HBO ha estrenado el primer tráiler y cartel de The Franchise (La Franquicia), una ambiciosa comedia que debutará el próximo 6 de octubre en la plataforma Max. Desarrollada por un equipo creativo de renombre encabezado por Sam Mendes, Armando Iannucci y Jon Brown, la serie se adentra en las entrañas del caótico proceso de creación de una película de superhéroes. A través de una combinación de humor satírico y una aguda crítica, promete desmantelar los secretos y absurdos detrás de las lucrativas, pero a menudo polémicas, franquicias cinematográficas que han dominado el panorama de Hollywood en los últimos quince años. Mendes, conocido por su trabajo en películas aclamadas como American Beauty y 1917, ha dirigido al menos el primer episodio de la serie, que surge de una idea original suya moldeada junto a Iannucci, célebre por su sátira política en Veep.
El reparto de la serie está encabezado por actores como Himesh Patel, Aya Cash, Jessica Hynes, y Billy Magnussen, con las destacadas participaciones especiales de Richard E. Grant y Daniel Brühl. The Franchise sigue la historia del equipo de producción de una película de superhéroes, parte de una franquicia poco querida, que lucha por sobrevivir en un entorno donde reina el caos. La premisa de la serie aborda el desorden generalizado y los desafíos que enfrenta el equipo de una película que parece condenada al fracaso desde el principio.
En este sentido, esta ficción se presenta como una sátira mordaz sobre la fabricación de lo que Mendes describe irónicamente como "la salchicha cinematográfica", donde cada error esconde una historia de origen. La trama se teje en torno a las tensiones que surgen entre actores temperamentales, directores con visiones artísticas y ejecutivos de estudio que buscan maximizar las ganancias.
Películas hechas con plantilla
Uno de los puntos más llamativos es su sátira sobre el género de las películas de superhéroes, un sector que ha sido tanto celebrado como criticado en los últimos años.
A través de un tono irónico y autorreferencial, la serie se burla de los trajes de captura de movimiento, las pantallas verdes y la falta de escenarios reales que definen las producciones modernas.
El caos y la disfunción que suelen quedar ocultos detrás de los efectos visuales serán aquí el centro de la narrativa. En este sentido, la serie recuerda al humor presente en The Bubble, una película reciente que también exploraba los problemas internos de una gran producción, aunque el estilo de esta ficción parece más cercano al de Mythic Quest, una serie que satiriza el desarrollo de videojuegos.