse y unir sus fuerzas para derrotar a su poderoso rival, Vegeta rechaza la ayuda de Goku y se propone luchar contra él para dejar las cosas claras de una vez por todas.
Dragon Ball Super acostumbra a las sorpresas y los cambios o giros, y parece que mientras Vegeta y Granola retoman su lucha, dejando a Goku fuera de escena. Intentando restaurar su honor, Vegeta vuelva a transformarse bajo el Megainstinto, acumulando mucha energía y sorprendiendo a su rival, que se siente halagado por encontrar un oponente tan obstinado y capaz. La batalla va subiendo de intensidad, trasladándose a la ciudad de los sugaínos, la urbe protegida que se encuentra en las inmediaciones. Asustado por el caos que se puede desatar, Granola le suplica a Vegeta que vayan a otro lado para evitar la destrucción que pueden desatar, pero el Saiyan le ignora por completo.
Dura y sucia, la batalla entre ambos guerreros aumenta en destrucción y escala, hasta que Granola decide descansar. Entre los restos y las ruinas de la contienda, se desprende una de las paredes de los edificios de la ciudad y Granola observa a una temerosa madre sugaína con su hijo, quien le mira completamente aterrorizado y asustado. Y agarraos bien, que vienen curvas. El episodio, para bajar el alto nivel de sus páginas, propone un momento de tranquilidad con mucha chicha.
Empieza así un pequeño y emotivo flashback de Granola, en el que se le ve de pequeño huyendo entre las ruinas de la ciudad que los Saiyans habían atacado en el pasado. Asustado, se refugia en una iglesia, en la que se encuentra con su madre. Su odio a estos guerreros es real. Acumulando fuerza para matar a Vegeta, concentrando todo su ki en una bomba de energía, Granola está cerca de asestar el golpe final. El Príncipe Guerrero parece destinado a morir, quiere finalizarlo todo, pero una nave surca los cielos. Goku, sorprendido, descubre que está pilotada por Monaito y Oatmeel, que interrumpen el combate explicando la gran revelación que parará la contienda: "Hace 40 años, fue un Saiyan de nombre Bardock el que nos salvó".
En otras palabras, lo mejor está por llegar en este arco.
