Durante la crisis provocada por el coronavirus, los seres humanos hemos intentando sobrevivir refugiándonos en nuestras casas, vacunándonos o buscando destinos alejados de las grandes aglomeraciones. A raíz de la pandemia, muchos han cargado contra el estilo de vida occidental, el capitalismo o la manera en la que explotamos los recursos naturales, replanteándose sus creencias y modos de vida.
Como explican en La Vanguardia no son pocos los que han resucitado las clásicas teorías del colapso mundial, apelando al cambio climático, la inestabilidad política y la amenaza de nuevas pandemias. Pero, ¿dónde podríamos sobrevivir o refugiarnos ante un supuesto Apocalipsis? Pues según un estudio realizado por la revista científica Sustainability, la respuesta es clara: en Nueva Zelanda.
Pasando el día en La Comarca mientras el mundo se convierte en Mordor
"La civilización ha experimentado una trayectoria continua de creciente complejidad sociopolítica", comienzan en el estudio realizado por la revista científica Sustainability, del que se han hecho eco diversos medios. Según ellos, tras más de setenta años de progreso industrial que han acelerado la transformación del planeta por completo, es bastante probable que más tarde o más temprano se produzca el caos.
Sí, literalmente. "Hablamos del colapso de las sociedades organizadas", explican. En el informe, enfatizan que el cambio climático hará imposible la vida en regiones tropicales y causará grandes movimientos de población, aumentando la cantidad de refugiados climáticos, que buscarán los mejores lugares para sobrevivir bajo una nueva forma de vida, más tradicional y clásica.
Sustainability explica que el gran Apocalipsis podría sobrellevarse en un buen lugar, con un clima templado y una tierra fértil que proporcione alimentación y refugio a la población. A eso hay que sumarle ciertas barreras naturales que impidan una llegada masiva de personas, por lo que la lista se reduce. En el informe destaca que lugares como Tasmania, Islandia o Reino Unido sería ideales para sobrevivir, pero es Nueva Zelanda, el territorio en el que se rodó El Señor de los Anillos el país que reúne todas las condiciones favorables para convertirse en "el bote salvavidas del colapso". Los expertos consultados por Sustainability destacan que, al tener un 43% de su territorio destinado al cultivo y buenas infraestructuras que han sabido adecuarse a los parajes naturales de manera sostenible, Nueva Zelanda, con apenas cinco millones de habitantes, es el mejor lugar para mantenerse aislado y abastecido en una situación tan aterradora como la que describen.
Sin embargo, hay algunos inconvenientes. "La isla de Kiribati, situada en el Pacífico Sur, se halla en riesgo extremo de hundimiento por la subida del nivel del mar. El isleño Ioane Taitiota se convirtió, en el 2020, en el primer refugiado climático reconocido por Nueva Zelanda", comentan desde La Vanguardia. Además, en este paraíso similar a la Tierra Media habría que vivir, casi literalmente, como hobbits. No habría comodidades como las que estamos acostumbrados, pues el colapso traería una ruptura en la cadena de suministros globales o productos elaborados, y el funcionamiento de internet se vería muy afectado. Es decir, seríamos como medianos en La Comarca. La economía se basaría en la agricultura y el intercambio de vienes y servicios, haciéndose énfasis en los oficios artesanales de antes de la revolución industrial.
Nueva Zelanda lleva varios años atrayendo a los survivalistas o preparacionistas, aquellos que creen que la civilización colapsará más pronto que tarde. De hecho, la antigua colonia británica ha recibido a varios gurús tecnológicos de Silicon Valley, entre ellos Peter Thiel, cofundador de PayPal, que ha decidido comprar búnkers de alta tecnología completamente aislados en las montañas neozelandesas. Thiel cree que el final estará cerca, y que en algún momento, alguna catástrofe como un terremoto en la costa californiana o una crisis económica sin solución acabarán con gran parte de la humanidad. Según la ONU, en su último informe sobre cambio climático, todos los continentes se verán afectados de una u otra manera por las inclemencias de este proceso.
