Si no aguantas la espera por Grand Theft Auto 6, este GTA ambientado en Brasil te puede ayudar a matar el gusanillo
La espera por Grand Theft Auto VI se está haciendo larga. Si bien Grand Theft Auto Online se ha convertido en el divertimento de muchos durante los últimos años, quienes prefieren experiencias para un jugador similares a Grand Theft Auto no han tenido mucho donde rascar en los últimos años. El último Saints Row no colmó las expectativas de los aficionados, y pocos otros se han animado a hacer un sandbox tipo GTA. Pero desde 2022 hay un título indie con esas ambiciones que lleva más de dos años ampliándose y mejorando: se llama 171 y está disponible en PC a través de Steam.
La premisa del videojuego de Betagames Group no resultará extraña a nadie que haya jugado a GTA, True Crime y otros títulos del género. En una ciudad que en este caso recoge su ambientación de diferentes urbes brasileñas (el país donde está afincado el estudio), los jugadores tienen libertad para explorar a pie o en vehículos, y realizar diferentes tipos de actividades criminales con las que obtener dinero para ampliar su arsenal y su garaje, todo ello en un mundo que responde a las acciones del usuario.
No todo son crímenes. La cartera se puede llenar realizando tareas de transportista, de repartidor de pizza o de taxista, entre otras, pero es más fácil hacerse rico con las tareas menos honestas: mercadear con droga, hacer de sicario o recolectar deudas empleando métodos agresivos son algunas de ellas. Otra manera es conquistar las zonas controladas por alguna de las facciones de la ciudad, ganando así el control de sus operaciones criminales para llevarnos un porcentaje de sus ganancias; incluso se pueden contratar PNJ (personajes no jugadores) para que ayuden en esas tareas.
Aunque, como es habitual en este tipo de videojuegos, habrá que gastar cuidado con las fuerzas de la ley. La policía funciona con un sistema de niveles de alerta: cuanto más reprobable sea el delito cometido, más ahínco pondrán en nuestra caza. Además hay eventos aleatorios que pueden complicar las cosas mientras se viaja por el mundo abierto, un escenario que no es simple decorado: el avatar puede escalar por la mayoría de los muros y edificios, y aproximadamente el 20 % de las casas tienen interiores interactivos.
El dinero recaudado con las actividades, criminales o no, se utiliza principalmente para mejorar las armas de manera que nos faciliten los siguientes atentados: se pueden ampliar los cargadores, incorporar láseres, colocar silenciadores, y por supuesto, personalizarlas estéticamente. Esto último también se aplica a los vehículos, que se pueden tunear con ruedas, espejos, colores, ampliaciones del maletero e incluso sistemas de sonido; y al propio avatar, cuya vestimenta y accesorios se pueden modificar.
La historia y otras funciones llegarán en 2025
Eso sí, antes de lanzaros a su compra (cuesta 18 € en Steam), hay que tener claro de que lo que incluye el juego en estos momentos es lo descrito: un sandbox, un mundo abierto donde realizar actividades criminales. El acceso anticipado es una versión alfa que se ha ido ampliando desde su lanzamiento en 2022. Las mecánicas principales están implementadas, pero no todo está pulido y le falta contenido.
La versión final se lanzará en algún momento de 2025 (presumiblemente cuando saldrá también GTA 6 en PS5 y Xbox Series, no en PC). No habrá una beta, sino directamente una versión 1.0 que tendrá un modo campaña con su historia, una ampliación del mapa (que actualmente es relativamente pequeño para los estándares del género, sobre todo al compararlo con los juegos de Rockstar), nuevos vehículos, más tipos de PNJ y nuevas mecánicas no concretadas.
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Más sobre 171
171 es un juego de acción en mundo abierto desarrollado y publicado por Betagames Group para PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series, Nintendo Switch y PC. Un sandbox estilo Grand Theft Auto creado y ambientado Brasil, en la que nos ponemos en la piel de un pandillero teniendo que realizar todo tipo de fechorías por las calles para ganar dinero y combatir contra bandas de criminales por el territorio, huyendo o enfrentándote a la policía.