PS5 Pro se convierte en la pesadilla de los especuladores: Empiezan a venderla más barata al no haber escasez
La especulación es actualmente una de las grandes lacras a las que nos enfrentamos los jugadores a día de hoy, especialmente cuando se tratan de juegos o consolas con ediciones especiales de tirada limitada, algo que muchos suelen aprovechar para comprar varias unidades y revenderlas posteriormente a un precio muy superior al original, dificultando así que quienes realmente queremos esos juegos o consolas podamos disfrutarlos a su precio de mercado.
El karma por fin actúa contra los especuladores
En vistas de lo que ocurrió con PS5 durante su lanzamiento, cuya escasez de unidades inicial hizo que muchos especuladores hicieran su agosto, no resulta de extrañar que estos indeseables hayan intentado hacer lo mismo con PS5 Pro, aunque por suerte para todos y en lo que parece ser justicia poética, esta vez parece que la jugada les ha salido mal.
Como bien podéis comprobar en casi cualquier tienda online, Sony ha distribuido suficiente unidades de su nueva consola como para impedir que haya escasez, por lo que cualquiera interesado en hacerse con una PS5 Pro puede hacerlo fácilmente en cualquier comercio tradicional sin tener que recurrir a páginas de compra y venta.
Gracias a esto, los especuladoes se han visto obligados a intentar deshacerse de las consolas que habían comprado para revender a un precio inferior al que les costó, teniendo así que venderla a pérdidas.
Eso sí, hay dos excepciones en esta historia que conviene destacar. Por un lado tenemos que el lector de discos, el cual se vende de manera independiente por no incluirlo de serie la propia consola, un accesorio que está agotado en todas partes y que, en consecuencia, los especuladores están pudiendo vender casi al doble de su precio de mercado.
Por otra parte, la edición especial por el aniversario de PlayStation de PS5 Pro, de la cual Sony ha lanzado una tirada limitadísima, está siendo revendida al doble e incluso el triple de su precio original.