La incorporación de nuevos elementos en adaptaciones televisivas siempre ha sido un tema controvertido, especialmente cuando se trata de obras tan icónicas como las de George R.R. Martin. La serie La casa del dragón, basada en Canción de hielo y fuego, ha tomado algunas libertades creativas para expandir el universo de Poniente. Una de las adiciones más notables y comentadas ha sido la inclusión de un perro perteneciente al personaje Queso, una figura central en el arco de la Danza de los Dragones. Aunque Martin es conocido por su reticencia a aceptar cambios en sus obras, ha expresado admiración por esta particular incorporación.
Este ha manifestado en su blog personal su sorpresa y admiración por la inclusión del perro en la serie. Martin generalmente no es partidario de que los guionistas agreguen personajes que no están en el material original, especialmente cuando este material es suyo. Sin embargo, ha reconocido que el perro fue una adición brillante, capaz de enriquecer al personaje de Queso y proporcionar una nueva dimensión emocional a la narrativa. Esta admisión demuestra una rara flexibilidad por parte del autor, quien suele ser un defensor acérrimo de la fidelidad al texto original.
Sangre y queso
Atención, spoilers de la segunda temporada de La casa del dragón. En la serie, Queso es uno de los asesinos contratados por Daemon Targaryen para vengar la muerte del príncipe Lucerys Velaryon. La brutalidad de este se refleja no solo en sus actos de asesinato, sino también en la crueldad que muestra hacia su propio perro. La presencia del perro, aunque breve, logró impactar profundamente tanto a los personajes dentro de la serie como a la audiencia, y a Martin mismo, quien confesó que la escena en la que el perro mira a Queso después de ser pateado casi le rompió el corazón.
"Ese perro era brillante. Estaba preparado para odiar a Queso, pero lo odié aún más cuando pateó a ese perro. Y más tarde, cuando el perro se sentó a sus pies, mirando hacia arriba… eso casi me rompió el corazón . Una cosa tan pequeña… un perro tan pequeño… pero su presencia, los pocos momentos breves que estuvo en pantalla, le dieron al cazador de ratas tanta humanidad. Los seres humanos somos criaturas tan complejas. La presencia silenciosa de ese perro nos recordó que incluso los peores hombres, los viles y los venales, pueden amar y ser amados", escribió Martin en su blog. El perro, cuyo nombre es Bobby y fue encontrado en la isla de Chipre por los creadores del programa, ha sido defendido vehementemente por los fans desde su aparición en la segunda temporada de La casa del dragón.