Uno de los juegos en versión jugable en el X06, aunque en un estado de desarrollo todavía temprano, era Forza Motorsport 2, que por primera vez se mostraba al público sin ser en vídeo, como en el E3. La segunda parte del ambicioso simulador de Microsoft sigue la línea de la primera, ofreciendo a los jugadores una simulación realista de la conducción, al volante de una selección de los mejores coches del planeta.
La demo que pudimos probar, al ser una versión muy temprana, estaba algo verde en el apartado gráfico; aunque el modelado de los coches podía considerarse casi definitivo, y éstos tenían unos memorables daños en tiempo real, el resto de características visuales del juego todavía estaban por depurar. Los escenarios tenían poco detalle, y el juego todavía se movía a 30 fotogramas por segundo.
Un diseñador nos comentó, mientras lo probábamos, que la versión final correrá a 60 fotogramas por segundo, y que los escenarios tendrán una cantidad de detalles mucho mayor, poniendo como ejemplo la hierba del circuito en el que corríamos, que en la versión final será poligonal.
En la versión mostrada solamente podíamos correr en un circuito, una carrera de tres vueltas contra un solo coche controlado por la CPU. El nuestro podíamos elegirlo entre una lista bastante notable, con Ferraris, Maseratis, Porsches y otros coches como el Chrisler Viper del 99, o una versión especial del Subaru Impreza. El modelado de los coches era fotorrealista, pero lo que más nos llamó la atención en este sentido es el avanzado motor de daños en tiempo real. No se trata solo de abolladuras cuando el coche choca, ni de detalles como perder los espejos retrovisores tras un choque, sobre todo llama la atención cómo la carrocería va viéndose afectada por cada roce que tengamos, por las superficies que pisemos, manchándose, rallándose, rascándose y abollándose.
A nivel jugable Forza 2 es muy similar a la primera parte, lo cual es una muy buena señal. Aunque el control todavía estaba por pulir, pues a veces el analógico tenía una sensibilidad demasiado elevada y una respuesta algo lenta, la simulación de conducción es muy buena, muy realista, y por suerte contábamos en la demo con el memorable sistema de ayudas a la conducción del primer Forza, la línea que se pinta marcando la ruta ideal y cambiando de color según tengamos que acelerar o frenar, de forma gradual. Pudimos jugar varias veces a la demo y comprobar la suave curva de aprendizaje del juego, pasando de perder por quince segundos contra la máquina a ganar holgadamente, incluso prescindiendo de las ayudas visuales.
No hay mucho más que decir sobre Forza Motorsport 2, que parece seguir la línea del primer juego, aunque obviamente con un apartado gráfico muy superior. Precisamente esto último era lo que menos lucía de la versión mostrada en el X06, aunque el diseñador nos repitió, por activa y por pasiva, que se trataba de una versión muy temprana y que la versión final será mucho mejor a nivel visual. Por la parte jugable, sigue siendo un gran simulador. Estará en las tiendas a lo largo de 2007, y nuestra apuesta es que más tarde de lo esperado.