Cuando se anunció hace un tiempo que Eidos, no LucasArts, preparaba una versión de la Guerra de las Galaxias hecha exclusivamente con piezas de Lego, no fueron pocas las cejas que se enarcaron ante una idea tan poco ortodoxa. Se trataba de adaptar una de las historias de ficción más conocidas, que había tenido numerosos videojuegos basados en ella, y recontarla usando piezas de la popular juguetera danesa. El resultado fue un juego tremendamente divertido, muy imaginativo y sobre todo muy original, y las consecuencias fueron una secuela, contando las historias originales de Star Wars, y más juegos siguiendo la misma idea: Uno de ellos es Lego Batman, y el otro es este Lego Indiana Jones que pronto estará en las tiendas.
Hemos tenido acceso a una versión final del juego, cortesía de Activision, en la consola Xbox 360, para comprobar de primera mano cómo se ha adaptado la historia de Indiana Jones, de las tres primeras películas –la cuarta se estrena este mismo mes- y convertido a piezas de Lego, y el resultado es muy interesante. Lego Indiana Jones cuenta la historia de las películas con un fino toque de humor, ofreciendo al usuario una experiencia que mezcla la acción desenfadada y poco complicada con una serie de sencillos y divertidos puzles, la mayoría de ellos opcionales, resultando un juego para todos los públicos y, como ya comentamos en su día a la hora de hablar de Lego Star Wars, un regalo ideal para el público infantil gracias a su buen humor y diseño imaginativo.
A lo largo de la aventura no solo controlaremos a Indy sino que iremos con frecuencia acopañados de más personajes, a cuyo control podremos cambiar pulsando un botón, o bien pueden ser controlados por otros jugadores que se unan. Que haya un personaje más con nosotros no es para nada anecdótico; los puzzles generalmente requieren de la colaboración de ambos, y mientras que Indy tiene un repertorio de acciones especiales, como poder usar su látigo para saltar entre distantes plataformas, o para azotar a los enemigos, los personajes que nos acompañan de igual modo tienen sus propias habilidades que deberemos conocer y saber utilizar.
Estas habilidades no las usará el personaje en cuestión cuando esté controlado por la máquina sino que seremos nosotros los que tendremos que cambiar a su control y figurar qué es lo que tenemos que hacer. Del mismo modo, a veces tendremos que abrir el camino de un personaje con el otro –el ejemplo más típico es una distancia que solo puede salvar Indy con su látigo, y luego activar un puente para que el otro personaje pase-, o coordinar sus movimientos para poder salvar un obstáculo –por ejemplo, que dos personajes se pongan al mismo tiempo sobre dos interruptores. Nociones conocidas de juegos de este tipo, que en Lego Indiana Jones se van usando de forma más compleja progresivamente.
El juego cuenta linealmente la historia de las tres primeras películas, comenzando con el Arca Perdida y terminando con la Última Cruzada (pese a que cronológicamente el Templo Maldito sea la que ocurre antes), dividiéndose en niveles inspirados en las situaciones de los filmes. Cada nivel tiene una duración más que decente, y mientras algunos parecen adaptaciones calcadas de la película, en otros se "tira un poco de imaginación" y se añade más escenario a una situación que en el film es breve (por ejemplo, en el Arca Perdida, la visita que Indy hace a Marian en el centro de Asia, que en el juego incluye un nivel entero cruzando cuevas y otros entornos tibetanos.
Del mismo modo que se han traspasado los lugares, y los personajes, también ha ocurrido lo mismo con la historia. Lo que nos ha sorprendido aquí es el finísimo toque de humor que LucasArts ha "inyectado" al juego, mayor que el visto en LEGO Star Wars, y en ocasiones tremendamente divertido, sin dejar de ser humor "blanco" y apto para todos los públicos. A las situaciones humorísticas contribuye también el notable repertorio de expresiones faciales de las caras de Lego que nos encontraremos por el juego. Parecen todas iguales, y de hecho lo son salvo por pequeñas diferencias, pero las animaciones son muy divertidas.
Como en anteriores juegos de Lego, mientras que progresar por el juego de forma lineal, sin complicaciones, es muy sencillo, la cantidad de cosas opcionales que encontrar es muy grande y cautivará a los más jugones. Cada nivel está repleto de secretos que se activarán interactuando con el escenario, a veces de forma muy directa como cavar un tesoro, otras requiriendo la activación de puzles más o menos complejos, pero siempre ofreciendo la alternativa de tirar hacia delante sin complicaciones, o pararse a examinar el escenario para encontrar más y más piezas de Lego y así subir nuestra puntuación.
A nivel gráfico el juego no asombra ni mucho menos, mostrando esta versión de Xbox 360 una gran cantidad de objetos en pantalla y unos buenos escenarios pero evidentemente quedando muy lejos de lo que puede dar de sí la consola de Microsoft; el mismo aspecto tendrá el juego en PlayStation 3. En el sonido destaca la gran variedad de efectos sonoros y la conocida música de las películas, aunque no está doblado al castellano sino que las voces son murmullos, lo que hace de las escenas cinemáticas, sin subtitular, un ejercicio de mímica donde las caras y los gestos, graciosos por tremendamente limitados, de los personajes, son completamente protagonistas.
Realmente no hay mucho más que decir de Lego Indiana Jones. Sigue las líneas de los Lego Star Wars, pero a nosotros nos ha parecido que la historia es más humorística, introduciendo más chascarrillos y ligeras modificaciones en el guión, y que el diseño del juego por su parte incide más en el juego cooperativo entre los personajes y cuenta con mayor número de puzles, quedando las secuencias de acción en un papel algo más secundario. Los fans de Indy deberían tenerlo muy en cuenta por lo que significa como homenaje y por lo divertido que resulta y, como ocurre con los anteriores juegos de Lego, resulta tremendamente recomendado para los más pequeños. El 6 de junio, ya saboreada la cuarta película en los cines, podremos revivir de manera ligeramente diferente las tres primeras aventuras del arqueólogo más famoso de la gran pantalla.